Uttopion, el metaverso apadrinado por Juan Roig, vende en dos meses solares por 1,5M de euros

Se llama Uttopion y está considerado el primer metaverso español. No en vano, tiene ya dos años y eso, en los tiempos de Meta, es síntoma de madurez. Sus raíces apenas se remontan a la primavera de 2020, cuando el confinamiento llevó a Soraya Cadalso y Miguel Ángel Fito Jordán, socios hasta entonces en el mundo de la restauración y los eventos de música en directo, a organizar conciertos digitales como alternativa a la quiebra. Y resultó un éxito. "Creamos un metaverso sin saber que estábamos creando un metaverso de música", recuerda Cadalso.

En su primer año de vida, organizaron más de 100 eventos, lo que les permitió validar todo, desde el 'ticketing' digital hasta el modelo, y en su breve historia cuentan con hitos como haber sido pioneros en virtualizar la primera sala de conciertos de España para Mahou. Unas credenciales que llevaron a los responsables de Lanzadera, la aceleradora del presidente de Mercadona, Juan Roig, a seleccionar a Uttopion en su lista de este 2022. Y el crecimiento ha sido exponencial.

TE PUEDE INTERESAR

Ya no podrás distinguir realidad y ficción: la herramienta que te hará creer en el metaverso

Mario Escribano

"Entramos como 'traction' [fase inicial en el esquema de Lanzadera] y ya vamos hacia 'growth' [empresas con potencial y que persiguen un crecimiento más rápido]", señala Cadalso. De hecho, su objetivo para este año es alcanzar una facturación de 10 millones de euros, ingresos que obtendrá, fundamentalmente, por la venta de parcelas en su metaverso y por acuerdos de publicidad. "En dos meses hemos vendido 1,5 millones de euros en parcelas", señala la cofundadora de Uttopion.

Es precisamente esta posibilidad de hacer negocio la que diferencia al metaverso del juego de los Sims. "El metaverso como tal no es un videojuego, es un mundo virtual en el que las personas, a través de avatares, interactúan a nivel social y económico. Cuando hay economía es cuando saltas de videojuego a metaverso", explica Cadalso, quien también reconoce que "el metaverso está en construcción, nadie tiene la verdad sobre el metaverso".

Pero ¿qué sentido tiene que alguien compre una parcela virtual? Llevar a ese mundo, que existe y al que cada vez más gente dedica mucho tiempo, la oferta del físico. De hecho, Uttopion es un metaverso híbrido, que apuesta por vivir en las dos realidades y donde todavía está todo por descubrir.

Por el momento, Cadalso avanza que están hablando ya con marcas para organizar eventos y ha cerrado un acuerdo con una empresa de publicidad exterior, cuyo nombre pide no desvelar, para hacer en Uttopion la misma campaña que en el mundo físico.

Uttopion se ha marcado como objetivo para este año alcanzar una facturación de 10M de euros

Uttopion se organiza en torno a dos comunidades: Musichood, cuyo embrión son los conciertos virtuales que empezaron a organizar en pandemia, y Sportvilla, centrada en eventos deportivos. Cada una de ellas se divide en 'terras', parcelas que se pueden comprar y sobre las cuales el nuevo propietario puede construir su espacio virtual y hacer eventos.

Estos solares son limitados en número, porque están en Blockchain y no se pueden crear más, asegura Cadalso, quien destaca esta naturaleza como una primera muestra del valor de estos solares. Entre febrero y mayo, han vendido el 40% de estas parcelas, y están trabajando en todo el mundo que se puede construir sobre ellas.

TE PUEDE INTERESAR

No hagas el ridículo con el metaverso (o por qué deberías ocuparte antes del propósito de tu empresa)

Alberto G. Luna Diseño: Fernando Puente Formato: María del Mar Pérez

Porque, cuando se compra una 'terra', se tiene que construir un espacio y, como ocurre en el mundo real, se puede comprar desde un sencillo mueble de Ikea hasta hacer un proyecto de diseño. Uttopion ofrece tres opciones: el modelo básico que ofrecen gratuitamente, virtualizaciones personalizadas que van de 390 a 990 euros o proyectos llave en mano, que se negocian uno a uno.

Todos los visitantes entran por la Welcome Plaza o quienes compran un espacio pueden hacerlo desde un 'link' exclusivo de su espacio virtual. "Nuestro metaverso no está tan enfocado a la especulación, sino al contenido. Queremos que se pueda hacer cualquier actividad dentro del metaverso".

Las empresas llevan al metaverso eventos y campañas publicitarias como en el mundo real

Como ejemplo de su perfil más conservador, Cadalso destaca que no tienen una criptomoneda, sino que están desarrollando un 'token' en torno a las actividades que se pueden hacer, que estará supervisado por la CNMV.

"Para que haya economía dentro del metaverso está la figura de los 'tokens', que están más regularizados", explica Cadalso, quien reconoce que "dar un paso en falso puede echar abajo todo el proyecto".