El Gobierno pide a los bancos que blinden la inclusión financiera de los ucranianos

El Gobierno pide a la banca un cuidado especial a los refugiados ucranianos. Así se lo ha transmitido el Tesoro Público a las principales entidades del país en las últimas reuniones con las tres grandes patronales, la AEB (Asociación Española de Banca), la Ceca (Confederación Española de Cajas de Ahorros) y la Unacc (Unión Nacional de Cooperativas de Crédito).

Del mismo modo que el alojamiento y la escolarización de los niños ucranianos, esta medida financiera, alentada por el Gobierno, es clave para la integración de los refugiados en España. El objetivo es que se cumpla sin fallos el régimen gratuito de cuentas de pago básicas (RD 164/2019) para personas con riesgo de exclusión social, que se aprobó en 2019 dentro de una transposición de una directiva comunitaria.

El sector financiero ha mostrado su compromiso con estas cuentas incluso antes de que lo pidiera el Gobierno. Así, por ejemplo, Openbank, el banco 'online' de Santander, lanzó el pasado 10 de marzo una cuenta de pago básica para todos los refugiados ucranianos que se han visto obligados a abandonar su país.

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Jorge Zuloaga

La clave de estas cuentas es que son gratuitas, no remuneradas, y permiten el acceso a una serie de servicios habituales como los ingresos, retirada de dinero en cajeros y transferencias. También se ofrece la posibilidad de tener una tarjeta de débito sin coste alguno.

Para ofrecer esta cuenta básica, los bancos solo exigen un documento de identidad ucraniano, pasaporte o una de las fichas de identidad que está facilitando el Gobierno a los refugiados ucranianos que llegan a España huyendo de la invasión rusa.

Foco en los clientes rusos

Las cuentas de pago básicas se suman a otras medidas que está anunciando el sector financiero, como las donaciones millonarias a asociaciones como Cruz Roja, Unicef, Acnur y Médicos del Mundo; la eliminación de comisiones a las transferencias destinadas a Ucrania, y el uso gratuito de la red de cajeros para clientes de bancos ucranianos.

Estas medidas no han impedido que los bancos vuelvan a recibir críticas de las asociaciones de banca armada, que están en contra de la financiación de empresas del sector armamentístico. Dos representantes de este movimiento estuvieron el pasado viernes en la junta de accionistas de BBVA —la primera que se celebra este año— para afear que el sector está "blanqueando" la realidad gracias la crisis ucraniana.

Junto a las ayudas a Ucrania, el Gobierno y los bancos llevan semanas manteniendo frecuentes reuniones para coordinar las sanciones a Rusia y definir una estrategia ante la oleada de ciberataques. La última instrucción del Tesoro Público ha sido que se analice la titularidad real de todas las sociedades que tengan accionistas rusos, de cara a detectar empresas que puedan estar pasando desapercibidas a las sanciones aplicadas por la Unión Europea a 877 personas y 62 entidades.

Las entidades también tienen orden de bloquear depósitos de más de 100.000 euros y cualquier otra operación sospechosa de clientes rusos. De hecho, ya se están paralizando ingresos en ventanilla y en cajero a clientes de esta nacionalidad.