Oughourlian recicla el ADN 'socialista' del Grupo Prisa

Un mes después de ocupar la presidencia, Joseph Oughourlian sigue implementando pequeños grandes cambios en la estructura de Prisa. No son los más relevantes en términos operativos, pero sí en un orden simbólico: entra savia ‘nueva’ y salen viejos pilares de la casa. El inversor francés quiere introducir nuevas figuras con peso en el negocio editorial, una vez que la estructura financiera goza de certidumbre hasta 2025 (extensión de la deuda) y cuenta con 275 millones para costear su transformación.

Este nuevo giro se visualiza este martes con el nombramiento de Miguel Barroso como nuevo vocal del consejo de administración y del consejo editorial en representación del fondo Amber Capital, primer accionista del grupo, al tiempo que se sustancian salidas de personajes de gran peso en la historia de Prisa, como son las del expresidente Felipe González, integrante de ese órgano asesor, y la de Augusto Delkader, director editorial de Prisa y durante décadas responsable máximo de la Cadena SER.

Opinión

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Amber Capital lleva atrapada en Prisa más de siete años. Más de los previstos cuando valoró la oportunidad de invertir en una compañía en crisis. Era 2014. El tiempo ha pasado y Oughourlian ha logrado antes llegar a Moncloa, gracias a su relación fluida con Pedro Sánchez siendo oposición, que a tomar las riendas del grupo, primero en manos de Juan Luis Cebrián y luego, de manera indirecta, del Banco Santander. Aunque una vez alcanzado ese hito, presidencia incluida, tenía clara la renovación de la cuota socialista.

Oughourlian ha madurado el proceso tras varias intentonas. En ese juego de desgaste, sondeó a muchos interlocutores, tanto para alinear a Telefónica a su tesis como para encontrar consejeros que modelaran su plan. En ese camino se terminó cruzando Barroso, candidato ideal a tenor de su perfil: asesor del Gobierno socialista en los 80 y alto cargo bajo el mandato de Zapatero, ejecutivo experimentado en el mundo de la gran empresa en multinacionales como FNAC y WPP y rival del viejo 'establishment' de Prisa.

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Algunos nombres del cambio salieron a colación en la primera embestida de Amber, en la junta ordinaria de junio de 2020. Entonces, el cambio de posición de Telefónica ya estaba madurado, tras haber renunciado a vender su 10% (sí lo había hecho a tener consejero), pero la conexión con Amber Capital estaba verde. No fue hasta después del verano cuando Oughourlian tocó a Barroso, después de que el candidato tocado por la operadora, José Miguel Contreras, cofundador de La Sexta, se cayera de la quiniela.

Desde ese primer encuentro, Amber midió las posibilidades de Barroso como futuro consejero, un encargo que no llegó hasta este 2021, una vez que Oughourlian había consumado su golpe. Todo lo demás ya está contado: la división del grupo en Prisa Media y Santillana, la aceleración en la digitalización de los negocios (inspirados en la BBC y 'The New York Times') y la llegada de caras nuevas para el consejo (como Rosauro Varo) y el capital (Vivendi ya tiene el 10%). Todo para sacar dinero a su inversión millonaria.