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Mahou compra Brutus en su cruzada por conquistar la cerveza artesanal
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Adquiere un 70%

Mahou compra Brutus en su cruzada por conquistar la cerveza artesanal

Esta es la cuarta marca que ha sido adquirida desde que ha comenzado la estrategia. En 2014 ya compró Founders y, más tarde, Nómada y Avery Brewing.

Foto: Imagen cerveceria
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Brutus es la última cerveza artesanal que Mahou-San Miguel ha comprado. Tras hacerse con el 70% afirma que quiere “inicidir en su estrategia de premiumización”. Aunque ya pisa fuerte en el mercado nacional, con un 34% de la producción, el gigante de la hostelería quiere conquistar el sector más elitista, en el que se demandan marcas más modernas y atípicas.

Esta es la cuarta marca que ha sido adquirida desde que ha comenzado la estrategia. En 2014 ya compró Founders y, más tarde, Nómada y Avery Brewing (2016 y 2017 respectivamente). Además, ha creado un ‘hub’ para los productores de este tipo de cerveza.

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Pero, se ha lanzado por esta empresa de forma específica, además, por sus posibilidades de expansión dentro del sector. El director general en la unidad de España, Peio Arbeloa, ha explicado que “esta cerveza es un soplo de aire fresco para la categoría; con una personalidad única que complementa a la perfección nuestro portafolio y que va a ayudarnos mucho en nuestra estrategia de premiumización”.

Y, para conseguir esa “premiumización” se han decidido por mantener a su creador, Jordi Calvet, liderando el plan estratégico y “con independencia creativa y comercial”.

Lo que ha comprado Mahou-San Miguel es una marca fundada en 2015, por Calvet y Carlo Pozzali. En ese tiempo se ha posicionado “de forma destacada” en ciudades como Barcelona, Madrid, Tarifa e Ibiza y con presencia en más de 350 puntos de venta.

El primer cambio que sí se realizará con respecto a la marca es su ubicación. Ahora Brutus pasará a producirse en uno de los centros de producción de la compañía situado en Alovera (Guadalajara).

Foto: Cervezas. (Pexels)

Concretamente, lo que más valoran de la marca son sus expectativas de crecimiento a 5 años debido a su “clara diferenciación con respecto a otras marcas”. Para potenciar esas oportunidades que desde la compañía ven, van invertir “de forma relevante” en esta marca.

El ya exdueño de la compañía se muestra satisfecho y explica que aceptó la oferta, “no solo por su cuota de mercado sino por sus valores y visión estratégica. Por eso ha entendido perfectamente lo que Brutus quiere aportar al mercado”.

Brutus es la última cerveza artesanal que Mahou-San Miguel ha comprado. Tras hacerse con el 70% afirma que quiere “inicidir en su estrategia de premiumización”. Aunque ya pisa fuerte en el mercado nacional, con un 34% de la producción, el gigante de la hostelería quiere conquistar el sector más elitista, en el que se demandan marcas más modernas y atípicas.

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