Vasile dispara contra Competencia: “El árbitro asimétrico es el enemigo”

Mediaset ha celebrado este miércoles su Junta General de Accionistas marcada por la investigación que la CNMC mantiene abierta por posible concentración de mercado y la amenaza de ‘players’ como Netflix o Amazon. Asuntos espinosos que Paolo Vasile, consejero delegado de la compañía, ha tratado sin ambages.

“El verdadero problema en este sector puede ser el árbitro”, ha señalado en relación al papel de la CNMC, organismo al que ha acusado de no ser objetivo ni equilibrado en sus decisiones sobre el sector audiovisual. Desde hace meses, regulador mantiene una investigación abierta sobre Atresmedia y Mediaset por posibles prácticas anticompetitivas en el mercado publicitario, un asunto que ha tensado al máximo las relaciones con el organismo que preside José María Marín Quemada. La resolución del caso, que se prevé en pocas semanas, puede acabar en una sanción millonaria.

Vasile, que ha arrancado su intervención analizando el panorama audiovisual, también ha querido dedicar un tiempo a las plataformas OTT como Netflix sin mencionarlas en ningún momento. En concreto, el directivo ha incidido en que este tipo de compañías no están sujetas a las mismas reglas que los operadores tradicionales y ha reprochado a Competencia su inacción. “El árbitro asimétrico es el enemigo”, ha señalado.

“El verdadero problema, el verdadero enemigo, puede ser la discriminación derivada de la asimetría, el metro diferente con el que se juzgan sujetos que pertenecen al mismo entorno competitivo: ojo de halcón para algunos, ceguera absoluta para otros”, ha señalado. “El verdadero problema, el verdadero enemigo, es la discriminación que deriva de la asimetría: hay quien vive sometido y aplastado por unas normas concebidas para un mundo que ya no existe y quien no tiene reglas, quien no debe pagar ni impuestos, ni errores, ni horrores”.

En palabras de Vasile, la CNMC ignora “que ahora ya no solo son las televisiones las que proponen noticias, entretenimiento, películas, series y publicidad” mientras que “endure hasta un nivel inverosímil” los controles sobre la televisión generalista pasando de regulación a “opresión injustificada”.