Kutxa busca un resquicio legal para romper su alianza con la antigua Citi y vender Itínere

La esperada venta de Itínere está pendiente de un último fleco para entrar definitivamente en pista. EÉste se está negociando actualmente entre despachos de abogados, con discreción y mucha diplomacia, y va dirigido a romper la alianza que desde hace años mantiene Kutxabank con los gestores del antiguo fondo de infraestructuras de Citi, ahora agrupados en Corsair, en la sociedad Arecibo Servicios y Gestiones.

Esta instrumental es la principal accionista de Itínere, con un 54,19% del capital, por delante de Abanca (23,8%), Sacyr (15,45%) y Liberbank (5,8%). Un matrimonio cada día peor avenido, ya que, según han confirmado fuentes conocedoras, Kutxa y Corsair mantienen posiciones opuestas respecto a la posibilidad de vender, ya que mientras la entidad vasca está interesada en hacer caja, el fondo quiere continuar como está.

Ante esta divergente posición, Kutxa ha optado por buscar una salida legal que le permita deshacer su alianza con la antigua Citi y poder sumarse así al resto de socios interesados en vender. Consultada por este medio, desde la entidad vasca han declinado hacer comentarios.

Si el banco surgido de la unión de BBK, Vital y La Kutxa logra su objetivo, permitirá desbloquear por completo la operación, ya que la suma de las participaciones de los cuatro interesados en salir de Itínere permitirá al futuro comprador hacerse con la mayoría del capital. Aunque esto no garantiza una próxima fusión con otras concesionarias interesadas, ya que Corsair, al menos a corto plazo, bloquearía tal posibilidad.

Dentro de Arecibo, la firma estadounidense es el accionista mayoritario, con un 69,92% del capital, mientras que la entidad vasca posee el 30,08% restante; por tanto, si deshacen su sociedad conjunta, Kutxabank pasará a tener una participación directa sobre el 16,2% de la compañía de autopistas, y el antiguo fondo de Citi, sobre el 37,8%.

Entre las compañías deseosas de adquirir la participación de las cajas y Sacyr figura Globalvía, que ha presentado ya una carta de interés por la concesionaria, dirigida a abrir tras el verano un proceso de negociación en exclusiva.

Sin embargo, fuentes consultadas por El Confidencial aseguran que, aunque el fondo presidido por Juan Béjar está en una fase más avanzada que el resto, no es el único interesado en comprar Itínere, ya que también han llamado a la puerta del grupo de autopistas grandes firmas internacionales, como los canadienses PSP y The Ontario Teachers.

Viento de cola

Como adelantó El Confidencial, Itínere logró cerrar la pasada primavera la refinanciación de toda su deuda y de su filial Enaitínere, un acuerdo que le permite recuperar la estabilidad financiera para la próxima década, y que llega en un momento en que se están recuperando los tráficos, lo que dibuja un escenario en favor de elevar el precio de su venta.

De hecho, fuentes consultadas por este medio aseguran que las cajas han marcado como precio de partida para estudiar cualquier oferta la cifra de 1.000 millones de euros, cantidad a la que deberán sumarse otros 3.000 millones de deuda financiera.

Itínere cerró el pasado ejercicio con una cifra de negocio de 279,5 millones, tras crecer un 4,2%, un beneficio bruto operativo (ebitda) de 219,7 millones (+5,6%) y una mejora del tráfico medio de todas sus autopistas del 4,25%.