Diana Capital se queda con la 'soltera de oro' del acero vasco

Cuando los herederos son los sobrinos, no hace falta tercera generación. Y menos aún, si son políticos. Ayer lunes, la compañía guipuzcoana Estanda (Fundiciones del Estanda) pasó a manos del fondo de capital riesgo Diana Capital. Sus propietarios, los hermanos Sangrá Inciarte, formalizaron la venta de la compañía, especializada en la fabricación de aceros y aleaciones de altas prestaciones, con servicios de ingeniería especializados, a la firma de inversión capitaneada por Francisco Gómez Zubeldia por un importe aproximado de 25millones de euros, según fuentes financieras.

Fundiciones del Estanda representa el genuino negocio industrial del tejido empresarial vasco. Fundada en 1953, la acería de Beasáin consiguió hacerse un hueco en el sector siderúrgico a lo largo de los años de la mano del grupo de fundadores que lideró Enrique Lartundo Castro. Sólo su nivel de especialización (ferrocarril, automoción, energía, cemento, minería…) y su absoluto perfil exportador (95% de su producción) explican el milagro de que una compañía familiar haya sobrevivido durante medio siglo al proceso de concentración de esta industria, con gigantes como ArcelorMittal y Sedinor.

Estanda exporta el 95% de su producción, no tiene deuda y es socio del líder mundial en fabricación de frenos para trenes de alta velocidad

Sin embargo, la sangre de los fundadores ha dejado paso a savia nueva. Los herederos y máximos accionistas de Estanda han decidido hacer caja y ceder el testigo después de más de un año y medio de negociaciones. Los hermanos Sangrá Inciarte dan el relevo a un negocio que han tutelado como consejeros, pero del que nunca han participado como directivos, ya que su vida personal y profesional se desarrolla en Barcelona, de donde son naturales, como su tía carnal Dolores Sandrá Bosch, mujer del empresario vasco Enrique Lartundo, ambos ya fallecidos, que no tuvo descendencia directa.

Esta situación ha sido aprovechada por Diana Capital, el fondo de capital riesgo participado por las oficinas familiares de losMasaveu, Gut, Carceller, Ganchegui, Solé o Alvargonzález, que ha adquirido el 80% de la sociedad, mientras que el otro 20% se reparte entre un grupo de inversores vinculado a la firma. Los planes del equipo de Gómez Zubeldia pasan por impulsar el actual proceso de crecimiento de Estanda, que el año pasado facturó cerca de 70 millones de euros y ganó más de 5, con la singularidad añadida de no tener ningún tipo de deuda financiera, más allá del circulante.

Con esta operación, el fondo de capital riesgo pretende repetir inversiones tan rentables como ejecutadas con su primer vehículo en las compañías vascas Recyde y Guascor. En el caso de Estanda, los planes de Diana Capital pasan por doblar su tamaño en cinco años, aprovechando la renovación del acuerdo de suministro preferente de piezas de acero (discos de freno) con la empresa alemana Knorr-Bremse, líder mundial de sistemas de freno para trenes de alta velocidad, suscrito para el periodo 2014-18, lo que le permitirá fabricarpiezas paratodos los trenes de alta velocidad del mundo.

Estanda cuenta con tres centros productivos en el País Vasco, con una capacidad de producción total de 15.000 toneladas y una plantilla de 280 empleados. La acería vasca representa la cuarta operación de Diana Capital en menos de un año, después que el instituto financiero público ICO se sumara como inversor al fondo de 100 millones levantado por la gestora. De esta manera, la nueva cartera de participadas está ya formada por Gocco (firma de moda infantil), Megafood (concesionaria exclusiva de Burger King para el sur de España) y BQ (fabricante español de dispositivos multimedia).