La cúpula de Telefónica pierde un bonus de 110 millones por la caída en bolsa

La cúpula directiva de Telefónica ha perdido una generosa extra de verano que habría percibido si con su gestión hubiera generado valor para sus accionistas. Según datos oficiales, la alta dirección de la operadora ha dejado de ingresar otros 50 millones de euros por la mala evolución de la compañía en bolsa, una bonificación que se incluía en un plan quinquenal de hasta 750 millones.

El pasado 1 de julio venció el 5º y último ciclo del Plan de Incentivos aprobado en la Junta General de Accionistas de 2006, que contemplaba la entrega gratuita de millones de acciones a un grupo de hasta 1.900 directivos de Telefónica si la acción conseguía batir en bolsa a una cesta de hasta 30 compañías del sector de las telecomunicaciones. El premio oscilaba entre el 30% del importe global si la remuneración total para el accionista –incluido el dividendo- se situaba en la media y hasta el 100% si la española entraba entre las diez primeras clasificadas.

Los ciclos eran de tres años, por los que el último medía el comportamiento de la cotización entre el 1 de julio de 2010 y el mismo día del presente ejercicio. Una vez finalizado el plazo, la posición en el ranking ha sido desoladora, tanto para los accionistas de Telefónica como para sus directivos. Ha concluido entre las diez últimas, tan sólo superada por abajo por empresascomo KPN y Telecom Italia, que han recurrido a ampliaciones de capital para evitar males mayores, y otras como Portugal Telecom y France Telecom.

Telefónica ha quedado muy lejos de compañías como las estadounidenses Sprint Nextel y Verizon, que han duplicado su valor en estos últimos tres años, y la canadiense Telus, que ha subido más de un 60%. Cualquier inversor que hubiera puesto 100 euros en la española habría perdido un 37%, mientras que habría ganado el doble comprando acciones de la coreana KDDI o de BT Group.

La dirección de Recursos Humanos de Telefónica ya ha comunicado a los directivos que no cobrarán esta extra de verano,que ascendía a algo más de cinco millones de acciones. A precios de mercado, algo más de 50 millones de euros. Un resultado similar al registrado en el 4º ciclo del Plan de Incentivos, que saldó también con un sonoro cero. La cúpula se dejó por el camino 6,35millones de títulos gratuitos en lo que fue la primera vez que los elegidos de Telefónica se quedaban sin cobrar un bonus.

No obstante, el programa de fidelización aprobado en 2006 y concluido el 1 de julio de 2013 se ha saldado con la entrega de 12,78 millones de acciones, regalo que, según la cotización bursátil actual, asciende a casi 130 millones de euros. Nada que ver con los 750 millones en los que fue valorado el plan cuando fue propuesto por César Alierta a la Junta General de Accionistas de hace siete años.

Otro premio en marcha

Pese a la pérdida de cerca de 110 millones por la evaporación de los dos últimos ciclos, los ejecutivos de Telefónica tienen ya otro premio cuantioso en marcha. La compañía aprobó en 2011, al mismo tiempo que anunciaba un ERE para 7.000 personas, el llamado Performance & Investment Plan, un programa que consiste en la entrega de acciones de Telefónica en concepto de retribución variable y en función del cumplimiento de los objetivos que se establezcan. El objetivo, como en los anteriores planes de fidelización, es "alinear los intereses del Equipo Directivo del Grupo Telefónica con los de sus accionistas".

El PIP tendrá una duración total de cinco años y se dividirá en tres ciclos de tres años de duración cada uno de ellos (es decir, con entrega de las acciones que correspondan en cada ciclo a los tres años de su inicio), independientes entre sí. El primer ciclo se iniciará el 1 de julio de 2011 (con entrega de las acciones que correspondan a partir del 1 de julio de 2014).El premio global asciende a 450 millones.