Rajoy anuncia una subida total de la luz del 2,3% para el primer trimestre

"Es uno de los temas más complejos que hemos tenido que afrontar en esta etapa", aseguró hoy el presidente del Gobierno,Mariano Rajoy, en referencia al sector eléctrico. Todo antes deanunciar una subida de la luz a partir de enero y para el primer trimestre del año del 2,3%, lejos del 11% que fijaba la anulada subasta celebrada el 19 de diciembre. El incremento se corresponde con un alza del 1,4% del término de energía y un 0,9% de los peajes. Como admitió el líder popular, la solución es transitoria, un parche a la espera de reformar todo el sistema de subastas y de fijación de precios.

El Gobierno toma esta decisión después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) apuntara dos fórmulas para fijar de forma transitoria el componente de la energía en la tarifa. La primera, planteaba una subida del 1,4%, tras tomar como referencia el precio del mercado a plazo en los tres últimos meses de negociación disponibles. La segunda, del 2,9%, acudía a los seis últimos meses. El Ejecutivo se quedó en la banda baja. En todo caso, esa era la de cal, en tanto el Gobierno obteníauna salida viabledespués de que el resultado de la subasta Cesur del pasado 19 de diciembre arrojara un incremento del 25,6%, que habría ocasionado un alza de la luz en enero del 11%.

La de arena, sin embargo, la proporcionaba el regulador al evitar fijar un precio para el conjunto del año, como era deseo del Gobierno. En el informe, el organismo presidido por José María Marín Quemada señala que las dos opciones planteadas forman parte de un "mecanismo transitorio" que permitirá "soslayar" el efecto de no haber considerado válida la última subasta. Sin embargo, añade que sólo es válido "mientras no se disponga de un procedimiento definitivo que asegure la competencia y la estabilidad" yve “negativamente” establecer un único precio como referencia para 2014, al suponer una distorsión en el mercado minorista.

Un pronunciamiento contra los intereses del tándem Soria-Nadal que, como explica hoy El Confidencial, permitía nadar y guardar la ropa a la CNMC, en el punto de mira después de que el Gobierno le solicitará una informe sobre la posible manipulación de los precios en la subasta en cuestión. De este modo, el regulador salva al menos en apariencia la independencia que se le supone a una entidad de muy reciente creación y cuyos movimientos están también siendo vigilados con lupa por la Comisión Europea. No en vanoel nuevo ‘supervisor mayor del Reino’ fue constituido el pasado 10 de septiembreyel conflicto eléctrico supone una verdadera prueba de fuegoque ha obligado a tentarse la ropa a todos los comisionados elegidos a instancia de los distintos departamentos del Gobierno y aledaños.

Al precio que fijara el Ejecutivo dentro de las opciones planteadas por la CNMC debía sumárseleel incremento de las tarifas de acceso derivado de los 3.600 millonesqueCristóbal Montorodecidió a última hora sacar de los Presupuestos del Estado. La amortización anual de este déficit extra de tarifasupone aproximadamente un 1% en números redondos.En todo caso, lacifra final queda muy lejos del 11%que determinóla subasta maldita del pasado día 19, cuando el Gobierno se vio obligado a intervenir el sistema de precios minoristas para no provocar un conflicto social en un servicio especialmente sensible para cualquier país.

A horas vista de que el Ejecutivo tome la decisión final, las eléctricas no quisieron dejar de aportar su visión. El presidente de la patronal (Unesa),Eduardo Montes, dijo hoy mismo en RNE confiar en que el Gobierno tienda a liberalizar el mercado y que, de mantener el actual sistema de subastas para fijar la tarifas,estas se hagan mensualmente para acercase más a las condiciones de cada momento. Asimismo, insistió en defender el honor de las eléctricas asociadas en la patronal y criticó a quienes pretenden demonizarlas por el resultado de la puja. Sobre la propuesta de la CNMC, se congratuló de que al menos está basado en el mercado. Las espadas, con legislación de calado en manos del Consejo de Ministros, siguen en alto.