La lujosa vida de Dominique Strauss-Kahn, el ‘presidente de los ricos’

A sus 62 años recién cumplidos, el francés Dominique Strauss-Kahn lo ha conseguido casi todo. Político del Partido Socialista francés, profesor universitario, ministro de Industria y de Economía, posible candidato al Elíseo o director del Fondo Monetario Internacional son los cargos que adornan su extenso currículum. Sin embargo, sus méritos se han visto ensombrecidos por su vida personal. La prensa internacional le ha criticado duramente por su alto tren de vida, poco solidario con estos tiempos de crisis económica e incompatible con una hipotética candidatura a las elecciones presidenciales de 2012.

Mientras se encarga de velar por las finanzas mundiales, Strauss-Kahn se mueve por un mundo de apartamentos de lujo, casas en rincones paradisiacos o colecciones de arte de lo más selectas. Así lo denuncian varios diarios franceses. De acuerdo con L’Express, la mujer del director del FMI está detrás de este elevado nivel de vida.

Está casado con la periodista televisiva Anne Sinclair, que cuenta con una gran fortuna gracias a una herencia familiar. Es nieta de Paul Rosenberg, uno de los más importantes marchantes de arte del siglo XX que trabajó con los más grandes: Matisse, Picasso, Léger… Además, por su condición de ‘esposa de’, se codea con presidentes y altos cargos de todo el mundo.

Una herencia bien aprovechada

Los Strauss-Kahn son, ante todo, ricos con un amplio patrimonio. La colección de su abuelo es lo que suscita más curiosidad. En este aspecto, han guardado discreción y se desconoce cuánto picassos cuelgan de las paredes de su casa. Sin embargo, algunos de los cuadros que fueron propiedad de Rosenberg han sido vendidos en los últimos años en subastas millonarias en Nueva York. De acuerdo con los expertos de este diario francés, Sinclair conserva como mínimo cuatro pinturas de renombre.

A la colección de arte hay que sumar las propiedades inmobiliarias de los Strauss-Kahn. En el año 2000 el matrimonio se compró un pequeño palacio del siglo XIX por medio millón de euros en Marrakech. Allí, pasan sus vacaciones, aunque intentan ser discretos. El presidente del FMI pasó varios años en Marruecos durante su juventud.

A esto hay que sumar los dos lujosos apartamentos que tiene la pareja en París. Ambos fueron comprados gracias a la creación de una sociedad inmobiliaria, ya que la pareja está casada en régimen de separación de bienes. Uno de ellos, según L’Express, tiene unos 240 metros cuadrados bien iluminados con unas antiguas ventanas de hasta cuatro metros. Fue comprado hace seis años por cuatro millones de euros, aunque ahora podría haber doblado su valor. Sin embargo, en la actualidad residen en Washington por su cargo.

Lo que ha despertado una gran controversia en los últimos días ha sido su coche. En una fotografía que aparecía en diversos medios se subía en un Porsche a la salida de un hotel. Sus representantes han desmentido que el vehículo sea suyo, aunque en el momento de la instantánea se introducía en el asiento del conductor.

Mientras unos critican este alto tren de vida, otros ven detrás de esto una estrategia electoral. Strauss-Kahn podría estar pensando en presentarse a las elecciones presidenciales de 2012 como candidato de los socialistas. Ya lo intentó en los anteriores comicios donde perdió las primarias de su partido frente a Ségonèle Royal. Por ello, algunos medios apuntan a que se podría estar intentando dañar su imagen para frenar una hipotética llegada al Elíseo. Algunos ya ven en él, bautizado como ‘el presidente de los ricos’, al sucesor de Mitterrand. ¿Puede un hombre de izquierdas ser rico? Las urnas tienen la respuesta.