Bañuelos prepara su desembarco en el sector financiero de Brasil

Es un bróker por definición. Por eso mismo, Enrique Bañuelos tiene puestos sus ojos en el sector financiero de Brasil. El empresario valenciano mira de nuevo a la banca, el negocio de intermediación por excelencia. El que fuera fundador de Astroc prepara su entrada en el segmento de la financiación al consumo y los créditos hipotecarios, dos de los productos bancarios más demandados en el emergente país sudamericano donde ahora se abre paso como próspero hombre de negocios.

Su aventura como hombre de fortuna en España también desembocó en el mundo de las finanzas. Entonces, parte del dinero obtenido con la salida a bolsa de Astroc fue destinado a comprar un paquete accionarial del Banco Sabadell. El promotor y gestor de suelos llegó a controlar un 5,25% de la entidad financiera presidida por Josep Oliú a comienzos de 2007, compartiendo intereses con apellidos como Koplowitz, Lara o Andic, sólo un mes antes de que su castillo de naipes inmobiliario comenzara a derrumbarse.

Como entonces, Bañuelos está dispuesto a repetir los pasos. Entonces, el de Astroc articulaba todas sus operaciones a través de CV Capital. Ahora, la plataforma desde la que se ha convertido en el accionista de la primera inmobiliaria de Brasil se llama Veremonte, el brazo inversor desde el que prepara su salto al mundo financiero, según han explicado a este diario fuentes de su equipo. Y como en el pasado, será siempre con la aspiración de convertirse en accionista de referencia.

El foco de Veremonte está puesto en discriminar la mejor opción entre firmas financieras brasileñas especializadas en los segmentos de consumo e hipotecas. El gigante brasileño acapara gran parte de las expectativas de crecimiento de la economía global y su pujante clase media está llamada a acudir al crédito para poseer los bienes propios de su nueva condición social. Esta oportunidad es la que ha detectado Bañuelos, igual que otros operadores globales como Santander o Telefónica han hecho con el país. 

Probablemente, al contrario que en su primera etapa de éxito, Bañuelos cuenta con la experiencia del pasado y con un equipo de personas a su alrededor más profesional. Y como antes, también mantiene los mismos aires de grandeza. A pesar de su breve periplo por Brasil, el valenciano tiene ya oficinas abiertas de Veremonte en las ciudades de Sao Paulo y Londres, y trabaja para la inminente apertura de otra sede en Madrid. Además, cuenta con personas a su cargo en Amsterdam y China.

La reconstrucción de la figura de Bañuelos, que concedió una única entrevista en Exame, la publicación financiera de Brasil más famosa para presentarse en sociedad antes de cotizar en bolsa, sigue los pasos dados con Astroc. Para igualar su meteórica ascensión en España, el valenciano ultima algún tipo de acción de carácter benéfico, como ya hizo con su propia fundación, desde la que pretendía ejercer acciones de carácter social y cultural a través del mundo de las artes.