La campeona paralímpica de 17 años que triunfa en esquí y en surf: "Los límites me los pongo yo"

¿Se imaginan la dificultad que puede tener, para una joven, compaginar sus estudios con el deporte de alto nivel? Cumplir con las obligaciones escolares, sumadas a los exhaustivos entrenamientos y, por supuesto, a los viajes para competir, provocan que la agenda de una atleta de 17 años no sea sencilla. Pero, ¿y si en vez de competir en un deporte lo hiciera en dos? ¿Y si, además, es una de las grandes estrellas paralímpicas? Audrey Pascual es un caso único en el mundo y lo tiene claro: "Los límites me los pongo yo misma. Querer es poder y, si quieres algo, solo tienes que ir a por ello".

Sin haber cumplido aún la mayoría de edad, esta joven natural de San Sebastián de los Reyes (Madrid) está demostrando a medio mundo de lo que es capaz. A pesar de su temprana edad, su palmarés es realmente impresionante y su recorrido para seguir mejorándolo es grande. Es de esas deportistas tocadas por una varita y que son capaces de hacer bien todo lo que se proponen, a pesar de las dificultades que le ha puesto la vida desde que era una niña.

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Iñigo Corral

Audrey Pascual tiene agenesia bilateral de tibias, por lo que desde que nació ha tenido que adaptarse a la vida sin sus piernas. Y no solo lo ha hecho con una sonrisa en su cara, sino que desde muy temprano descubrió que tenía un don especial para el deporte. Casi por casualidad, descubrió que el esquí se le daba realmente bien: pronto, llegaron las competiciones y los tempranos éxitos, unos brillantes logros que continúa teniendo a día de hoy.

Este año ha estado a punto de cumplir su sueño de estar en los JJOO de invierno, pero no ha sido posible: la esquiadora necesitaba sumar puntos en varias competiciones internacionales, pero solo ha podido disputar una, por lo que su presencia está complicada: "El covid me ha quitado un año", comenta Audrey Pascual a El Confidencial. A pesar de ello, sabe que tiene mucho tiempo por delante: "Suelo ser la más joven en las competiciones, tanto nacionales como internacionales".

Pero, ¿cómo descubrió el deporte? "En el esquí empecé por casualidad. Era invierno, mis primas son súper deportistas y decidieron ir a la nieve. Yo no podía esquiar porque no tengo piernas, pero les dije a mis padres que quería probar. Aunque la primera vez no me hicieron mucho caso, insistí... hasta que lo probé. Es curioso, pero no me gustó y, a pesar de ello, decidí darle una segunda oportunidad. Fue entonces cuando descubrí que me gustaba de verdad", afirma la deportista.

El despegue definitivo

A partir de ahí, ese gusanillo del deporte la fue enganchando hasta darse cuenta de que tenía potencial para lograr grandes éxitos. Con solo 13 años, ya fue nombrada mayor promesa del Trofeo Santiveri de esquí adaptado, un logro que repitió solo un año después. Al mismo tiempo, Audrey comenzó a practicar handbike (ciclismo adaptado) como parte de su preparación y también descubrió que era capaz de estar entre las mejores de Madrid, logrando varios triunfos.

Sería en 2017 cuando la deportista de la Fundación También vivió su despegue, con una medalla de oro de slalom y otra de plata en gigante, en el Campeonato de España. A partir de ahí, numerosos títulos y triunfos que la han convertido en una de las grandes promesas del esquí adaptado logrando, entre muchas otras cosas, tres títulos en la Copa de España -en dos ocasiones tanto en slalom como en gigante- (2018, 2019 y 2021), además de ser campeona de la Copa de Europa (2022).

Pero no es el único deporte que practica. Como pasó con el esquí, el surf apareció por casualidad. "Hicimos un viajes de amigas y, curiosamente, el seleccionador de Cantabria me vio. Se acercó a mí y me pidió que compitiera. Así, este año fui al Campeonato de España de surf en Galicia y lo gané. Después, fui al Mundial de California, donde logré bronce y sumamos la plata por equipos", explica a El Confidencial. Como ven, una deportista nata con una cualidades únicas para competir.

"No sabría elegir entre los dos deportes, además uno es de verano y otro de invierno, por lo que los puedo compaginar bien", afirma. "Eso sí, no hay mucha diferencia entre ambos, en los dos voy sentada y tengo movimientos muy parecidos", explica Audrey. Pero no se cierra puertas y en su cabeza ya pasa la idea de probar nuevas disciplinas que le atraen: "Me gustaría probar en el atletismo y en el kárting". Un ejemplo de superación constante.

Pero Audrey no solo piensa en el deporte. "Cuando termine Bachillerato, mi idea es estudiar un Grado y seguir compitiendo. Quiero seguir mejorando en el deporte, pero tengo que tener un plan A y un plan B", explica. A pesar de ser una de las mejores deportistas jóvenes de nuestro país, es consciente de la importancia de contar con una buena formación y sabe que esa puerta no la debe de cerrar. Un ejemplo más de que los límites solo se los pone ella misma.

Pero, en estos casos, es fundamental contar con el apoyo de empresas y patrocinadores que ayuden a las familias a costear los gastos del deportista. Es el caso de Almar Consulting, que se ha volcado en ayudar a Audrey Pascual: "Casualidades de la vida, es compañera de colegio de mi hija y nos hemos encontrado varias veces en Sierra Nevada y Baqueira. Nos vimos el pasado mes de julio y, entonces, me enteré de la falta de apoyo económico que tiene, por lo que decidimos ayudarla", explica a El Confidencial José Luis Miró, CEO y Fundador de Almar Consulting.

"En ese momento, decidimos establecer un plan con su familia para ver cuáles eran sus necesidades y saber qué es lo que no cubría ni el COE ni la Fundación También. Desde Almar Consulting ayudamos a cubrir los gastos de material -salvo la silla, que pertenece a Allianz- y los viajes", explica Miró. Posiblemente, estemos ante una de las deportistas más preparadas y más competitivas de nuestro país, capaz de brillar en todo lo que se proponga y con el sueño de llegar a los próximos JJOO. Como dice la propia Audrey, los límites serán los que ella misma se ponga.