El toque de atención de Simeone convirtió a Morata en el nueve de moda en Europa

Álvaro Morata atraviesa uno de los mejores momentos de forma de toda su carrera. El delantero del Atlético de Madrid está demostrando que es el delantero que necesitaba el conjunto colchonero y lo está haciendo a base de goles. A pesar de que este verano estuvo muy cerca de dejar la disciplina rojiblanca, la decisión de quedarse llegó tras una conversación con el Cholo Simeone en la que le convenció de que era el momento de tomar responsabilidades.

Desde que Morata debutara en el fútbol profesional en 2011, siempre se le puso un pero: era un delantero fuerte, potente, de área... aunque sin ser un portento del gol. Uno de esos jugadores que terminaba haciendo buenos números anotadores por la posición que ocupa en el campo pero que, en la estadística de disparos a puerta, no salía ganando. A pesar de ello, su carrera por Real Madrid, Chelsea, Juventus y Atlético de Madrid le avala como delantero.

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EFE

Sin embargo, al acabar la pasada temporada, el Atlético de Madrid le colgó el cartel de transferible. Su salario de 6,5 millones y el hecho de que no fuera un delantero que marcara las diferencias, provocaron que el conjunto colchonero estuviera dispuesto a escuchar ofertas por él. Inter y AC Milan se interesaron por la oportunidad de hacerse con sus servicios, pero el internacional español declinó ambas ofertas. Decidió apostarlo todo por su continuidad en el Atlético.

Pero no fue una decisión sencilla, sino que vino precedida de una conversación con el propio Simeone. El entrenador consideraba que era un jugador importante, con el que contar y al que darle la responsabilidad del ataque rojiblanco, pero que tenía explotar aún más sus cualidades. O, dicho con otras palabras, debía de ser un delantero mucho más goleador de lo que era: por edad, por estilo de juego y por galones, debía de ser un futbolista que marcara las diferencias.

"Hemos hablado con él y le hemos dicho lo que pensamos, que debe de mejorar sus números. La pasada temporada tuvo muchas situaciones de gol y le anularon muchos otros. Está en su edad perfecta, por cómo se lleva con sus compañeros. Está en el momento de dar 18 goles", explicaba Simeone en una entrevista con Marca. Este toque de atención, sumado a la posibilidad de tener que dejar el equipo, hicieron despertar a un Morata que está dando su mejor versión.

Ahora, Morata es un jugador diferente. No solo está firmando una temporada que le permite estar entre los mejores delanteros del momento, con 11 goles en los 19 partidos que ha disputado -Liga, Champions y Selección-, sino que está firmando los mejores números de su carrera. Promedia 1,1 dianas por partido, superando con creces su mejor temporada, aquel 2016-17 en la que marcó 20 goles en 43 partidos con el Real Madrid. Es decir, 0,47 goles por encuentro.

Morata ha sabido entender a la perfección lo que Simeone le pedía y está confirmando que puede ser el goleador que necesitaba el Atlético de Madrid. Acaba de empezar la temporada y está solo a 7 goles de lo que le exigía el Cholo como mínimo. Morata ha comenzado el curso como un tiro y está demostrando que no se equivocó cuando decidió quedarse en el conjunto rojiblanco. Quién sabe si estamos ante su verdadera confirmación como delantero goleador.