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Lo mejor y lo peor | El Bernabéu estalla contra Bale el día que Vinicius se disfrazó de Modric
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VICTORIA CÓMODA DEL MADRID

Lo mejor y lo peor | El Bernabéu estalla contra Bale el día que Vinicius se disfrazó de Modric

El templo blanco ha dictado sentencia con el delantero galés, un jugador que pudo ser leyenda del equipo y que, por sus malas decisiones, no ha entrado en el corazón del público

Foto: Gareth Bale, en el campo ante el Getafe. (Reuters/Javier Barbancho)
Gareth Bale, en el campo ante el Getafe. (Reuters/Javier Barbancho)

El Real Madrid logró una importantísima victoria ante el Getafe (2-0), en un partido en el que los blancos dieron un paso más que importante en la lucha por la Liga el día que Gareth Bale regresó al Santiago Bernabéu. Tuvieron que pasar 773 días, una pandemia y unas faraónicas obras -amén de numerosos problemas físicos- para que el galés volviera a tener minutos en el césped del estadio del que todavía es su equipo... pero la afición no le perdonó sus últimos actos y palabras: el público le recibió con una sonora pitada, que se repitió cada vez que tocó el balón, y que dejó en un segundo plano la exhibición de un gran Vinicius.

Y es que el regreso de Bale al Bernabéu eclipsó el gran partido del brasileño. Vinicius, que comenzó la temporada como un tiro, llevaba varios encuentros mostrando su versión más gris, más centrado en pequeñas batallas con los defensores que en tratar de marcar las diferencias. Pero ante el Getafe eso cambió: se le pudo ver cómodo desde el comienzo del partido, diseñó todo tipo de regates y de fintas y, por si fuera poco, se inventó un espectacular pase de exterior al más puro estilo Modric para que Casemiro acabara con la resistencia del Getafe y adelantara a su equipo. El Madrid va a por la Liga y dio un golpe de autoridad ante los 'azulones'.

Lo mejor | El gran partido de Vini

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Foto: Reuters/Javier Barbancho.

Vinicius volvió a tener un papel importante en la victoria del Real Madrid, una situación que llevaba ya varios partidos sin suceder. El brasileño, que está firmando su mejor temporada desde que llegara al conjunto blanco, es una de las grandes razones del poder ofensivo del Madrid, pero últimamente no estaba teniendo la presencia en ataque que se esperaba de él. Ante el Getafe, esa situación cambió diametralmente y volvió a ser el jugador incisivo, decisivo e imaginativo que es capaz de cambiar el partido con un simple gesto técnico. Su increíble asistencia a Casemiro con el exterior recordó al mejor Modric y confirmó que su chispa no se ha apagado.

Lo bueno | Una jornada menos

placeholder Foto: EFE/Kiko Huesca.
Foto: EFE/Kiko Huesca.

Una de las mejores noticias del Real Madrid es que sacó adelante con buen resultado un partido difícil, quizá no tanto por el rival sino como por lo comprometido del calendario. Y es que era el típico partido que, tras ganar en Stamford Bridge y antes de la vuelta contra el Chelsea, podía provocar cierta relajación en equipo, pero nada más lejos de la realidad. La 'unidad b' del Madrid, con un Camavinga y Valverde espectaculares, respondió y logró tres puntos de oro: solo quedan 21 en juego y los blancos sacan 12 a su principal perseguidor. Asegurando los nueve puntos en el Bernabéu y sumando alguna victoria domicilio, la liga tendrá color blanco.

Lo normal | Grandes prestaciones defensivas

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Foto: Reuters/Javier Barbancho.

Es posible que el Getafe dejará mucho que desear ante el Madrid, pero buena parte de la responsabilidad fue del conjunto blanco, que volvió a dar una verdadera lección defensiva. El equipo estuvo realmente implicado en mantener su portería a cero, mostró gran solidez en su retaguardia y confirmo que Militao y Alaba son una de las grandes razones del buen rendimiento del equipo. Los dos centrales brillaron tanto en acciones en campo abierto como en el cuerpo a cuerpo, bien acompañados por Marcelo y Lucas Vázquez, que ganaron línea de fondo siempre que pudieron y mostraron mucha profundidad. De hecho, el gallego fue quien cerró el marcador.

Lo malo | El error de Casemiro

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Foto: Reuters/Javier Barbancho.

Casemiro jugó unos de sus mejores partidos en los últimos meses. Muy solvente en tareas defensivas, fue además quien logró desnivel la balanza con un monumental testarazo llegando desde atrás, en un remate más propio de un delantero 'killer' que de un 'stopper'. Pero no es menos cierto que se le vio en el campo algo más nervioso de lo habitual, protestando sensiblemente varias decisiones del colegiado. De hecho, una de esas acciones le costó la amarilla, lo que le supone perderse el partido trascendental ante el Sevilla por culpa de una extraña salida de tono que podía haber evitado en un momento tan trascendental de la temporada.

Lo peor | El 'momento Bale'

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Foto: EFE/Sergio Pérez.

Todo el mundo sabe que Gareth Bale tiene las horas contadas en el Real Madrid, pero su caso es realmente extraño. Un jugador que ha marcado en dos finales de Champions y una de Copa, siendo básico en los últimos grandes títulos blancos, debería de ser una leyenda en Chamartín. Sin embargo, su mala cabeza, sus penosas decisiones y sus declaraciones fuera de lugar han provocado que sea una persona 'non grata' en el Bernabéu. Tanto que este sábado, más de dos años después, volvió a pisar su césped y la sonora pitada que recibió confirma lo que piensa la afición: un jugador que ha tenido demasiadas oportunidades y que se ha negado a triunfar en el Real Madrid. Él solo se ha buscado no tener un hueco en la leyenda del equipo blanco.

El Real Madrid logró una importantísima victoria ante el Getafe (2-0), en un partido en el que los blancos dieron un paso más que importante en la lucha por la Liga el día que Gareth Bale regresó al Santiago Bernabéu. Tuvieron que pasar 773 días, una pandemia y unas faraónicas obras -amén de numerosos problemas físicos- para que el galés volviera a tener minutos en el césped del estadio del que todavía es su equipo... pero la afición no le perdonó sus últimos actos y palabras: el público le recibió con una sonora pitada, que se repitió cada vez que tocó el balón, y que dejó en un segundo plano la exhibición de un gran Vinicius.

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