Simeone baraja adaptar a Insúa de central izquierdo

Emiliano Insúa (Argentina, 1989) está protagonizando una de esas extrañas historias que, de forma demasiado habitual, se han dado en el pasado reciente del Atlético de Madrid. El defensa argentino fue contratado cerca del cierre del mercado invernal a cambio de 3,5 millones de euros, en una operación que por las formas y el fondo pudiera catalogarse como urgente. Nada más lejos de la realidad, puesto que lo curioso fue que Insúa vino a reforzar el puesto donde quizá era menos necesario una cara nueva, el lateral izquierdo. Es por eso que Diego Simeone busca desde entonces la manera de darle la mejor cabida en su plantilla.

Por el flanco zurdo de la defensa, y desde la llegada del entrenador sudamericano en la Navidad de 2011, se está viendo la mejor versión de Filipe Luis. El brasileño ha alcanzado el prestigio internacional que se puso en duda tras la dura lesión sufrida cuando todavía era jugador del Deportivo. Tras ello, el club rojiblanco apostó fuerte por él y el rubio lateral ha aprovechado la oportunidad, hasta el punto de conseguir regresar a la selección 'canarinha' en las últimas convocatorias que ha hecho Scolari.

Aun así, la dirección deportiva atlética optó por contratar a Insúa el pasado mes de enero, hasta ese momento jugador del Sporting portugués. Simeone entendió el fichaje como una decisión del club, y se centró en la gestión deportiva del mismo. Lo primero que hizo fue aclararle sus respectivas situaciones a Domingo Cisma y también a Jorge Pulido. El primero es quien ha sustituido habitualmente a Filipe Luis esta temporada, y sin desentonar para nada, por cierto, mientras el canterano es el defensa que cuenta con menos posibilidades reales de jugar. De ahí que el técnico comunicara a ambos que Insúa pasaba a estar por delante de ellos, para que si lo veían oportuno, abandonaran el club antes de que se cerrara el mercado de fichajes el 31 de enero. Los dos prefirieron quedarse a pesar de que, como se está demostrando, no iban a contar con apenas posibilidades de entrar en una convocatoria.

Y a la novena convocatoria… al fin debutó

El tema Insúa ha empezado a quedar más en evidencia con el paso de las semanas. Filipe Luis lo está jugando todo por lo que, transcurridos más de dos meses desde su llegada, el argentino aún no había siquiera debutado. Fue el pasado domingo ante el Granada, ya con 5-0 en el marcador, cuando Insúa entró al campo por primera vez vestido de rojiblanco. Era la novena ocasión consecutiva que se sentaba en el banquillo y varios sectores de la prensa y de la afición empezaban a preguntarse para qué se le había fichado.

El lateral, formado en Boca Juniors y adquirido con 18 años por el Liverpool de Rafa Benítez, donde completó su paso al profesionalismo, ha firmado un contrato con el Atlético hasta 2016, mientras la vinculación de Filipe Luis termina un año más tarde. Por eso, Simeone sopesa desde hace semanas la posibilidad de adaptar poco a poco a Insúa como central izquierdo para que, mientras el jugador gana en polivalencia, su plantilla se haga a su vez más versátil a medio plazo.

Los técnicos estiman que Insúa es “mitad Filipe, mitad Cisma”, en cuanto que posee ciertas virtudes atacantes similares a las del brasileño, pero está más compensado en labores defensivas que éste, sin llegar a ser tan buen marcador como el ex del Racing de Santander, que en cambio es quien menos se prodiga en ataque de los tres.

Por encima de todo, le ven posibilidades para jugar en el eje de la zaga, como oportuno recambio de Diego Godín. Las únicas dudas las levanta su estatura (apenas roza el 1'80) pero están seguros de que con su velocidad, colocación y salida de balón podría cuajar un buen papel llegado el caso.