Quique duda entre el Sevilla y 'su' Atlético

Quique Flores tiene un dilema en su cabeza sobre su futuro. El destino ha querido que Sevilla FC y Atlético de Madrid se vean las caras mañana en la final de Copa, precisamente entre estos dos clubes se dirime el actual técnico rojiblanco. ¿Jugar la Champions con el Sevilla o la Supercopa de Europa y la UEFA con el tercer mayor presupuesto de nuestra Liga? A Claudio Ranieri ya le pasó algo similar hace once años, cuando entrenaba al Valencia y le metió 3-0 a su siguiente equipo en la final de Copa, el Atlético de Madrid.

Antes de ganar la Liga Europa, Quique tenía bastante claro que su futuro estaba fuera del Vicente Calderón y sus intenciones eran sentarse en el Sánchez Pizjuán. Los sevillistas tantearon primero a Laurent Blanc y pactaron con el francés pero desde la federación de su país se entrometió. Sus compatriotas han insistido mucho para que sea el próximo seleccionador y su pacto con los nervionenses lo ha aparcado.

El Sevilla le ofrecía a Quique la posibilidad de dirigir a un equipo ya hecho, sin fisuras y con la única nota pendiente de hacer algo grande en la Liga de Campeones. Aspira a la Copa del Rey y hacer un gran papel en Liga. Además, le otorgaban la capacidad para tener voz y voto en la confección de la plantilla venidera. Al ex futbolista le convenció la idea cuando ‘su’ Atlético de Madrid ni era campeón en Europa, ni tenía un puesto amarrado en la próxima UEFA.

Vino el título europeo y el panorama cambió. Actualmente aspira a cuatro títulos si gana la Copa del Rey –jugaría la Supercopa de Europa y España- y su mayor duda es si el club retendrá a todas sus estrellas para el año que viene. Sobre todo al ‘Kun’ Agüero y Diego Forlán. Además de no poder jugar la Champions. Porque Gil Marín ya le ha dicho que también tendrá mando a la hora de fichar y le entrega un cheque en blanco para que se escriba el sueldo.

Quizás si gana este título con su equipo, el sentimiento le empuje a renunciar el proyecto sevillista. Y si lo pierde puede que José María del Nido se ‘enamore’ de su actual técnico, Antonio Álvarez. El entrenador ha logrado el objetivo de Champions y podría sumar un título que se lo puso en bandeja Manolo Jiménez. Álvarez, al contrario que Jiménez, está sabiendo llevar muy bien su lado mediático y su buena prensa sube.

Pero ahí no acaba el intercambio de intereses. Gregorio Manzano está pendiente de cómo finaliza la película. El actual dirigente del Mallorca gusta a ambas directivas, la sevillista y la rojiblanca. Gil Marín admitió en su día que fue un error la no continuidad de Manzano en el Calderón. Una carambola extraña le podría situar en uno de los dos banquillos de cara a la campaña siguiente.