Schuster no tiene tantas 'vidas' como Capello

Todo lo que está viviendo esta temporada el entrenador alemán del Real Madrid, Bernd Schuster, se asemeja bastante al calvario que soportó Fabio Capello en la 2006/2007. Si bien existen motivos económicos que diferencian a los dos preparadores y que pueden hacer que la historia, esta vez, no se repita.

A estas alturas de campeonato, Schuster lleva la misma andadura que el italiano hace dos años. En 11 partidos, ha conseguido 23 puntos, con siete victorias, dos empates y otras dos derrotas, idénticos resultados que logró el Madrid de Capello. A estas alturas del año, se comenzó a pedir la cabeza del italiano por la pobre imagen del equipo, y tuvieron que pedir calma desde las altas esferas, en una imagen que recuerda mucho a la de Pedja Mijatovic ante la prensa este lunes.

Hoy, el ex del Getafe sabe que esa “tranquilidad” y “respaldo” de los dirigentes sólo durará hasta conocer el resultado del próximo partido ante el Recreativo de Huelva. La situación de su equipo recuerda a la de Capello en muchos aspectos. La diferencia de goles es muy parecida (+11 este año, +13 entonces), aunque a estas alturas en 2006, los blancos llevaban sólo 8 goles en contra (por 17 de ahora), y el Barcelona se encontraba también líder pero a dos puntos menos que hoy, es decir, a tres de los blancos.

No obstante, y más allá de la igualdad de sus números, en lo que más se parecen ambos conjuntos es en su juego alejado de la ‘excelencia’, aquella virtud tan deseada por la actual directiva y que se presentó como razón principal para destituir a Capello (pese a lograr el título de Liga tras cuatro años de sequía) y presentar a Schuster como gran valedor de la misma. La ‘excelencia’ no ha aparecido por ningún lado, y el prestigio del Real Madrid en la ‘era Calderón’ sólo se ha sustentado por la efectividad en el campeonato doméstico. Desaparecida esa efectividad, todo se tambalea en la ‘Casa Blanca’. De hecho, Mijatovic ha ‘olvidado’ aquellas razones del verano de 2006, ya que el lunes afirmó que con el transalpino lo que hubo fueron discrepancias insalvables en las diferentes reuniones mantenidas entre ambas partes. Y entre el alemán y la dirección deportiva existe cohesión, según el montenegrino.   

Diferencias sustanciales en el finiquito de ambos

Hace dos años, la afición del Real Madrid pidió la cabeza de Capello en repetidas ocasiones, sobre todo tras las dolorosas derrotas en el Bernabéu frente a Celta (1-2), Recreativo (0-3) y Levante (0-1). En los mentideros futbolísticos se afirmaba, entonces, que Ramón Calderón era el único de la cúpula que mantenía su apoyo a Fabio. Lo cierto es que fue ratificado en el cargo en varias ocasiones cuando la masa social del club y parte de la prensa pedían su cese inmediato. Aunque también es verdad que en aquel constante respaldo mucho tuvieron que ver los 17 millones que debía pagar el Madrid al italiano si le echaba a la calle.

Eso, y que Capello logró resultados puntuales cuando estaba contra las cuerdas, tales como la victoria ante el Barça en el Bernabéu y el empate a tres de la vuelta en el Camp Nou (en el mejor partido de ese año), un empate en el derbi del Vicente Calderón con un Cassano recuperado para la ocasión como revulsivo, o la racha triunfal del último cuarto de Liga que le llevó al título.

Ahora, y según demuestran las encuestas realizadas por varios medios, la afición tiene en su punto de mira otros responsables más allá de Schuster. No se perdona la falta de planificación de la plantilla en el mercado veraniego, tras la obcecación de Calderón con Cristiano Ronaldo. Y por ello, la labor del entrenador, en este caso, tiene atenuantes. Pero en el fútbol siempre se rompe la cadena por el eslabón más débil, y la melena rubia del germano corre evidente peligro. Con la Asamblea de Socios Compromisarios a la vuelta de la esquina, la actual Junta Directiva debe encontrar un buen escudo para amortiguar los golpes…

Calderón, único respaldo de ambos

El año de Capello, a Calderón y a Mijatovic le salió bien la jugada. Pero con el fútbol tan pobre de estas dos últimas temporadas (que no dio para más ni en ‘Champions’ ni en Copa y que sólo se sostuvo por su efectividad en Liga) y alejado del gran Barça de Guardiola, el alemán deberá ahora sacarse varios ases de la manga, como hizo Capello, si quiere seguir al frente de la plantilla madridista.

De momento, ya le han ratificado por primera vez, y se rumorea que, también en esta ocasión, es Calderón de los pocos que desean su continuidad. Pero el finiquito del alemán (estimado en 2,5 millones de euros según algunas fuentes) no es el de Capello, por lo que deberá lavar la imagen que ofrece su equipo con premura. Porque Bernardo no tiene tantas ‘vidas’ como el italiano.  

Si Schuster logra llegar vivo al Camp Nou el 14 de diciembre, y a una distancia con respecto a los azulgranas parecida a la actual, esa nueva edición del Clásico de nuestra Liga puede ser el juez que decida su continuidad. Capello llegó a trompicones al tramo final de la temporada (con problemas dentro de la plantilla tan graves o más que los actuales) y acabó campeón. Schuster, de momento, sigue sus pasos pero cuenta con menos ases en su baraja. Atentos al desenlace.