Portazo de Lopetegui al Wolverhampton: por qué a los chinos ya no les interesa el fútbol

Haciendo bueno aquello de que en todos los sitios cuecen habas, a menos de una semana para el comienzo de la Premier League, el Wolverhampton Wanderers ha visto cómo Julen Lopetegui (Asteasu, Gipuzkoa, 1966) ha decidido abandonar su banquillo. El técnico español llegó a mitad de la temporada pasada y logró un objetivo que se antojaba complicado, como era evitar el descenso. "El entrenador y el club reconocieron y aceptaron sus diferencias de opinión sobre ciertos temas y acordaron que poner fin a su contrato de manera amistosa era la mejor solución para todas las partes", podía leerse en el comunicado con el que se anunció su marcha.

La realidad es que el Wolverhampton, propiedad de un conglomerado de empresas chinas, ya anunció que, "debido a las limitaciones del fair play financiero", tenían que dar "un giro completo en su proyecto". De este modo, puso a sus mejores jugadores en venta, no renovó a otros y los sustitutos brillan por su ausencia. "En mayo, insistí a los propietarios del club la necesidad de nuevos fichajes para poder competir esta temporada. La mala noticia es que el club no parece estar en condiciones de invertir en mejorar la plantilla. No solo no nos hemos reforzado, sino que el club ha vendido varios jugadores importantes", se quejó Lopetegui.

Neves, Collins, Coady, Giles y Jiménez han sido vendidos por más de 100 millones y no se renovó a Moutinho, Diego Costa y Adama Traoré

Así, los Wolves ya han sufrido la pérdida de varios futbolistas que fueron titulares la temporada pasada, como el portugués Rubén Neves, traspasado al Al Hilal saudí por 55 millones; el irlandés Nathan Collins, al Brendford por 26; los ingleses Connor Coady, al Leicester por 8,7; Ryan Giles, al Luton por 5,8, y el mexicano Raúl Jiménez, al Fulham por 6,4. Es decir, más de 100 millones en ventas, además de no renovar a Moutinho, Diego Costa y Adama Traoré. Por el contrario, solo se ha ejecutado la opción de compra comprometida de Matheus Cunha y se buscan jugadores libres. "No soy asesor financiero, soy un entrenador, y lo que constato es que tenemos ocho jugadores menos que la temporada pasada, además de una parte fundamental del grupo que consiguió el objetivo de la permanencia", comentó Julen.

"No soy asesor financiero, soy un entrenador, y lo que constato es que tenemos ocho jugadores menos que la temporada pasada", dijo Julen

En 2016, el conglomerado de empresas china Fosun, con negocios en sectores tan diversos como el industrial, el bancario o el de la moda, compró el histórico Wolverhampton por 45 millones de libras, unos 59,7 millones de euros, según informó la prensa china. Su antiguo propietario, Steven Morgan, vendió todas las acciones. "El fútbol está creciendo enormemente en China y, como parte de nuestra estrategia, tiene todo el sentido comprar este gran club", dijo Jeff Shi, negociador del acuerdo de adquisición por parte de Fosun y principal representante del club.

El presidente y fundador de Fosun, Guo Guangchang, dio que hablar cuando desapareció durante varios días y se especuló que podría estar siendo investigado por corrupción, aunque finalmente reapareció públicamente y desde su empresa se aseguró que había estado simplemente "colaborando con las autoridades". También es llamativo, y más en las actuales circunstancias, que Guangchang sea socio del agente Jorge Mendes, de ahí que el club se convirtiera en puerta de entrada a la Premier de portugueses y más concretamente de la cartera que maneja la agencia Gestifute.

Guo Guangchang, presidente del grupo propietario de los Wolves, es socio de Jorge Mendes, de ahí tantas operaciones con Gestifute

"Me gustaría agradecer a Julen su dedicación. Le contratamos para salvar al equipo y lo consiguió con varios partidos de antelación. Nuestro objetivo era seguir juntos esta temporada, pero ha habido diferencias sobre temas clave, y acordamos que lo mejor era separarnos", indicó Matt Hobbs, director deportivo de los Lobos tras hacerse oficial la marcha del técnico vasco. Por su parte, Lopetegui deseó "la mejor de las suertes para el futuro" y agradeció "la oportunidad que me brindaron en su momento de tomar las riendas de este maravilloso club". Julen deja el Wolverhampton a los nueve meses de su llegada y lo hace junto al resto de su equipo, formado por Pablo Sanz, Juan Peinado, Óscar Caro, Edu Rubio, Borja de Alba Alonso y su hijo, Daniel Lopetegui.

Aunque los chinos pongan de excusa problemas financieros, lo cierto es que desde su país se les ha dejado claro que el fútbol ya no interesa

La salida del exseleccionador español y exentrenador de Oporto, Real Madrid y Sevilla se veía venir desde antes de incorporarse a los entrenamientos del Wolverhampton y se acrecentó cuando públicamente avisó que "necesitamos fichar para ser competitivos". La temporada pasada, Julen Lopetegui dirigió a los Wolves un total de 27 partidos, de los que ganó 10 y empató cinco, y logró el objetivo de mantenerlos en la Premier. Sin embargo, aunque los propietarios pongan de excusa problemas financieros, lo cierto es que desde su país se les ha dejado claro que el fútbol ya no interesa.