Milagro o cuidados intensivos: el Sevilla, obligado a ganar para continuar en Europa
En crisis institucional, en crisis de banquillo, en crisis de resultados, en crisis de fútbol... Todo se tuerce para el Sevilla, que visita Lens entre polémicas y con las cuentas claras
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El Sevilla jugará el martes en el campo del Lens francés el partido de la última jornada del grupo B de la Liga de Campeones, cita a la que llegan ambos ya sin opciones de estar entre los dos primeros y seguir en la máxima competición continental, pero sí con optar al premio de consolación de quedar terceros y engancharse a la Liga Europa. El encuentro se ha enrarecido por la inesperada prohibición del Gobierno francés de que los aficionados sevillistas acudan a Lens alegando un temor a disturbios.
Las cuentas son claras, al Sevilla, con dos puntos, solo le vale ganar para igualarse con cinco a la formación gala, a la que superaría en la clasificación al tener mejor el coeficiente particular después del empate a uno que se dio en el estadio Sánchez-Pizuján el pasado septiembre en el encuentro de la primera jornada de esta fase.
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Por ello, al Lens sí le vale el empate para ocupar esa tercera plaza y pasar a la Liga Europa y dejar así sin opción al Sevilla, equipo que es precisamente el 'rey' de este torneo al haberlo ganado en siete ocasiones, la última en la pasada edición.
La misión para los sevillistas es clara pero también se afronta en medio de un gran pesimismo entre la afición debido a la crisis deportiva, ya que a la mediocre trayectoria en la 'Champions' une que el equipo en LaLiga está inmerso en la pelea por alejarse de la zona de descenso, y también a la gran inestabilidad institucional con la dura pelea por el poder entre los grandes paquetes accionariales.
Además, para dar un toque más de pesimismo entre los sevillistas, están las declaraciones del ministro de Interior francés, Gérald Darmanin, en las que anunció la prohibición a los aficionados del conjunto de Nervión de acudir al estadio Bollaert-Delelis para evitar posibles incidentes entre hinchas, algo que se repite frecuentemente en las últimas semanas en el país galo.
La guinda a esta serie de inconvenientes es la lista de convocados, de solo dieciocho futbolistas, que el técnico uruguayo Diego Alonso ha tenido que confeccionar para el viaje de este lunes a Francia, con siete jugadores que no tienen ficha de la primera plantilla. Hasta catorce bajas cuenta Diego Alonso debido a la gran acumulación de lesionados y también a dos sancionados para ese encuentro. El equipo ya acudió a Palma para el partido que perdió el sábado ante el Mallorca (1-0) con nueve y ahora lo hará con cinco más.
El Sevilla jugará el martes en el campo del Lens francés el partido de la última jornada del grupo B de la Liga de Campeones, cita a la que llegan ambos ya sin opciones de estar entre los dos primeros y seguir en la máxima competición continental, pero sí con optar al premio de consolación de quedar terceros y engancharse a la Liga Europa. El encuentro se ha enrarecido por la inesperada prohibición del Gobierno francés de que los aficionados sevillistas acudan a Lens alegando un temor a disturbios.