La 'insolente' decisión de Osasuna de fichar niños navarros y de clubes de Pamplona

Lo decían los manuales de Periodismo: noticia es que el niño muerda a un perro y no que el perro muerda al niño. Aunque puedan parecer lo mismo, un hecho noticiable es aquel suceso que, de acuerdo a sus características, a las características específicas de cada medio y al criterio del periodista, puede alcanzar la condición de hecho noticioso. En cambio, un hecho noticioso es el hecho noticiable al que se le ha aplicado un análisis, tratamiento y lenguaje para poder adaptarlo a un medio determinado y transformarlo en noticia.

De este modo, que Osasuna fiche a cinco cadetes de la Txantrea, Oberena y Pamplona es un hecho poco noticiable, de ahí que cueste considerarlo noticioso, salvo para los directamente implicados. Sin embargo, añadir en la misma noticia que "Osasuna ha vuelto a meter mano en la marca Athletic en Nafarroa" no es que no sea noticiable, ni por tanto noticioso, sino que se trata de una interpretación perversa de una realidad deformada y que denota un cinismo enfermizo.

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Una cosa es decir que Osasuna "se ha adelantado en su particular batalla con Lezama y se ha hecho con cinco jugadores que pertenecen a conjuntos bajo el manto del Athletic" y otra bien distinta dar a entender que el club que preside el sangüesino Luis Sabalza, no ya no tiene derecho a fichar a los niños de su comunidad foral, sino prácticamente que es antinatural y una insolencia que lo haga. Vamos, como si la capital de Navarra fuera el mismo Bilbao y el Athletic, el equipo representativo de Navarra y de todos los navarros. Leer para creer.

¿Acaso es noticiable que el Racing de Santander capte jugadores de Cantabria, el RCD Mallorca de las Islas Baleares, el Celta de la provincia de Pontevedra, el Betis de la de Sevilla o el Sporting del Principado de Asturias, por no seguir hasta el último rincón del mapa futbolístico? Bueno, pues precisamente por eso tampoco no lo es que Osasuna lo haga en Navarra. Sin embargo, según el diario bilbaíno 'Deia', el club pamplonés tiene una "ambiciosa política de captación en la Comunidad Foral". Sí, la verdad es que al leer el titular fue inevitable pensar que se trataba de una de esas 'fake news' cuya práctica está tan de moda, sobre todo entre quienes encima se permiten verificar las informaciones de los demás.

No es lo mismo convenir que convencer

Pero ahí no queda la cosa, pues en el mismo medio se acusa a Osasuna de tener "una fijación especial con los clubes convenidos con el Athletic", cuando lo que realmente le importa a un niño y a sus padres no es estar convenido, sino convencido... ¿Cómo se puede pensar que niños que juegan en clubes como Txantrea, Pamplona y Oberena, que no solo son navarros, sino de la misma capital navarra, no van a querer jugar en Osasuna? En este caso se trata de cinco jugadores cadetes, es decir, nacidos en los años 2005 y 2006, que han preferido quedarse en Tajonar en lugar de irse a Lezama, algo de lo más normal y en el ejercicio de su libertad para elegir, más allá de los interesados acuerdos que tengan sus clubes y más concretamente quienes los dirigen.

Según informa el mismo medio, el Athletic se ha encontrado con la negativa de los familiares tanto de dos jóvenes jugadores de Pamplona y de Oberena como de otros tres del Txantrea, "quienes están decididos a ingresar en Osasuna, una vez que consideran que es el destino más idóneo para sus hijos, sobre todo por el hecho de continuar en casa y por el proyecto que les ofrece la entidad rojilla, que encuentra debilidades en la fortaleza del Athletic en su terreno". Exceptuando esta última observación, que, salvo que esté mal construida, resulta difícil de entender, pues si Osasuna no tiene fortaleza en Navarra, dónde la va a tener, la argumentación no puede ser y estar más clara.

Lo dice el propio presidente del Txantrea, José Luis Nagore: "Este trasvase de clubes convenidos del Athletic a Osasuna no es algo anormal. Siempre ha sido así y no tenemos por qué rasgarnos las vestiduras. En la época de los Iker Muniain, San José o Iñigo Pérez, que salieron de aquí hacia Lezama, también hubo compañeros suyos que eligieron a Osasuna". Y es que, como indica Nagore a Deia, "al final son las familias y los jugadores los que tienen la última palabra". Vamos, que ningún niño ha mordido a ningún perro, por más que algunos ladren de rabia.