Ni Neymar ni De Gea, la prioridad de Florentino Pérez es el Santiago Bernabéu

Cerrado el periodo de fichajes sin novedades en el Real Madrid, Florentino Pérez sigue trabajando en la verdadera prioridad del club: localizar un inversor para asumir la financiación de la remodelación de Santiago Bernabéu. Un tema que se ha ido demorando con el paso de los meses y que sigue empantanado, lo que es un problema para el club porque debe ser la principal fuente de ingresos ordinarios.

El presidente había llegado a cerrar un acuerdo con International Petroleum Investment Company (IPIC), la dueña de la petrolera española Cepsa, que incluso presentó el acuerdo por el que invertiría 400 millones de euros en la remodelación del estadio a cambio de asumir los derechos de los 'naming rights' del Bernabéu. Sin embargo, el Ayuntamiento paró entonces el proyecto y eso frenó el desembarco de IPIC en Chamartín.

El mes de noviembre pasado, ya con el permiso de remodelación del campo aprobado por parte del Ayuntamiento, IPIC confirmaba que rompía el acuerdo, lo que dejaba al Real Madrid sin inversor para financiar las obras. En el pasado Mundial de Clubes, en Abu Dhabi, y durante los últimos meses, Florentino ha intensificado los contactos con posibles inversionistas. Sin embargo, hasta ahora no ha podido cerrar ningún acuerdo, pese a que han sido varios los grupos que se han interesado en un primer momento en el proyecto.

Ingresos ordinarios y liquidez

La remodelación del Bernabéu pasa por ser transcendental para el futuro económico del club, que una vez finalizada la remodelación vería cómo se dispararían los ingresos ordinarios del club gracias a la explotación de las nuevas áreas del Bernabéu. Esto permitiría al Real Madrid tener mucha más liquidez y estar menos presionado por el peso de la masa salarial de la plantilla del equipo de fútbol, que sin llegar a hacer peligrar el 'fair play' financiero, tiene un peso excesivo en los presupuestos del club.

En los últimos años el Real Madrid ha perdido protagonismo en el mercado de fichajes y los sueldos que se están pagando en el Bernabéu están muy alejados de los que se pagan, por ejemplo, en el Camp Nou. Especialmente sangrante es la comparación con los equipos de la Premier League, que gracias al acuerdo televisivo firmado se han convertido en rivales inalcanzables en las pujas del mercado. Un ejemplo es que Ozil ha renovado con el Arsenal asumiendo la misma ficha que tiene Cristiano Ronaldo.

Un caja llena de millones

Por no hablar de la guerra con los jeques, donde los dueños del PSG y del Manchester City han roto el mercado con sus desembolsos millonarios, pagando las cláusulas de rescisión de jugadores como Neymar o Laporte. El fichaje de Mbappé por el PSG fue una muestra del poderío de Al-Khelaifi, que subió la oferta del Real Madrid de 150 hasta los 180 millones, después de haber pagado anteriormente 222 millones por Neymar.

Florentino no esconde que el futbolista brasileño es su gran objetivo y para ello tiene guardados en la caja 170 millones, a los que sumará posiblemente el ingreso de la venta de alguna de sus estrellas, ya sea Cristiano Ronaldo, Benzema o incluso Bale. No obstante, el verdadero fichaje del Real Madrid será el grupo inversor que le ponga el apellido al Bernabéu y traiga 400 millones para convertir el estadio blanco en una máquina de hacer dinero. El mandatario sabe que esa es la prioridad y a eso dedica en estos días todo el tiempo que puede.