Nacho Fernández, el empleado del mes del Real Madrid

Nacho Fernández se ha convertido en el empleado perfecto del Real Madrid. El defensa, internacional español, es el hombre para todo de Ancelotti. Hoy regresará al banquillo, pero lo hará por el peso del nombre y los 25 millones de euros que costó Coentrao más que por el convencimiento del italiano de que el ex del Benfica vaya a rendir más y mejor que el canterano madridista. Calla y trabaja, ese es su lema y su manera de vida en esto del fútbol.

En lo que va de temporada, Nacho ha jugado en todas las posiciones posibles de la defensa y siempre ha cumplido con nota; el lugar donde se siente más cómodo es de central. Mourinho decía que le faltaba cuerpo y contundencia, algo que suple con la velocidad, anticipación y un convencimiento a la hora de afrontar las oportunidades que le dan, que muy pocos jugadores tienen.

Esa versatilidad de la que ha hecho gala en toda su carrera, le valió la oportunidad de Del Bosque en el pasado mes de octubre. El defensa ocupó el puesto de Íñigo Martínez, debutando ante Chile en un partido amistoso. El seleccionador no se ha olvidado de él y el madridista sigue estando entre el grupo de elegidos, tal y como el técnico ha recordado en más de una ocasión.

El hoy jugador del primer equipo blanco, llegó a la antigua Ciudad Deportiva en 2001, pasando por todas las categorías y equipos de la entidad madridista hasta que en 2009 llegó al Castilla. Tres años después se convirtió en un jugador más del primer equipo. Mourinho fue el entrenador que le dio la alternativa el 23 de abril de 2011.

En la presente temporada su protagonismo ha ganado enteros dentro del equipo dirigido por Ancelotti, pero el italiano, tal y como le está sucediendo con Morata, no le está dando todos los minutos que podría tener. Ha participado en quince partidos: ocho de Liga, tres de Champions y cuatro de Copa superando los mil minutos. Ese tiempo lo ha repartido entre los dos laterales y las dos posiciones de central, cumpliendo en todas las demarcaciones. Su hermano Álex juega en el Espanyol tras abandonar la disciplina madridista el pasado verano.

Con contrato hasta el 30 de junio de 2017, su idea es la de seguir creciendo en el Real Madrid. Se siente valorado aunque, como es lógico, le gustaría tener más minutos. Eleven Sports, empresa que gestiona su futuro, ha recibido llamadas de diferentes equipos de Primera y de otras Ligas, pero la prioridad por ahora es la de seguir de blanco pese a las oportunidades que merece su rendimiento.