Es noticia
La ruleta de Las Vegas jugó con Carlos Sainz: las absurdas incoherencias de la Fórmula 1
  1. Deportes
  2. Fórmula 1
CONTRASTE ENTRE LA PISTA Y EL ENTORNO

La ruleta de Las Vegas jugó con Carlos Sainz: las absurdas incoherencias de la Fórmula 1

Todo lo que rodea al Gran Premio de Las Vegas contrastaba con lo vivido el viernes en la pista. Accidente y sanción para el madrileño, y sin público en la segunda sesión

Foto: El coche de Sainz quedó destrozado, y el piloto con diez puestos de sanción. (Europa Press)
El coche de Sainz quedó destrozado, y el piloto con diez puestos de sanción. (Europa Press)

"Deseando al CEO del Gran Premio de Las Vegas, Renee Wilm y a su equipo organizador, apoyado por el equipo tan empeñado de la FIA, un exitoso evento después de tan desafiante inicio". Que el presidente de la Federación Internacional, Muhammed Ben Sulayem, lanzara un cable al complicado arranque del Gran Premio de Las Vegas indicó hasta qué punto crecieron los enanos en sus calles el viernes.

Carlos Sainz y los propios aficionados se convirtieron en el saco de los golpes tras los incidentes de la primera jornada, sumados a las quejas previas de algunos pilotos ante la parafernalia mediática y promocional que asfixia esta carrera. A pesar de las millonarias inversiones, la purpurina y la experiencia como prioridad, ciertas vergüenzas de la Fórmula 1 quedaron al aire.

El grave problema de seguridad del asfalto puso en evidencia tanta fanfarria exterior. Millonarias inversiones para fallar en lo básico. Aunque sin ser un incidente desconocido en los circuitos urbanos, la seguridad no estuvo a la altura de la estructura implementada en torno al gran premio. Falló lo esencial y suerte hubo que Carlos Sainz salió indemne, aunque no sus intereses deportivos y los de su equipo.

Fumando en pipa

Demasiada atención al humo y no la necesaria al fuego. Sainz penalizará con diez posiciones de parrilla sin responsabilidad del piloto y equipo. Si la experiencia vivencial para los aficionados es uno de los grandes objetivos para este gran premio, con las entradas más costosas de la temporada eran enviados a casa antes de comenzar la segunda sesión del viernes.

"Dado lo avanzado de la hora y las preocupaciones logísticas con respecto al movimiento seguro de los aficionados y empleados fuera del circuito, la organización tomó la difícil decisión de cerrar las zonas de los aficionados antes del comienzo de los segundos libres", explicó la organización. La segunda sesión, de madrugada, y sin aficionados.

La cofradía de la Fórmula 1, pilotos y jefes de equipo, vivieron así entre la esquizofrenia de los intereses comerciales y los de su trabajo inmediato. Al margen de las opiniones de algunos pilotos el jueves —y de Sainz el viernes— la rueda de prensa de Fred Vasseur escenificó su estado de ánimo ante las consecuencias del incidente de su piloto y la injusta penalización en un circuito donde los Ferrari son extremadamente competitivos.

Fred Vasseur fumaba en pipa tras el accidente de Carlos Sainz. Monocasco (agujero incluido), unidad de potencia, batería, y sanción. Factura por encima de los dos millones de euros y cero comprensión por parte de la Federación ante un caso de fuerza mayor. "El espectáculo es el espectáculo y todo va bien, pero esto es inaceptable", exclamó ante los medios.

La absurda decisión de los comisarios

El obligado cambio en la batería del monoplaza de Sainz se excedió las unidades reglamentarias para toda la temporada. Ferrari argumentó fuerza mayor para evitar la sanción, recibiendo una sorprendente respuesta en el comunicado oficial. "Los comisarios señalan que si tuvieran la autoridad para conceder una excepción en lo que consideran, en este caso, circunstancias atenuantes, inusuales y desafortunadas, lo habrían hecho, sin embargo, el reglamento no permiten tal acción".

Aunque los comisarios se acogieran a un artículo del reglamento para justificar su decisión, resultaba esperpéntico que los responsables de sancionar no la consideraran apropiada en este caso, pero aun así la interponían de todas formas. Un error de los organizadores, desafortunado o no, penalizaba financiera y deportivamente a solo uno de sus protagonistas. La ruleta de Las Vegas jugó con Ferrari.

placeholder Sainz ha visto condicionado su fin de semana. (EFE/Etienne Laurent)
Sainz ha visto condicionado su fin de semana. (EFE/Etienne Laurent)

El Confidencial consultó con miembros de la FIA presentes en la inspección de los monoplazas sobre la decisión tomada: "En la parte técnica se han reportado todos los daños en el coche de Ocon y de Carlos, pero luego la decisión de los comisarios es cosa suya. Hay un precedente con Williams en 2019 donde saltó una alcantarilla y se aplicó el mismo criterio. Por consistencia, se ha aplicado otra vez. Suponemos que dará lugar a discusiones en las próximas reuniones con los equipos".

Para colmo, Alpine podía cambiar el chasis de Ocon sin sanción porque, como explicó Vasseur, "no se te permite cambiar de chasis durante la jornada, pero nos han dicho que, si pasaba la medianoche, ya no era el mismo día". "Esto ha sido otro chiste".

Sainz aprovechó también para su ejecutar su lanzada personal. "Lo que pasó hoy para mí es un ejemplo muy claro de cómo este deporte se puede mejorar de muchas maneras. FIA, equipos, reglas. Esto claramente un caso de fuerza mayor para no aplicar una sanción. Pero siempre hay maneras de empeorar la situación de alguien en particular. En este caso, es mi turno de pagar el precio". Quizás insinuando que otros equipos se habían negado a evitar la sanción a Ferrari.

A cada uno según le va la fiesta

Mientras Vasseur echaba humo, Toto Wolff se enervaba cuando se le recordaba el incidente y echó tierra encima. "Eso no es un ojo morado. No es nada. Hay unos entrenamientos libres que no vamos a hacer, y nadie va a hablar de ello mañana. Es completamente ridículo que estés hablando de una maldita tapa de drenaje que se ha deshecho", respondió el austríaco.

Quizás su respuesta hubiera sido otra de haber embestido Hamilton o Russell la tapa de la válvula de agua. Vasseur resumió al final la esquizofrenia de intereses de la Fórmula 1 en Las Vegas. "El espectáculo es mega y estoy muy contento con ese aspecto. Es un gran paso adelante para la F1. Pero hay que separar lo que es el espectáculo y lo deportivo", matizó el francés.

"El espectáculo es mega. Ayer estuve en el paddock club en la ceremonia de apertura y es algo que nunca había visto antes. Pero solo por esto no significa que no debas hacer el trabajo en el lado deportivo, y no quiero mezclar todo y decir que jodiendo el lado deportivo. No, son dos temas separados…. Sigo convencido de que el evento es un gran acontecimiento para la Fórmula 1. Pero Carlos chocó contra una pieza metálica a 220 km/h y podría haber sido mucho peor".

Vasseur dio en el clavo. ¿Qué si Sainz hubiera resultado herido? De momento, lo está en lo deportivo. Quedan dos días. El Gran Premio de Las Vegas no puede permitirse más errores en lo que realmente importa.

"Deseando al CEO del Gran Premio de Las Vegas, Renee Wilm y a su equipo organizador, apoyado por el equipo tan empeñado de la FIA, un exitoso evento después de tan desafiante inicio". Que el presidente de la Federación Internacional, Muhammed Ben Sulayem, lanzara un cable al complicado arranque del Gran Premio de Las Vegas indicó hasta qué punto crecieron los enanos en sus calles el viernes.

Fórmula 1
El redactor recomienda