El otro objetivo de Fernando Alonso: lograr su primera medalla de oro como piloto de F1

La Fórmula 1 ha entrado en una nueva era. Tal y como quedó confirmado en el Gran Premio de Baréin, la presente temporada puede ser realmente impresionante a nivel deportivo, donde en la pista pueden darse situaciones que no se veían desde hacía años. Todo apunta a que Red Bull sigue siendo muy superior al resto, con Ferrari peleando por estar cerca y Aston Martin sorprendiendo. Mientras, otros equipos como Mercedes tienen mucho trabajo por delante.

Esta nueva configuración de la parrilla ha provocado que tengamos dos pilotos españoles con la posibilidad, carrera tras carrera, de pelear por las cotas más altas en pista. Mientras que Carlos Sainz continúa mostrando sus buenas maneras con Ferrari, confiando en poder corregir los problemas de fiabilidad y degradación mostrados en Baréin, Fernando Alonso quiere seguir exprimiendo su nuevo Aston Martin para tratar de descubrir hasta dónde puede llegar.

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Javier Rubio

Y es que el asturiano ha sido la gran sorpresa del comienzo de año. Ya es los meses previos al debut y durante los test de pretemporada, Aston Martin confirmó que tenía una joya. Solo necesitó 57 vueltas para demostrar que el AMR22 tiene mimbres para lograr grandes resultados y las manos de Alonso son las que completan la ecuación. ¿Es descabellado soñar con la 33ª victoria del asturiano en F1? Lo curioso es que, si la consigue, logrará algo que no tiene.

Fernando Alonso ha sido capaz de ganar carreras en el Mundial con Renault, McLaren y con Ferrari. En todas ellos, ha subido a lo más alto del cajón, levantado al cielo el trofeo conseguido como campeón del Gran Premio. Pero hay algo que nunca ha logrado: una medalla de oro en F1. ¿El motivo? Se trata de un novedoso sistema de recompensa introducido por la competición que se ha empezado a entregar en 2023, por lo que, de momento, solo hay un piloto que la tiene: Max Verstappen.

Tradicionalmente, los trofeos que reciben los pilotos por subir al podio terminan en las vitrinas de las escuderías, mientras que los deportistas reciben una réplica a menor tamaño que son las que realmente se quedan. Pero, ahora, la Fórmula 1 ha decidido dar otro paso adelante para recompensar a los pilotos y ha decidido otorgar una medalla de oro a los campeones de cada carrera. Esta idea se introdujo en 2021 para las pruebas al esprint y, el año pasado, se dio en la última carrera del año.

El destino quiso que esa última carrera de 2022 también la ganara Verstappen y, por ende, aquella presea también fue para él. Pero ha sido ahora, en 2023, cuando se ha decidido que cada ganador reciba una medalla de oro. Se trata de un galardón de oro, donde aparece serigrafiado el número de Gran Premio al que corresponde -la de Baréin, por ejemplo, fue la carrera 1.080 de toda la historia de la F1- y que sirve como reconocimiento personal al piloto por su victoria.

Alonso puede presumir de tener 32 réplicas de títulos en su museo personal pero, hasta el momento, no ha conseguido ninguna medalla. El español tratará de volver a lo más alto del podio y, por qué no, conseguir uno de los nuevos galardones de recompensa para los campeones. A sus 41 años, el piloto asturiano vive su segunda juventud y sueña con volver a escuchar el himno español en lo más alto del podio. Y, de paso, lograr un reconocimiento que, de momento, aún no tiene.