No solo es Carlos Sainz: Miguel Molina, el gran privilegio del otro piloto español de Ferrari

Ferrari protagoniza un episodio único en su historia deportiva: en 2023 regresa a las 24 Horas de Le Mans por primera vez en 50 años, la edición que celebra el centenario de tan mítica carrera y que agotó sus entradas en poco más de una hora de salir a la venta. Durante todo este tiempo, la marca italiana se ha dedicado únicamente a la Fórmula 1 de manera oficial. Ahora se enfrentará a Toyota, Peugeot, Cadillac, Porsche, BMW, Alpine, Lamborghini... Y a los mandos del nuevo y espectacular 499 estará a los mandos un piloto español, Miguel Molina. Quien, junto con Carlos Sainz, suma una dupla de pilotos de España en los dos programas oficiales de Ferrari.

El Confidencial habló con Miguel Molina sobre tan singular privilegio, cómo ha sido su carrera hasta llegar a Maranello y las 24 Horas de Le Mans, qué supone formar parte de Ferrari... En pocas palabras, la respuesta es una ingente cantidad de trabajo. Cualquier piloto, sin embargo, pagaría por competir con Ferrari en las 24 Horas Centenario. Solo seis disfrutarán de ese privilegio. Molina es uno de ellos.

PREGUNTA: Ser un piloto Ferrari no es algo de lo que pueda presumir todo el mundo. ¿Cómo ha llegado a Ferrari sin hacerlo por el camino de los monoplazas y la Fórmula 1?

RESPUESTA: Llevo desde 2010 como piloto profesional, estuve siete años en Audi, en el DTM, y el último año surgió la oportunidad para fechar por Ferrari en el mundo de la resistencia. Era un mundo nuevo para mí, ya que siempre había venido de los monoplazas y de carreras al sprint, máximo de una hora. Se me abrió la oportunidad con Ferrari, y cuando te llega con estos colores tan importantes a nivel mundial, se valora muchísimo. Desde que entré en la marca competí en los GT (grandes turismos, como el 488), que era donde Ferrari competía en el mundo de la resistencia, y participaba y dominaba en el Mundial de Resistencia. Fui cogiendo experiencia estos años, que han sido muy muy buenos. En cada uno hemos ganado alguna carrera, y también algún año, campeonatos. Cuando hace un año Ferrari anunció su regreso a la categoría reina de la resistencia, todo el trabajo que había detrás y la velocidad que hemos podido demostrar en el coche ha permitido estar en uno de los proyectos más grandes de Ferrari a partir del 2023.

P: ¿Cómo es ese mundo interno de Ferrari, en Maranello, y corriendo por todo el mundo? En definitiva, ¿cómo es el universo Ferrari para un piloto profesional?

R: Desde el primer día que fui a Maranello en 2017 pude entender lo que es Ferrari para los italianos, y sobre todo a la gente de Maranello. La fábrica de Ferrari está dentro del pueblo de Maranello, y eso hace que todo el movimiento que se cuece dentro del pueblo esté relacionado directamente con la marca. Es lo que más me impactó, que para pasar de un departamento a otro de la fábrica, vas por la calle. Tienes las entradas por zonas del pueblo.

Para nosotros en España sí que es una marca muy conocida, pero no podemos sentir lo que sienten ellos. Cuando llegas allí es algo que se siente muy cerca, esa pasión que se habla de Ferrari por los italianos es totalmente real, se siente desde el minuto cero. Es bastante difícil de explicar, pero una vez allí se siente mucho.

P: ¿Has tenido ese momento del que tanto se habla, cuando un piloto se pone el mono de Ferrari y se planta delante del espejo? Sobre todo ahora, con el mono de Ferrari con el que vas a competir en el centenario de las 24 Horas de Le Mans y la vuelta de la marca después de 50 años.

R: El mono me lo pude probar hace poco para unas fotos, y es cierto que cuando te lo pones es algo muy especial. Con Niklas y Antonio (Nielsen y Fuoco, sus compañeros de coche), el otro día tuvimos una conversación donde nos paramos a recapacitar de dónde estábamos, y lo que estamos a punto de empezar, y necesitas pararte, porque llevamos muchos meses trabajando en este proyecto. Pero hasta que no te paras a pensar dónde estás, lo valoras, pero no te das cuenta la magnitud que conlleva esto. Estar en una marca que vuelve como Ferrari, y que vuelve después de 50 años y al centenario, y luchar por la victoria es un privilegio y un honor. Cuando te paras y miras con perspectiva entiendes la magnitud. El otro día nos parábamos a pensar los tres cuando nos poníamos el mono, y veía lo especial que es. Intentaremos gestionarlo lo mejor posible, pero creo que estamos preparados para ello.

P: ¿Cómo ha vivido estos meses, cuando Ferrari estaba valorando qué pilotos formaría parte del proyecto? Los elegidos, vamos.

R: Ha sido así, como te lo explico. Si no recuerdo mal, se hizo público un 8 o 10 de enero. Nosotros lo supimos cuatro días antes, y no teníamos ni idea quién serían los seis pilotos elegidos. Los ocho pilotos involucrados en el desarrollo, desde el primer momento, nos hemos centrado en el coche, sin competencia ni rivalidad entre nosotros para conseguir el puesto. Esto ha sido muy positivo para el desarrollo del coche. Han sido unos meses en los que, en muchas ocasiones, tenía cada uno sus ideas si estaría o no. Yo, muchas veces, no lo tenía claro. Me ponía en la situación de los jefes para intentar entender cuáles serían las mejores bazas para representar a la marca como piloto y. a veces me sentía dentro, y otras fuera.

Pero creo que lo han gestionado de la forma adecuada por el bien de Ferrari. Esto se valora muchísimo, porque todos los pilotos de Ferrari tiramos a una y trabajamos para los mismos intereses. Se pudo ver al final del Mundial de Resistencia el año pasado, con los cuatro pilotos subidos al coche ganador del campeonato, porque había sido un año muy complicado. Ha sido la mejor forma de gestionar el proceso para todos.

P: Te subes por primera vez a ese impresionante 499 SP ¿Cómo le contaría a la gente cómo son esos momentos, un Ferrari, un prototipo, un coche diferente, la máquina de las 24 Horas de Le Mans?

R: Para mí fue muy especial, porque me subí por primera vez en Barcelona, el circuito al que estoy vinculado desde pequeño. Fueron momentos de nervios también, porque subirte a un aparato así, con tanta tecnología, con tantas cosas a hacer en el volante… Necesitas tu tiempo, pero cuando le vas cogiendo el ritmo, disfrutas muchísimo de todo el grip (adherencia) que tiene un coche de esta magnitud, de toda la aerodinámica, de la velocidad…

Pero más que conducirlo, últimamente me da está dando para pensar mucho, es lo que más estoy disfrutando por haber estado vinculado desde el minuto cero, ver cómo está evolucionando, como trabajan los ingenieros, las evoluciones de un día para otro… Toda la gente involucrada en este proyecto, que está dando el cien por cien. El coche salió a la pista en julio, han pasado pocos meses, y debutamos en tres semanas. Es muy poco tiempo para un proyecto de esta magnitud. Tampoco somos la marca que tenemos más gente en el proyecto, pero están trabajando sin descanso, y esto es lo que estoy disfrutando más a nivel personal y profesional. Además, estoy aprendido muchísimo del coche en cosas que antes no había podido experimentar.

P: ¿Qué es lo más complicado en un proyecto ya de por sí único, correr en las 24 Horas de Le Mans y el Mundial de Resistencia?

R: Primero, la diferencia más grande es a nivel logístico, es increíble. Crear un equipo casi de cero es pasar a otro nivel, mucho más específico. La atención que está generando este proyecto, a nivel deportivo, de marketing, de prensa... Está cogiendo una magnitud enorme. Y tenemos claro que llegamos a esta categoría con mucha humildad. Hay otras marcas que tienen más experiencia que nosotros, aunque esperamos llegar a Le Mans con nivel para hacer un buen papel. Cuando Ferrari llega a un campeonato la presión es muy alta, y si hemos entrado a esta categoría es para luchar a corto y medio plazo para ganar.

P: ¿Cuáles son las exigencias de rendimiento para un piloto de resistencia? Compartes coche con otros pilotos, hay mucha subordinación a las estrategias del equipo ¿Qué virtudes necesita un piloto de resistencia en comparación a las de un piloto de Fórmula 1?

R: Lo principal de todo son la duración de las carreras, mucho más largas, dentro del coche puedes estar hasta tres horas. Primero, has de estar muy bien físicamente, y más con el prototipo, que es más exigente. Pero una de las cosas más importantes es saber leer muy bien la carrera, en cada situación y momento cuando te toca estar en pista. Si puedes arriesgar más, si vale ser más conservador… Si, por ejemplo, al salir en pista llevas dos vueltas y empieza a llover, tienes que saber dónde arriesgar o no, perder un par de segundos por vuelta para evitar riesgos. Al cabo de tres horas sale compensado. En cada momento has de saber qué hacer.

P: ¿Cómo es la vida de un piloto profesional en Ferrari? La gente puede idealizarla, el cliché del glamour, de una marca carismática. ¿Cómo es el día a día?

R: Este es un año especial, por el proyecto del Hypercar, y está siendo el inicio bastante duro. Estamos involucrados en el Hypercar al cien por cien. Sin embargo, para Ferrari el proyecto de los GT, y más este año con un coche nuevo, es muy importante, el ADN de la resistencia viene de los GT, así que no podemos dejarlo de lado. Estar involucrados en ambos proyectos requiere mucho sacrificio, viajes y carreras por todo el mundo, viajes a Maranello al simulador, para reuniones... No es todo glamour como dices y vestir la ropa de color rojo para salir en las fotos. Detrás hay un trabajo muy difícil, cuidando también el aspecto físico en todo momento. No solo es subirse a un coche en las carreras. Hace quince días estuve en Dubai, para las Asian Le Mans Series, después de Daytona. Son muchos días fueras de casa, y a nivel personal es complicado. En cualquier momento nos pueden llamar para salir a pista, y hay que estar al cien por cien.

P: ¿Has hablado con Carlos Sainz del proyecto? ¿Habéis coincidido en Maranello?

R: Últimamente no hemos podido coincidir. Hemos estado en Maranello los dos y no hemos coincidido todavía. Cuando nos veamos sé que hablaremos del tema. Por Antonio (Fuoco), sé que Charles ha hablado del tema también, se ha interesado. Es que las 24 Horas de Le Mans es un proyecto muy bonito, que a cualquier piloto le gustaría hacer en algún momento. Y seguro que les gustaría probar el coche. Si algún día nos queremos cambiar el coche, tampoco hay problema (risas).

P: ¿Has pensado alguna vez lo que debe significar estar metido dentro del 499 SP en la recta del circuito de Le Mans, abarrotado de público, en la carrera del centenario de las 24 Horas, en una de las carreras más importantes a nivel global de los últimos 50 años? No todo el mundo tiene semejante oportunidad.

R: Me he parado a pensar muchas veces esto que dices, porque se va notando cada vez más. Es una presión que vamos a tener que gestionar, pero creo que estoy preparado para lo que se viene encima. Antes nos llega el debut, en Sebring, dentro de unas semanas. Esta carrera va a ser para todos una descarga de presión y energía para los pilotos y todo el equipo que lleva trabajando tanto tiempo en este proyecto, y nos va a ayudar para que, cuando lleguemos a Le Mans, estemos más tranquilos. Es cierto que se han vendido todas las entradas, va a ser un éxito total estas 24 Horas de Le Mans, y hacerlo en un coche como esto va a ser muy, muy especial. Estar en la pista en ese momento va a ser algo que no voy a olvidar nunca.