Jenson Button y la emoción de liderar el 'Chevrolet Dream Team' en las 24h Le Mans

Si ya de por sí las 24 horas de Le Mans de este año se presenta espectacular con una participación inédita en cuanto al número de marcas implicadas a nivel oficial, la guinda la acaba de poner el gigante americano General Motors al anunciar que un coche de su marca Chevrolet estará presente este próximo 10 y 11 de junio en el Circuit de la Sarthe. Y lo hará con una alineación de pilotos de ensueño con Jenson Button (excampeón del mundo de Fórmula 1), Mike Rockenfeller (ex-ganador de Le Mans) y Jimmie Johnson (ocho veces ganador de la Nascar). Dado que el constructor americano, ya tenía a su marca Cadillac participando en la categoría Hypercar, que es la que lucha por la victoria absoluta, se ha optado por una fórmula inusual como es la de inscribir el coche bajo reglamentación ‘Garage 56’.

Hace ahora justo diez años, precisamente, el organizador de la carrera, el ACO (Automobile Club de L’Ouest’) decidía crear esta categoría, que aunque no cuenta para la clasificación oficial, permite al coche elegido participar como uno más. "La idea era dejar un hueco para permitir la creatividad y la exploración de tecnologías del futuro", -explica Vincent Beaumesnil, Director deportivo del ACO-. "Todos los coches seleccionados deben cumplir con las mismas normas de seguridad del resto y a la hora del proceso de selección, tenemos en cuenta criterios de rendimiento e innovaciones como pueda ser el ahorro de combustible". Esa ventana de oportunidad es la que han aprovechado Chevrolet, Nascar y Goodyear, que han creado una joint-venture con el prestigioso equipo Hendrick Motorsports para llevar adelante el proyecto.

Un proyecto singular

El coche elegido es una versión derivada del Chevrolet Camaro de reglamentación Next-Gen que participa actualmente en la Nascar. El criterio elegido como ensayo tecnológico no gira alrededor de algún avance medioambiental, sino en la capacidad de abaratar costos a la hora de fabricar coches de competición, que han traído las nuevas reglas del campeonato automovilístico norteamericano por excelencia. Todos los implicados salen ganando en la operación: Le Mans porque añade un atractivo singular a la prueba, Chevrolet por el gran impacto mediático, la NASCAR porque pone altavoz a su campeonato fuera de sus fronteras y finalmente Goodyear porque recibe un laboratorio ideal para desarrollar sus neumáticos

El Camaro Z1 no se mezclará en la lucha por la victoria absoluta con los Hypercar de Toyota, Porsche Ferrari y otros, pero podría funcionar con un ritmo comparable al de la maquinaria de clase GT, que al igual que ha ocurrido en las recientes 24 horas de Daytona ha estado enormemente competida. El anuncio ha sido recibido con alegría general por aficionados y medios de comunicación, pero en la propia Nascar a nivel interno la cosa no ha gustado tanto. Muchos equipos entienden que haber llegado a un acuerdo con Hendrick Motorsport le concede una ventaja por las muchas enseñanzas que va a recibir del programa de desarrollo del coche. Tampoco ha sentado nada bien a Ford y a Toyota, que como marcas presentes en el campeonato, entienden que como mínimo tenían que haber tenido la cortesía de informarles por si querían participar.

La NASCAR vuelve a Le Mans

El proyecto, que recibe el nombre de Garage 56 haciendo honor a la reglamentación bajo la que compite, hace coincidir curiosamente el 100 aniversario de Le Mans y el 75 de la Nascar. Y hace casi medio siglo, Bill France Sr. el fundador de la competición, promovió un programa similar que llevara sus stock-car a correr por primera vez a la mítica prueba de 24 horas. "Hay un gran potencial para que la NASCAR aumente su popularidad en Europa, donde probablemente ciertos prejuicios o incluso un poco de burla al respecto aún permanecen, - explica Michael Lock, que ha sido nombrado coordinador del proyecto-. La NASCAR es mucho más que dar vueltas sin cesar a pistas ovaladas, de hecho ha evolucionado mucho en los últimos años, y ahora compite en tipos de pistas muy diferentes. Guste o no, el estilo de esta competición norteamericana al aficionado europeo, en lo que hay unanimidad es que el sonido de sus motores V8 de 700 caballos es glorioso. Una tarjeta de presentación inmejorable.

Jim France, presidente y CEO actual de la NASCAR está particularmente feliz el grupo de pilotos que va a representar el proyecto: "El juntar en el equipo a Jimmie, a Rockenfeller y a Jenson es todo lo que podríamos haber soñado, porque son tres pilotos de élite que han ganado en los niveles más altos del automovilismo a nivel mundial”. Y verdaderamente no le falta razón al Sr. France porque hablamos de un auténtico ‘dream team’, que a nivel de palmarés probablemente no tenga parangón con ninguna otra alineación de pilotos de la prueba. Y ojo, porque este año, con una cantidad de equipos oficiales no antes vista, el plantel de conductores en esta edición va a ser de impresión.

Tres titanes para el proyecto

Jenson Button como es bien conocido, tuvo una de las carreras más prolíficas en la historia de la Fórmula 1, con 15 victorias, 50 podios y el Campeonato Mundial de 2009 en su palmarés. Así se expresaba en la conferencia de prensa del anuncio de ‘Garage 56’: "Como aficionado a las carreras de toda la vida, siempre he soñado con competir con ciertos coches, con y contra ciertos pilotos y por supuesto competir en ciertos eventos", explicó el piloto británico. "En junio, varios de esos sueños se harán realidad en las 24 horas de Le Mans cuando pueda llevar a la NASCAR al escenario mundial junto a mis amigos Jimmie y 'Rocky' (Rockenfeller). Estoy con muchas ganas de compartir esta aventura con Hendrick Motorsports, Chevrolet y Goodyear, y los aficionados actuales y futuros de la NASCAR por todo el mundo".

Jimmie Johnson y Mike Rockenfeller son menos conocidos para el aficionado medio español y europeo que Button, pero los dos son también pesos pesados del automovilismo. Johnson ostenta el récord de siete campeonatos de la NASCAR empatado con Dale Earnhardt y Richard Petty. Sus 83 victorias le colocan en el sexto lugar en la lista de pilotos más exitosos de todos los tiempos empatado con Cale Yarborough. "Estoy superemocionado, -comentó el piloto californiano- En mi lista de deseos siempre estuvo en la parte alta competir un día en las 24 Horas de Le Mans algún día. Tener esta oportunidad, y formar parte de esta alineación es algo increíble y de lo que estoy muy agradecido”

Rockenfeller, por su parte, ha desarrollado una carrera exitosa a ambos lados del atlántico, pero siempre en el ámbito de los prototipos y la resistencia. Su mayor hito fue ganar las 24 Horas de Le Mans en el año 2010, (que ya había ganado también en 2005 pero en la categoría GT), las 24 horas de Daytona y el campeonato alemán DTM en el año 2013, en una de sus ediciones más disputadas. ‘Rocky’ es el piloto sobre el que ha recaído la mayor parte del trabajo de desarrollo del vehículo, dado que es de los tres pilotos el que más experiencia cuenta en este tipo de vehículos y competiciones. Un equipo sin duda de ensueño para un proyecto de lo más especial. En junio, el planeta automovilístico girará más que nunca alrededor de Le Mans.