Las pistas que apuntan a que Mercedes y Hamilton lograrán la cabeza de Michael Masi

En la Fórmula 1 discurre un intenso río subterráneo bajo la opinión pública, pero siguen aflorando indicios de que, al menos políticamente, sigue viva la onda expansiva provocada por las decisiones de Michael Masi que facilitaron la victoria final de Max Verstappen en el campeonato. Cuando las aguas broten a la superficie, la FIA habrá tomados importantes decisiones para el futuro de la Fórmula 1. Incluida la entrega en bandeja de la cabeza de Masi por exigencia de Mercedes.

Aunque de momento se trate de indicios, todo apunta a que Mercedes no quiere soltar su presa, y Lewis Hamilton actúa como parte de la pinza. ¿Aceptó resignadamente la cúpula de Daimler la gestión y el discutible resultado del último gran premio? Negativo, aunque Mercedes renunciara a presentar batalla legal. Sin embargo, los eventos que se están produciendo desde entonces insinúan un pacto entre la institución y el equipo alemán. Parece que es el turno de la FIA para cumplir su parte.

La firme exigencia de Wolff

“Espero que la comisión no solo proponga palabras, sino que la siga con acciones, y les haremos responsables de las acciones” declaro serio y tajante Toto Wolff en la rueda de prensa posterior a la renuncia de acciones por la resolución del título. “No podemos seguir en un deporte que pretende ser deporte seguido de entretenimiento y no al revés, con decisiones ad hoc en todos los ámbitos, ya sea técnico o deportivo. Y, por lo tanto, debe haber una medida clara antes del comienzo de la temporada para que todos los pilotos, todos los equipos y los aficionados entiendan qué va a funcionar, y qué no”. Es evidente que la historia no ha terminado todavía.

Al rebufo de la renuncia de Mercedes en diciembre, la FIA anunciaba que se llevaría a cabo una investigación “para lograr información significativa y conclusiones antes del comienzo de la temporada 2022”. El pasado jueves emitía un comunicado en el que se “abría una consulta con todos los equipos sobre todos los asuntos, incluido el análisis de los acontecimientos del Gran Premio de Abu Dabi”. Así, el próximo 19 de marzo se dedicará “al uso del coche de seguridad”. Después, habrá reuniones con los pilotos. “El resultado se presentará a la Comisión de Fórmula 1 en febrero y las decisiones finales se anunciarán en el Consejo Mundial en Bharein, el 18 de marzo”. Es decir, justo antes del primer gran premio. Pero también se sacaba la patita: “ El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem ha pedido al Secretario General del Deporte y recientemente nombrado Director de Monoplazas, Peter Bayer que presente propuestas para optimizar la organización de la estructura de la FIA en la Fórmula para la temporada 2022”.

Una figura erosionada

En contra de la continuidad de Masi juegan varios factores. Por un lado, la determinación en su contra de Mercedes, que le responsabiliza de las decisiones que perjudicaron al equipo. A ello se suma la llegada nuevo presidente, Mohammed Ben Sulayem, que requerirá cimentar credibilidad y autoridad en su recién iniciado mandato. Caras nuevas ayudarían a ello. Además, la figura de Masi ha quedado muy erosionada y ya bajo presión permanente para dirigir los grandes premios.

Por ello, cabe esperar decisiones de calado por parte de la FIA, tanto en los procedimientos de gestión de los grandes premios como en la estructura y el equipo humano que los ejecutan. Evidentemente, la institución necesita revisar la líquida y aleatoria gestión del reglamento deportivo, cuestionada más allá de los eventos de Abu Dabi. Pero es indudable que un nuevo rostro al frente de la dirección de carrera contribuirá a limpiar la cargada atmósfera actual. ¿Podría, por ejemplo, Michael Masi tomar con libertad decisiones contra Mercedes en carrera en 2022?

El futuro de Budkowski y Hamilton

Pero imagínese un apoyo sólido y férreo de la FIA a Masi, además de la creación de un equipo que le apoye en carrera. Supondría un desafío a Mercedes, ciertamente, cuya postura sería interesante observar en este supuesto. Porque la sustitución del australiano, por su especialización, tampoco es sencilla. Estos últimos días se han producido varias noticias con nombre propio en la Fórmula 1. Por un lado, la salida de Otman Szafnauer de Aston Martin, ya rumoreada en verano, y la sorprendente de Marcin Budkowski de Alpine. Dentro de los inevitables rumores derivados de no conocerse todavía el destino final de ambos, resultaba factible especular con un cambio de roles y personas en ambos equipos. Hasta el sorprendente anuncio el viernes de un nuevo ‘team manager’ para Aston Martin en la persona de Mike Krack, antiguo responsable de competición de BMW. Con lo que queda flotando en el aire el destino de Budkowski. Todo apunta que Szafnauer recalará en Alpine pero ¿y el polaco?

¿Podría ser Budkowski el próximo director de carrera de la Fórmula 1? Ya formó parte de la Federación antes de pasar a Renault. Las razones de su salida de Alpine aún son desconocidas, pero abandonar un equipo en pleno crecimiento invita a pensar en una posición débil del polaco o de insatisfacción con la estructura de dirección del Alpine. Una posible oferta de la Federación le proporcionaría continuidad en la Fórmula 1 y una válvula de escape del equipo francés.

Mientras tanto, Lewis Hamilton se deja querer alimentando los rumores de una posible retirada condicionada al resultado de la investigación de la FIA. Otra forma de presionar a la institución para luego confirmar su continuidad como convalidación de las decisiones que se esperan. Nadie se imagina a Toto Wolff sin su piloto estrella a primeros de marzo, forzado a la búsqueda de un segundo espada para el recién llegado George Russell. Porque en esta partida, quizás las cartas ya estén marcadas jugadas desde hace tiempo.