Daniel Juncadella, el piloto que nunca para y que hace historia en el DTM

Si no hay que hacer algo en el deporte es rendirse. Daniel Juncadella, piloto español de DTM desde 2013, ha vuelto a demostrar por qué la fortaleza mental es importante. En abril se rompió la clavícula en una competición de ciclismo de montaña a un mes del comienzo de la temporada de DTM. El barcelonés se quedó fuera del campeonato el año pasado y casi perdió su oportunidad de volver a mostrar sus capacidades. Le colocaron una placa y ocho tornillos en la clavícula pero eso no le paró.

El piloto del DTM de Mercedes volvió a conducir apenas nueve días después de su lesión. El 10 de abril hizo las pruebas de Mercedes contra todo pronóstico y dio 176 vueltas al circuito de Hockenheim. Recorrió más de 800 kilómetros y fue el tercer piloto más rápido. Un logro increíble. Con mucho dolor en el hombro siguió compitiendo cuando pudo haber parado durante un tiempo para descansar.

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'Titanium Man' es cómo llaman a Juncadella sus compañeros de Mercedes por su recuperación rápida tras fracturarse el hombro. En una entrevista con El Confidencial tras su percance ya contó que nunca antes se había lesionado y que le asustó ver que tenia el hueso fuera. Al no haber ganado nunca ninguna carrera en el DTM y tras soñar con ser campeón en 2016, pudo haberse rendido y haber abandonado el deporte pero su perseverancia ha dado frutos. Hizo pruebas con Force India de Formula 1 en 2014 pero no compitió en ninguna carrera oficial.

Ya conoce la victoria en DTM

Ahora Juncadella de 27 años ha hecho historia en Brands Hatch (Inglaterra) al ganar una carrera de DTM,. Es el segundo español que ha ganado una carrera en esta especialidad. El primero fue Miguel Molina en 2015 que se llevó la carrera en Nürburgring cuando tenía 26 años. Molina fue ganador en tres ocasiones pero no participa en la competición desde 2016.

Salió desde la 'pole', su segunda de la temporada y ganó por casi ocho segundos al brasileño Augusto Farfus. Durante la carrera bajó hasta la tercera posición, pero recuperó una posición tras la serie de paradas y superó a Lucas Auer, que acabó cuarto, para volver a ser líder. "Ha sido un día perfecto", comentó. Después de la carrera dio las gracias a su equipo por la estrategia y por el 'pit-stop'. Tras 67 intentos ya sabe cómo se siente al ganar una carrera de DTM. Es la primera vez que conoce la victoria desde que se proclamó campeón de Europa de Formula 3 en 2012.

El catalán, que ya hizo historia en 2011 al ser el primer español en ganar el Gran Premio de Macau, ha vuelto a conseguir algo histórico que llevaba intentando más de cinco años. Este domingo tiene lugar la segunda de las dos carreras en Brands Hatch. El piloto catalán es una demostración de superación y de que el que la sigue, la consigue.