De Benetton a Lotus: "Ragazzi, Mercedes es Mercedes... nosotros hacemos jerseys"

"¿Quieren tomar algo? Las galletitas las hice yo". Las bromas y una sonrisa acompañan la tremenda planta de Federico Gastaldi. Con el actual jefe de equipo de Lotus no hay que romper el hielo, él se encarga. Este argentino en el que confió Gerard López para sustituir nada menos que a Eric Boullier lleva respirando el ambiente de las carreras desde hace 25 años y ha sido en este 2014 donde, prácticamente, se puede decir que ha llegado a la cima del automovilismo.

Adelantándose por unos meses al modelo que ha elegido ahora Ferrari, Gastaldi no es ingeniero sino gestor de personas, de sus emociones y su talento. El Confidencial ha tenido la oportunidad de mantener una charla con él, en la quehabla de Lotus y de su situación en la F1, remontándose a la época de Benetton para explicarla. Ya desde el comienzo, se pudo comprobar su don de gentes.

Pregunta: ¿Cómo la escudería rival de Red Bull a final de 2013 ha comenzado este año tan mal?

Respuesta: Es muy frustrante para todos… es una reflexión que se hace mucha gente aunque, honestamente, para nosotros no es una sorpresa porque sabíamos que podía ser así. Las carreras de Australia, Malasia, Bahrein… China han sido tests.

Lamentablemente, quizás nos dormimos un poco pensando que siendo Renault un constructor de motor con experiencia en el turbo íbamos a tener un año como los anteriores en el tema de resultados. Difícil de digerir, pero sabíamos que era posible.

P: Con el torbellino financiero que ha vivido Lotus, por así decirlo, ha habido personal que se ha ido, ¿ha influido esto en la capacidad para preparar el año?

R: La sesión de pretemporada la perdemos porque íbamos justos. Ir al primer test era perder tiempo, dinero y energía. Es cierto que hemos tenido dificultades financieras, pero son las dificultades que existen en los equipos que no son los cuatro que todos sabemos. Y con esto de que la gente se ha ido… esto es un negocio como cualquier otro: si vienen de otro equipo ofreciendo más dinero, se van.

También hemos debido prescindir de gente para reestructurar el equipo de cara a acondicionarlo a los tiempos que corren. No es una excusa sino una realidad. Gracias a este reajuste estamos ahora mejor que el año pasado, aunque no nos sentimos orgullosos (de haber prescindido de personal) porque lo mejor que tiene este equipo es precisamente la gente y su experiencia.

P: ¿Qué puede ofrecer Lotus que no tengan esos cuatro equipos potentes (Mercedes, Red Bull, Ferrari y McLaren)?

R: Lotus tiene un historial tremendo. Comenzamos como Toleman, luego vino la familia Benetton, construyó Enstone, han pasado Schumacher, Fernando Alonso… y con éxito. Todo gracias a nuestra experiencia, a un equipo de gente combativo que no tiene problemas en currar día y noche los fines de semana para sacar las cosas adelante.

P: Al menos desde fuera, a Lotus se le ve diferente y pionera en aspectos organizativos

R: Creo que es así. Hoy por hoy, lo que hace falta es gente que venga con ideas. Gerard López es joven, de una generación de emprendedores que le ha ido bien a nivel empresarial, y aporta la gestión de lo que él ha sabido desarrollar, que son los fondos de inversión. Ahora mismo estamos aquí porque las cosas se han hecho bien… el año pasado terminamos en la segunda posición de Constructores, por delante de Ferrari.

P: Lotus ha estado cerca de meter la cabeza entre las potencias que dominan la F1. ¿Estar arriba significaría tener que meterse en este club, tanto económica como políticamente? ¿Se puede ganar sin formar parte de ese club?

R: Nosotros, por más que hemos tenido resultados, no somos parte del club. No podemos competir de forma económica ni de manera política dentro del gobierno de la Fórmula 1. No tenemos el peso que tiene Ferrari, Mercedes, McLaren o Red Bull. Estamos en desventaja, no somos una multinacional, sino un fondo de inversión que está en F1 para hacer negocios y disfrutar de una pasión con el compromiso sólido de crecer.

Yo siempre digo que en la época de Benetton, cuando estaba roto, para mí fue un aprendizaje. Me acuerdo que un día nos llama Luciano (Benetton, el dueño) y nos dice que vende el equipo. Le preguntamos por qué y responde: ‘Ragazzi, Honda es Honda, Renault es Renault, Mercedes es Mercedes, Toyota es Toyota… y nosotros hacemos jerseys’. Benetton tenían la potencia económica pero no eran del motor. Nosotros, ahora, somos sólo un fondo de inversión dueño de un equipo de F1 que también está compitiendo con presupuestos de multinacionales fabricantes de coches.

P: Y ahora hay más. Si a todo esto le sumas que en 2014 se han cambiado las reglas, con los costes que ello conlleva… motor, tecnología…

R: Nosotros debemos aceptar lo que digan los de arriba, como el resto de los equipos. Tenemos que seguir la corriente de lo que ellos deciden. Los cambios acordamos en hacerlo, obviamente, pero no nos pareció una buena decisión acorde con los momentos económicos que vivimos. Quizás hubiera sido mejor esperar un poco, pero entiendo también que la FIA tenga otras preocupaciones. El impacto ha sido duro y en Lotus hemos gastado mucho dinero, pero sin lograr tener resultados.

P: ¿La marcha de Raikkonen se ha notado a la hora de captar posibles patrocinadores?

R: No. Kimi es un excelente piloto pero los patrocinadores estaban antes que él. Los pilotos van y vienen pero, por suerte, tenemos esponsors que apoyan al equipo y no a los pilotos.

P: ¿Te ha sorprendido el rendimiento que está teniendo el finés en Ferrari?

R: La verdad es que sí, sí me ha sorprendido. Nos sorprende, además, que Ferrari no tenga buenos resultados teniendo el apoyo tecnológico de una de las plantas automotrices más importantes del mundo. Con las marcas que tiene el grupo FIAT… Aunque al mismo tiempo que nos extraña, también comprendemos que pueda pasarle lo mismo que a Renault, una marca histórica que, como Ferrari, está un paso por detrás de Mercedes.

P: La relación de España y Lotus es especial, se vio en el GP de España portando a El Greco y por la figura del ‘gallego’ Gerard López. ¿Se podría decir que Lotus es el equipo más español?

R: Sin duda es el equipo más español. Si tuviéramos a Fernando Alonso ya sería español por excelencia. Es muy gracioso que la gente no sepa que Gerard López es español, con su familia de Galicia, en su casa se habla español… No hay otro equipo de F1 cuyo dueño tenga pasaporte español. De hecho, además de estar orgulloso de ser español, como dice él, es españolista. Se solidariza con lo que pasa en su país y en el tema del Greco siempre ha creído en la mezcla del deporte y la cultura; todo en lo que pueda colaborar lo hará de corazón (como el año pasado cuando puso una bandera de Galicia en sus Lotus tras el accidente ferroviario de Santiago).

: ¿Cómo estás viviendo este año en lo personal?

R: Siempre he estado detrás de las bambalinas. No he estado enfrente de las cámaras y para mí es aprendizaje este aspecto. Pero sé cómo funciona el equipo y realmente la única diferencia es que antes la referencia era Eric Boullier y ahora la referencia máxima es Gerard López –el team principal que lleva las riendas-. Yo me mantengo a su lado y me pongo al frente del cotarro cuando Gerard no está.

P: ¿Qué significa tener un team principal apasionado de los coches y, a la vez, el encargado de firmar los cheques?

R: Es muy bueno. La ecuación es muy positiva porque sabe de negocios y de coches. Yo acepté este nuevo rol porque sé que él está detrás de todo esto. ¡Y no es por hacerle la pelota!

P: Un jefe de equipo, hoy en día, qué tiene saber más… ¿de coches o de personas?

R: Yo creo que de personas. Para saber de coches tenemos la parte técnica. Está Nick Chester con su personal, Alan Permane… Yo no me atrevería a opinar ahí. Estoy aprendiendo. Voy a las reuniones de ingenieros y pilotos, escucho, observo y si necesitan algo de mí me lo dicen. Si veo que algo necesita ser puesto encima de la mesa para estar todos en la misma página lo hago. Lo mejor del equipo, repito, son los guerreros que tenemos.

P: ¿Cuál es el objetivo para este año de Lotus?

R: Vamos carrera a carrera. Siendo realistas estamos retrasados en el desarrollo y este año aspiramos a seguir aprendiendo para poder intentar estar en otra posición el año que viene. A nivel de rendimiento sabemos que hemos perdido todo lo que hemos hecho en los últimos cuatro años, pero sobre los papeles, conjuntamente con los datos de Renault, estamos evolucionando.