Thomas mantiene la 'maglia' rosa en una etapa vibrante hasta la foto 'finish'

Pascal Ackermann hubo de esperar a la foto finish para celebrar la victoria en la undécima etapa del Giro de Italia, entre Camaiore y Tortona, de 219 kilómetros, la jornada más larga de la presente edición. Estuvo marcada de nuevo por las bajas producidas por el coronavirus y algunas caídas, como la que le costó la retirada a Óscar Rodríguez (Movistar) y al tercero de la general, Tao Geoghegan.

Una jornada golpeada de inicio por el covid, vivida con sobresaltos por las caídas, en las que se vieron afectados hombres importantes, como el propio líder Geraint Thomas, el principal favorito Primoz Roglic y Tao Geoghegan, el ganador del Giro en 2020. De entrada, el covid dejó al Soudal Quick Step con tres hombres en carrera tras los positivos de Jan Hirt, Josef Cerny, Louis Vervaeke y Mattia Cattaneo. Después otras enfermedades y los accidentes dejaron un total en la jornada e 10 bajas.

La fuga del día estuvo protagonizada por seis corredores, entre ellos Diego Pablo Sevilla (Eolo-Kometa), quien de entrada se marchó a la aventura con Konychev y Sotjnic (Corratec), Rex (Intermarché-Circus-Wanty), Champion (Cofidis) y Magli (Green Project-Bardiani).

La fuga estaba condenada de antemano, era un día eterno para mantener al pelotón a raya. El sexteto tuvo una ventaja máxima de 4'22 minutos, pero poco a poco fue disminuyendo a medida que iban afrontando las dificultades de la segunda parte de la etapa.

En el podio de la general, Thomas mantuvo la maglia rosa con dos segundos sobre Roglic y 22 sobre Joao Almeida, quien escaló un puesto, dando otra alegría al UAE. Este jueves se disputa la duodécima etapa, entre Bra y Rivoli, de 179 kilómetros. En el recorrido dos puertos, el Peddagera (3a, 13'2 km al 2'7 por ciento) y el Colle Braida (2a, 10'7 kilómetros al 5'9), con la cima a 28 kilómetros de meta.