Mike Tyson pide ayuda a gritos: "Estoy al borde de la muerte por culpa del alcohol"

Mike Tyson atraviesa uno de los momentos más complicados de su vida. El exboxeador norteamericano asegura que vive una situación difícil por culpa del alcohol, después de que este domingo anunciara que se encuentra "muy cerca de morir". Su adicción a la bebida es el gran motivo de los problemas que atraviesa, y el púgil más joven de la historia en conseguir un título mundial de los pesos pesados ha pedido ayuda a gritos para tratar de superar su combate más complicado.

El neoyorkino debutó este fin de semana como promotor de boxeo, pero su aparición en público dejó muchas dudas. En especial cuando fue entrevistado tras el combate, cuando el propio Tyson reconocía que sus problemas con el alcohol están acabando con su vida. El bicampeón del mundo de los pesos pesados está convencido de que su vida pende de un hilo, tal y como confirmó en el Casino Turning Stone de Verona, Nueva York.

"Estoy al borde de la muerte porque estoy inmerso en un círculo vicioso alcohólico. Estoy tratando de desengancharme, no he bebido nada ni tomado ningún medicamento en seis días, pero reconocozco que soy adicto al alcohol", aseguraba Tyson ante los micrófonos de la ESPN. A sus 47 años, Tyson reconoce haber mentido en varias ocasiones sobre su sobriedad, además de asegurar que es incapaz de dejar de beber durante un tiempo prolongado.

Un boxeador que es historia viva del deporte

En sus comienzos como boxeador, Tyson demostró estar llamado a entrar en la historia del deporte. Con sólo 20 años y 4 meses, el neoyorkino se convirtió en el púgil más joven de la historia en hacerse con un título mundial de los pesos pesados. Su primer combate por el título mundial de la WBC acabó con su rival, Trevor Berbick, en la lona en sólo dos asaltos. Desde ese momento, su carrera deportiva fue en ascenso gracias al poder de sus puños.

Sus posteriores títulos WBA e IBF le hicieron ser una de las grandes revelaciones del boxeo mundial, lo que le convirtió en uno de los deportistas mejor pagados del momento. Pero tras unos primeros años de crecimiento deportivo -y, como no, de sus ingresos- su carrera iba a empezar a torcerse. Tras pasar seis meses en la cárcel acusado de violación, su nivel deportivo nunca llegaría a ser tan importante como el de sus primeros años en activo.

El declive de un mito del deporte

Sin embargo, sus problemas extradeportivos iban en ascenso, hasta entrar en una espiral de la que aún no ha conseguido salir. Detenciones, agresiones lejos del cuadrilátero, posesión de drogas y el famoso mordisco a Evander Holyfield iban a dar por acabada su carrera deportiva. Desde ese momento, sus continuos cambios de vida no sólo no han conseguido aliviar los problemas de Tyson, sino que han terminado agravándolos.

Hace unos meses anunciaba que quería dejar atrás su vida pasada, convirtiéndose en un maestro zen. Pero su último giro no ha dado resultado, y el propio expúgil ha confirmado lo que era un secreto a voces: sigue siendo adicto al alcohol. Considerado como uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, Mike Tyson pide ayuda a gritos, después de anunciar que está convencido que su vida se encuentra en peligro por culpa de sus excesos con la bebida.