Las adolescentes toman la Liga Femenina: ¿es bueno para ellas y la competición?

El 6 de julio, la selección española femenina sub-17 se quedó muy cerca de ganar el Mundial de la categoría. Perdió en la final contra Estados Unidos por 75-77 en un partido en el que Ángela Salvadores asombró a todos anotando 40 puntos. Cuatro meses después, la joven escoltaes unade las dos jugadoras españolas entre las diez máximas anotadoras de la Liga Femenina (promedia 15,67 puntos). El suyo es el caso más destacado, pero los debuts precoces en la competición se han acentuado en las últimas temporadas. En nuestro repaso a la situación de la Liga Femenina, queremos averiguar si esta situación es positiva tanto para las jugadoras como para la competición.

Según la web de la Liga Femenina, que proporciona datos desde 1997, en la temporada 2008-2009 había en la competición 17 jugadoras de 20 años o menos, mientras que en la 2014-2015, que comenzó hace un mes, hay 36. La cantidad de jugadoras jóvenes en la competición ha evolucionado en paralelo a la salud de la liga, como se puede ver en el gráfico que encabeza este texto.De las 70 menores de 20 años del curso 1997-1998 se pasó a las 12 de la temporada 2010-2011, la cifra más baja. Ese año, el Perfumerías Avenida ganó la Euroliga, pero la competición local comenzó una cuesta abajo que se ha llevado por delante varios equipos (entre ellos el Ros Casares, campeón de Europa en el 2012) y que ha tenido entre sus efectos que los equipos tiren de sus canteranas para completar sus plantillas.

"Ojalá fuese una apuesta de los clubes apostar por esas jugadoras jóvenes por su calidad y por su capacidad para destacar en la Liga Femenina", explica José Ignacio Hernández, entrenador del Rivas Ecópolis."Creo sinceramente que es necesidad de los clubes por sus situacioneseconómicas. Se tira de jugadoras jóvenes, en algunos casos capacitadas para dar el salto, en otros no tanto, más de relleno", asegura. El equipo madrileño cuenta ahora mismo en su plantilla con cinco jugadoras de 17 años: Ángela Salvadores, Cecilia Muhate, Carmen Grande, Inés Mata y Marta Hermida. Sólo Salvadores tiene minutos importantes en el equipo.

"La gente hace de su necesidad su bandera"

"Está claro que las cosas no suceden porque sí. La gente hace apuestas por dos razones. Una espor voluntad, por convencimiento, porque quiere, y otraporque las circunstancias le lleven a ello. En este caso creo que es la mezcla de las dos cosas", opina Kiko Martín, director de competiciones de la Federación Española de Baloncesto (FEB). La Federación saca mucho beneficio de la situación actual, comenta Domingo Díaz, entrenador y presidente del GranCanaria.com, club que cuenta con una de las canteras más prolíficas del baloncesto femenino. En él debutó la temporada pasada, con solo 14 años, Iris Junio, que también formó parte de la selección sub-17. "Gracias al trabajoque hacen en sus clubes, tienen jugadoras quecogen una experiencia porencima de la media europea o mundial", dice.

"Está claro que la gente a veces hace de su necesidadsu bandera. Como no tengo dinero, ahora sí que mirolo que tengo", recuerda Iván Torinos, entrenador del Segle XXI, otro de los proyectos importantes del baloncesto femenino: su equipo de Liga Femenina 2 (donde hay un gran número de jugadoras jóvenes)está formado por jugadoras en edad júnior, como las cuatro subcampeonas del mundo sub-17 que tiene en plantilla. Su opinión sobre la tendencia al salto prematuro a la primera división difiere de la de Díaz. Mientras que el entrenador grancanario lo ve "bastante positivo", Torinos ve aspectos negativos.

"Avanzar procesos no significa conseguiréxitos más temprano. Sí es cierto que paraellas es una suma de experiencias y evidentemente acaban adquiriendo unos enfrentamientos con jugadorasde más experiencia queles permiten acelerar procesos. Pero lo que está claro es que lo que tiene que prevalecer es el proceso formativo delas jugadoras. Si te acabas saltando pasos, lo que acabas descubriendo es que al final has llegado, perono estás preparada", explica el entrenador del SigloXXI, que tambiénadvierte de que "la época de aprendizaje que se pueden llegar aperder, a largo plazo, les va a penalizar".

En lo que sí coinciden todos, los tres entrenadores y el directorde competiciones de la FEB, es en que la crisis económica tiene buena parte de culpa del estado actual de la Liga. "Cuando tienes menos dinero, lo más sencillo y también lo más inteligente es tirar de las jugadoras que tienes cerca, que son las más económicas", dice Kiko Martín.Que las mejores jugadoras nacionales estén fuera de España"significa que seguramente la competición de aquíno es lo que tendría que ser", puntualizaTorinos. Eso es negativo para una liga que quiere ser profesional, aunque es el único "modelo de subsistencia para clubes de cantera", añadeDíaz.

¿Irse a Estados Unidos es una moda?

A todo lo anterior hay que añadir un elemento que hasta hace unos años era la excepción y ahora se está convirtiendo en la norma: irse a universidades de Estados Unidos, donde tienen todas las facilidades paracompatibilizar estudios y competición. Un ejemplo: la mitad de las integrantes de la selección sub-20 que ganó la plata en verano juega en la NCAA. "Es lo más normal que todas estas niñas cojan el camino americano", decía hace unas semanas aeste periódico Gonzalo Corrales, fundador de AGM.

"Hace unos años lo normal era que tuvieses un trabajo a medio plazo, pero se nos ha ido un poco al traste con esa moda, o con esa necesidad, que hay ahora mismo por parte de ellas de irse a Estados Unidos porque, sobre todo, encuentran una coordinación estudios-baloncesto que aquí en España es muy complicada", dice José Ignacio Hernández. Las cinco jugadoras nacidas en 1997 que tiene a sus órdenes enRivaspueden tener su futuro en Estados Unidos a partir del próximo año (Salvadores ya ha confirmado que jugará en la Universidad de Duke).

Sin embargo, esa elección no siempre tiene efectos positivos, por lo menos a nivel deportivo. "Lo que no está claro, o no está tan demostrado, es que vengan de Estados Unidos siendo mejores que cuando se fueron. Que allí aprendan a entender mejor el juego o tengan una evolución como jugadoras. No es un hecho matemático", apunta Kiko Martín. Unas precauciones que también toma Iván Torinos, que cree que hasta ahora la opción de marcharse a Estados Unidos "no ha servido para catapultar al baloncesto femenino español". El éxito depende de la universidad que elijan odel entrenador, entre otros aspectos.

La aparición de jugadoras jóvenes ha servido para atraer más la atención hacia a una competición que está en un mal momento. Se puede presumir, porque no todos los días se ve a un grupo de adolescentes jugar con ese desparpajo y nivel en una categoría que aún les queda grande, pero sin olvidar que lo que las ha llevado ahí, más que la confianza en ellas, es la necesidad. "A todos nos gustavender que hemos hecho debutar a una jugadora con 17 años, con 16,un minuto y medio cuando ganamos o perdemos por 20 o por 18. Pero realmente eso es una gran mentira. Los equipos están plagados de veteranas, de jugadoras senior, que son las que tienen que cortar el bacalao", afirma José Ignacio Hernández.