Goya le planta cara a Zorrilla: cómo Valladolid se convirtió en la capital del séptimo arte

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Hay una estatua en Valladolid que está triste. Desde hace unas semanas, el ilustre escritor José Zorrilla asiste celoso sobre su orgulloso pedestal en la plaza que lleva su nombre a un espectáculo del que antes era el protagonista estelar: un trasiego de viandantes y turistas que no levantan la cabeza al pasar por delante de él, prefiriendo hacerse fotos con otro personaje histórico que ha acaparado el interés de la ciudad sin previo aviso. Se trata del pintor aragonés Francisco de Goya, un 'cabezón' que de un día para otro se ha hecho con la atención de las miradas y el reflejo de los flashes de las cámaras. Esta obra escultórica de Mariano Benlliure tiene réplicas por las plazas más representativas de la ciudad, tanto en los barrios como en el casco histórico. Y, con él, la capital castellana ha dejado de estar teñida de esa energía decadente y literaria que la caracterizaba, para abrazar otro tipo de arte mucho más contemporáneo, el cinematográfico.

"Es un día histórico, esto pasa solo una vez en la vida", admite Pilar, una joven veinteañera que aguarda para hacerse una foto con el busto del pintor colocado en la Plaza Mayor. "No, nos hemos encontrado a ningún famoso, habrá que ir hoy a curiosear a la Feria de Muestras, yo participé en un sorteo para acudir a la alfombra roja de público, pero no me tocó". "A una amiga, sí", le responde otra joven que está a su lado. Ambas están esperando a Mario, un amigo que llega tarde para hacerse la foto. "Valladolid siempre ha destacado por su gastronomía, y esto del cine la sitúa en un nivel superior", opina por su parte el joven. Los tres lamentan no haber visto más películas nominadas debido a la dificultad de compaginar sus horarios de enfermería, una profesión que les gusta, pero que les roba tiempo para acudir a las salas de cine.

Pero también hay ruido. Esta mañana estuvo marcada por las protestas, no solo las de las tractoradas que han colapsado las carreteras y ciudades de España durante toda esta semana. Los sindicatos UGT y CCOO, junto con varias asociaciones y miembros de la sociedad civil, han recorrido el último tramo del Paseo Zorrilla, pasando justo por delante del busto de Goya e internándose en el centro de la ciudad. "La extrema derecha está intentando recortar los derechos de los trabajadores y, nosotros, los sindicatos, llevamos en su punto de mira desde que entraron en el gobierno", afirmaba un representante de los sindicatos.

"No queremos molestar a los vallisoletanos ni a los aficionados al cine, hemos querido hacer la manifestación por la mañana por ese motivo", comenta un representante de la Federación de Asociaciones Vecinales Antonio Machado, tras ser preguntado si habían escogido justo este día a propósito y para ganar visibilidad. "La Junta de Castilla y León, a instancias de Vox y amparados por el PP, nos han cortado las alas y limitado convenios que ya estaban firmados, como el de la soledad no deseada". Por la tarde, se esperan más protestas, en este caso impulsadas solo por los tractoristas, en los alrededores de la Feria de Muestras.

El ambiente previo a la fiesta

En los días previos a la celebración más importante del cine español, los paseos de los ciudadanos de Valladolid están animados por el glamour del séptimo arte, encarnado en esa hierática mirada del pintor, en los photocalls a pie de calle y en los carteles repartidos por marquesinas y farolas con los personajes más representativos de la industria. A poco que uno ponga el oído se descubrirán apuestas de qué película será la ganadora o qué actor o actriz podrá uno encontrarse de manera imprevista por los bares y calles del centro.

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Personas anónimas de todas las edades se agolpan en diversos puntos ambientados con la estética de los Goya. Pero también descubrimos entre todos ellos a personalidades de la Academia que esta noche emitirán su dictamen en los distintos premios. En el photocall de la emblemática Plaza de Portugalete nos encontramos en la noche previa a la gala con Luis Ivars, Gorka Oteiza y Pedro Contreras, directores, productores y compositores de bandas sonoras y música para cine, alguno de ellos ya con un Goya en su estantería personal. “Somos de Alicante y Bilbao, venimos ayer y acabamos de salir del ensayo general de la gala”, admiten. “Estuvimos en Valladolid una vez presentando un concierto con la Orquesta Sinfónica de Castilla y León sobre el cine de aventuras y superhéroes, y también hemos venido a la Seminci varias veces. En la pasada edición, presentamos el documental sobre Berlanga. La ciudad está muy volcada con la gala, no es lo habitual. El año pasado en Triana, Sevilla, también había mucha gente, pero creo que en Valladolid la gente está más animada. Valladolid supo convencer a la Academia para que se celebrara aquí por el caché que ha adquirido como ciudad del cine y su apuesta por la cultura”.

Como bien dicen estos tres amigos de la Academia, la ciudad se ha volcado con el evento. Y es que la afición por el séptimo arte ha ido aumentando de manera progresiva en los últimos años gracias, en parte, a la apuesta institucional, académica y empresarial. Valladolid ya era “de cine” gracias al Festival de la Seminci, que, edición tras edición, ha llenado las salas pucelanas, atrayendo también al público internacional a las proyecciones. A la par, la sociedad se ha cinefidelizado gracias a la creación de escuelas de cine que forman una gruesa cantera de actores, actrices, directores y productores con una gran proyección de futuro.

"A veces, ser actriz implica un ‘no’ continuo. Si haces 300 cástings, solo hay dos en los que te dicen que sí"

Helena Díez es una muestra de ello. Desde que de pequeña fue con el colegio a ver una representación de Bodas de Sangre supo que quería ser actriz. Ahora, a sus 30 años, cursa el Máster en Cine, comunicación e Industria Audiovisual de la Universidad de Valladolid (Uva). "Me fui a Madrid a probar suerte, ya que pensaba que aquí no había muchas oportunidades", afirma, en una conversación telefónica con este diario. "Pero llegó la pandemia y tuve que volver a Valladolid. Entonces, pensé en hacer algo de cine desde otro punto de vista, y me matriculé en el Máster".

La cantera del cine en Valladolid

Estas últimas semanas, Díez ha estado asistiendo a las ponencias y masterclass de los profesionales de la industria que engrosan la lista de nominados y alguna que otro actor estrella internacional. "Estuvimos con los actores de Upon Entry, una película de bajo presupuesto", explica. "No todas las películas tienen que ser superproducciones, se puede hacer cine más de andar por casa. A veces, ser actriz implica un 'no' continuo. Si haces 300 castings, solo hay dos en los que te dicen que sí. Es un mundo duro, pone a prueba tu ego y autoestima, y al final no vale solo con tener una carrera, que también está muy bien, pero al final la técnica la tienes que modelar a tu gusto. Ser actriz es un aprendizaje continuo, una carrera de fondo. Tienes que llevar la incertidumbre de la mejor forma posible".

“Yo nunca había visto tanta pasión e interés en Valladolid por el cine, es increíble”

Díez menciona que Valladolid está creciendo a pasos agigantados en lo que a actividades cinematográficas se refiere. "Hay un nutrido grupo de personas que están empujando la cultura del cine e incentivando la industria", afirma, refiriéndose a Mercedes Miguel Borrás, la impulsora del Máster universitario y miembro de la Academia. "Tenemos muchos más espacios, hay más escuelas de arte dramático, de imagen y sonido… Es un sector que atrae a muchos trabajos creativos y de todo tipo”. Precisamente, gracias a Mercedes, ella y los veinte alumnos que forman parte del Máster han podido acceder a todo tipo de actividades y encuentros con los candidatos a los Goya, además de personalidades del mundo de la industria. "Ahora mismo voy al Teatro Carrión a una conferencia sobre dirección de David Trueba, José Antonio Bayona y Estíbaliz Urresola", nos dice en el día previo a la celebración de los Goya. Ayer mismo también estuvo la mítica actriz Sigourney Weaver.

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"El cine es un cruce entre arte e industria", afirma Mercedes Miguel al consultarla posteriormente sobre cómo ha vivido estos días. "En el Máster hay cabida para todo tipo de profesionales y graduados en distintas materias, desde la música, la literatura, el arte, la historia contemporánea, la publicidad o la arquitectura. Gracias a la colaboración que tenemos con Seminci, hemos podido traer a profesionales increíbles, como Luis Alcaine, Teresa Font, Antonio Saura o Sergio Gutiérrez Sánchez". Ella y Javier Angulo, el histórico director del festival anual de cine de autor, han impulsado en jóvenes y mayores de la ciudad el entusiasmo y las ganas de querer dedicarse al séptimo arte. “Yo nunca había visto tanta pasión e interés en Valladolid por el cine, es increíble”, concluye Miguel.

Desde el Ayuntamiento, confirman que el evento traerá algo mucho más importante que ingresos en el ocio y sector turístico. "Los Goya van a traer grandes beneficios a Valladolid en materia de notoriedad y reputación", asegura Blanca Jiménez, concejala de Turismo, Eventos y Marca Ciudad, en conversación telefónica. "Los hoteles, bares y restaurantes están a rebosar este fin de semana, hemos visto por ejemplo a los Javis comiendo lechazo en la parrilla de San Lorenzo, uno de los platos estrella y más típicos de nuestra gastronomía. Este evento sirve para demostrar al país la gran flexibilidad que tiene Valladolid para organizar eventos muy grandes. Y también la gran cultura cinematográfica de sus habitantes".