Es noticia
El Sonorama Ribera 2024 llega al "Club de los 27" con una salud de hierro y un cartel muy ecléctico
  1. Cultura
SE CELEBRARÁ DEL 7 AL 11 DE AGOSTO

El Sonorama Ribera 2024 llega al "Club de los 27" con una salud de hierro y un cartel muy ecléctico

Álvaro de Luna, Juancho Marqués, Mikel Izal, Natos y Waor, Rozalén u OBK se encuentran entre las primeras confirmaciones del festival

Foto: La Plaza del Trigo durante un concierto de Amaral, en el Sonorama 2023. (EFE/Paco Santamaría)
La Plaza del Trigo durante un concierto de Amaral, en el Sonorama 2023. (EFE/Paco Santamaría)

Cuando hablamos de música, el número 27 tiene un matiz trágico, casi como de maldición. Es la edad a la que nos dejaron artistas de la talla de Kurt Cobain, Jim Morrison, o más recientemente, Amy Winehouse. A este número se acercará también el próximo año el festival Sonorama Ribera, pero sus seguidores pueden estar tranquilos, pues su salud está lejos de correr peligro.

La vigesimoséptima edición del Sonorama Ribera se celebrará entre los días 7 y 11 de agosto de 2024 en Aranda de Duero (Burgos) y ha desvelado este jueves sus primeros 52 artistas, encabezados por Álvaro de Luna, Juancho Marqués, Mikel Izal, Natos y Waor, Rozalén u OBK, entre otros. Se trata del primer adelanto de cartel, que será precedido por dos tandas más en los próximos meses, y una gran "sorpresa" que se anunciará en fechas navideñas.

Según ha afirmado en rueda de prensa el director del festival, Javier Ajenjo, todavía no quieren "soltar a todos los perros", en un guiño a una de las bandas revelación del panorama español: Arde Bogotá, que ya participó en su pasada edición y cuya (esperadísima) presencia todavía no está confirmada para 2024. "Tenemos que seguir abriendo puertas y dando oportunidades a las bandas que tienen que ser en el futuro nuestros cabezas de cartel, y es lo que estamos haciendo en Sonorama Ribera", añade.

En un festival tradicionalmente indie, destaca ver en la lista a un gran número de artistas urbanos como Maikel Delacalle o Funzo & Baby Loud junto a 'extriunfitas' como Alba Reche o Miriam Rodríguez o artistas consagrados como los Burning; pero sin dejar de lado su esencia más alternativa, y su apuesta por las bandas emergentes y los artistas locales.

placeholder La Plaza del Trigo de Aranda de Duero, en el mes de noviembre. (Raúl Bobé)
La Plaza del Trigo de Aranda de Duero, en el mes de noviembre. (Raúl Bobé)

Buena prueba de este eclecticismo que caracteriza al Sonorama es la forma en la que se han desvelado los artistas: a través de una cinta de casete y en unas bodegas subterráneas. Un homenaje a la "alta tecnología" y a todos aquellos que vivían la música cuando no existían las plataformas digitales y que esperaban a que se "callase el señor de la radio para darle al REC y grabar en la doble pletina" para grabar las canciones, ha explicado Ajenjo.

Después de más de un cuarto de siglo, el Sonorama se ha convertido en uno de los festivales de referencia en nuestro país, y hasta llegó a ser reconocido con un Premio Ondas a Mejor Espectáculo, Gira o Festival en 2019. Ha llovido mucho desde aquel primer festival de 1998, en la Plaza de Toros de la localidad burgalesa y con 300 espectadores. Se les quedó pequeña, igual que el campo de fútbol municipal.

El festival ha crecido exponencialmente hasta alcanzar un aforo máximo de 20.000 personas, e incluso ha expandido sus fronteras más allá de Aranda, con ediciones en Montevideo (Uruguay) e Ibiza a lo largo de este 2023. Pero sus organizadores dicen haber entendido que el crecimiento es necesario siempre y cuando sea para mejorar.

Foto: Amaral en la Plaza del Trigo de Sonorama Ribera (EFE/Paco Santamaría)

"La cultura tiene que ser accesible, pero también sostenible", ha aseverado Ajenjo. Por eso, el Sonorama Ribera no busca tener más asiduos, sino que la calidad de los asistentes aumente; y su huella ambiental disminuya. Se reducirá el número de entradas a la venta, pero a cambio ampliarán el espacio del recinto, aumentarán las zonas de acampada y los baños disponibles e incluso están desarrollando un proyecto de ahorro energético que permitirá autoabastecer de electricidad algunas zonas del festival. Todo esto, según dicen, manteniendo "los mismos precios que hace 15 años", con entradas que oscilan entre los 75 y los 150 euros, y que saldrán a la venta el próximo 4 de diciembre.

Junto al vino de Ribera de Duero y a su famoso lechazo, el Sonorama ya es parte de la idiosincracia de Aranda de Duero y de sus habitantes. Y no es para menos, pues en la pasada edición reportó beneficios de 18 millones de euros y dio empleo a más de 1.500 personas en la localidad. Quizás, por eso, su famosa Plaza del Trigo —que ha visto actuar a bandas como Vetusta Morla, Sidonie, o Amaral— se ve tan desangelada en un jueves lluvioso de noviembre. Pero sus porches porticados aguardan impacientes al próximo mes de agosto para verla vibrar al ritmo de unos conciertos que, seguro, dejarán atrás cualquier superstición numérica.

Cuando hablamos de música, el número 27 tiene un matiz trágico, casi como de maldición. Es la edad a la que nos dejaron artistas de la talla de Kurt Cobain, Jim Morrison, o más recientemente, Amy Winehouse. A este número se acercará también el próximo año el festival Sonorama Ribera, pero sus seguidores pueden estar tranquilos, pues su salud está lejos de correr peligro.

Música Festivales Música
El redactor recomienda