El libro infantil póstumo del Hematocrítico alerta del abuso de pantallas en los niños
Miguel López falleció el pasado lunes, pero dejó publicado 'Leo no sabe jugar', sobre la distopía de un mundo en el que los más pequeños no sepan ni siquiera qué es divertirse en el parque
A Miguel López, El Hematocrítico (A Coruña, 1976- Navia, 2023), era fácil encontrárselo en la Feria del Libro de Madrid. En los últimos años, este profesor de Educación Infantil, Inglés y Primaria se había convertido en uno de los escritores de libros infantiles más respetados y queridos por sus lectores. Fue un autor muy prolífico: más de 20 libros en los últimos diez años que le habían aupado a las listas de ventas (hasta 100.000 ejemplares vendidos, según los datos ofrecidos estos días). El Hematocrítico tenía agudeza e ingenio más que suficiente para llegar a los niños y, de paso, pegar un buen pescozón a los adultos por la basura de mundo que muchas veces les creamos.
Ha querido la gran mala suerte que su último libro,
La historia está ambientada en el futuro (quizá no demasiado lejano) y comienza con Leo, una niña que en el colegio se encuentra pegada a un portátil, incluido el recreo. Las pantallas no desaparecen tampoco más tarde, ya que en el parque se sienta junto a sus amigos en la hierba, se ponen una gafas virtuales y a disfrutar (o a hacer que disfrutan).
Fue un autor muy prolífico: más de 20 libros en los últimos diez años que le habían aupado a las listas de ventas (hasta 100.000 ejemplares vendidos)
Hasta que un día la máquina de las gafas se rompe porque un gato se ha hecho pis en ella. Los niños, pasmados, se quedan sin saber qué hacer. Se aburren. Y en ese aburrimiento, en ese darle vueltas, poco a poco se inventan juegos como el escondite inglés (ya que no sabían ni siquiera qué era eso). En esas, el tiempo pasa volando y cuando la máquina está por fin arreglada no quieren volver a usar las gafas virtuales.
El mensaje es obvio: el abuso de las pantallas en los niños no está bien.
Escuchar a los niños
Los libros de El Hematocrítico solían ser de este cariz. Ocurrió con el primero de ellos,
En su otra serie, la de
Para adultos, en 2022 publicó
El Hematocrítico publicaba en gallego y en castellano. Muchos de sus libros están en la editorial gallega Xerais -hasta 17 títulos-. En Galicia era una persona muy querida. Él mismo se definía como “demasiado gallego”. Por eso ayer también hubo un homenaje civil en el Tanatorio Albia de A Coruña. El último adiós a un escritor que hizo felices a niños y adultos.
A Miguel López, El Hematocrítico (A Coruña, 1976- Navia, 2023), era fácil encontrárselo en la Feria del Libro de Madrid. En los últimos años, este profesor de Educación Infantil, Inglés y Primaria se había convertido en uno de los escritores de libros infantiles más respetados y queridos por sus lectores. Fue un autor muy prolífico: más de 20 libros en los últimos diez años que le habían aupado a las listas de ventas (hasta 100.000 ejemplares vendidos, según los datos ofrecidos estos días). El Hematocrítico tenía agudeza e ingenio más que suficiente para llegar a los niños y, de paso, pegar un buen pescozón a los adultos por la basura de mundo que muchas veces les creamos.