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El arte de las (diez) canciones tristes
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ELEGIDOS POR THE CUBICAL, QUE INICIA HOY SU GIRA

El arte de las (diez) canciones tristes

Mis disculpas por adelantado. El arte de las canciones tristes no está hecho para hacer un top ten rápido, la decisión requiere un juicio cuidadoso de

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El arte de las (diez) canciones tristes

Mis disculpas por adelantado. El arte de las canciones tristes no está hecho para hacer un top ten rápido, la decisión requiere un juicio cuidadoso de una vida llena de sufrimientos y una botella de vino tinto. He elegido once canciones que me han atraído en este triste día en particular, pero pido perdón por todas aquellas canciones maravillosas, y las melodías rompecorazones, que se han quedado fuera. En mi corazón hay sitio para más.

Leonard Cohen – A Singer must die

Una canción extraordinaria con una maravillosa cualidad para inquietar. La manera en la que Cohen utiliza los “la de da” para moverte dentro y fuera de la canción es simplemente hermosa. Tiene una increíble majestuosidad lírica que lo suma todo, de la inutilidad de la expresión al papel errado del cantante superficial. En realidad, debería haber un top ten exclusivo para Leonard Cohen.

Bob Dylan – Standing in the doorway

La entrega, el tono y el ritmo de esta canción son simplemente maravillosas, y la letra me golpea directamente al corazón. Es una de las cinco canciones que he estado tocando una y otra vez en los últimos doce meses (muchas  de este álbum increíble, Time out of mind), así que tenía que estar aquí. Tiene el verdadero poder y calidad para llevarte a un lugar donde sólo mandan la tristeza, el lamento y la nostalgia.

Nina Simone – I love you Porgy

Esta canción tiene un maravilloso ritmo de caja tocado con escobillas, un piano suave y una de las mejores voces nunca grabadas, que sirve para provocar, estirar y destruir las fibras del corazón. La súplica 'don´t let him handle me' (no dejéis que me atrape), siempre me da escalofríos por la espalda. 'It´s gonna be like dying' (sería como morir). Una preciosa canción que arrastra un enorme sentimiento, dadas las trágicas y horribles circunstancias que inmediatamente después persiguieron el futuro de Bess. Se disfruta mejor con la luz apagada y un vaso de vino tinto.

Hank Williams – I´m so lonesome I could cry

Probablemente el mejor vocalista que ha existido, con un dolor sobrehumano en su voz, que se rompe y tiembla en todos los momentos adecuados. Es una de mis canciones favoritas de todos los tiempos. Las versiones de Johnny Cash y Nick Cave también son muy buenas, pero, ¿que serían sin la de Hank?

Otis Redding – These arms of mine

Una maravillosa canción para ascender, donde nunca decae el ímpetu, con una voz soulera y sentida, con sabiduría, experiencia y ejecutada a la perfección.

Ian Dury – My old man

Honesta, sin un ápice de teatro. Una maravillosa recapitulación de un hombre que explora las entrañas de las relaciones y el arrepentimiento. Una canción bella de verdad. La voz de Dury casi me lleva al llanto cuando dice 'all the best from your son' (los mejores deseos de parte de su hijo). Además pone el contrapunto una increíblemente alegre guitarra y uno de los solos más descarados de la época. Un clásico británico.

Randy Newman – In Germany before the war

Amo de veras la manera que tiene Randy Newman de componer y escribir canciones. Podría haber escogido unas cuantas (God´s song, When it rains, por nombrar algunas) pero he decidido meter esta por su espléndida melodía, llena de dolor y lamento. Es difícil decidir qué parte es la más perturbadora, la parte vocal con piano o aquella en la que está el piano solo haciéndose eco de ese estribillo de dolor y melancolía, teñido de verdadera tristeza.

Bing Crosby – Brother can you spare a dime

He tenido que incluir a Bing tan sólo por su voz y ese increíble registro. Esta canción está llena de fluctuaciones y propina un verdadero golpe a las tripas y el corazón. Cuenta, además, una maravillosa historia sobre aquellos sueños olvidados y desperdiciados; parece resumir los sentimientos de la cuneta y de dónde venimos, las glorias del pasado y los amigos caídos. Tiene el lote completo. Una canción preciosa.

Tom Waits – Tell it to me

Probablemente hay cientos de canciones de Tom Waits más tristes, pero ésta lo es más para mi, por muchas razones. Su voz es increíble y su simple estructura y dolor está teñida de tristeza y ese necesario amor no correspondido.

Bruce Springsteen – The river

Amo el tema que trata, la maestría lírica y esa inquietante armónica que te introduce a la visión del mundo de Bruce. Es una canción brillante, con un aire agridulce de sueño de amor adolescente, con recuerdos tortuosos. En conjunto funciona todo muy bien y te envía al fondo del río, ¿o es algo peor?

Rev Gary Davis – Lord I wish I could see

Una preciosa canción que es simplemente implacable en su retrato de la soledad y la oscuridad. Y menuda voz. 

Dan Wilson* es cantante de The Cubical, banda procedente de Liverpool (Reino Unido) con un sonido que mezcla el blues y el garage de los 60 (Yardbirds, Dylan, Velvet Underground...) pero con una voz que recuerda de inmediato al fallecido Captain Beefheart. Esta semana están en España para presentar su segundo disco, It Ain't Human, muy bien acogido por la crítica especializada. Actuarán el próximo martes 8 de mayo en Madrid (Wurtlizer Ballroom), el miércoles 9 de mayo en Barcelona (Rock Sound), el jueves 10 de mayo en Valencia (Loco Club), el viernes 11 de mayo en Mondragón (Teatro Amaia Antzokia)y el sábado 12 de mayo en Santa María del Páramo, León (sala Belfast).

Mis disculpas por adelantado. El arte de las canciones tristes no está hecho para hacer un top ten rápido, la decisión requiere un juicio cuidadoso de una vida llena de sufrimientos y una botella de vino tinto. He elegido once canciones que me han atraído en este triste día en particular, pero pido perdón por todas aquellas canciones maravillosas, y las melodías rompecorazones, que se han quedado fuera. En mi corazón hay sitio para más.