Vocento abre en canal la compañía para reducir costes y salir de los 'números rojos'

“Es fácil pensar en ajustes de plantilla, pero no va por ahí. Lo que se va a hacer es poner patas arriba la compañía e identificar mecanismos para ser más eficaces”, explican fuentes internas de Vocento después de que su consejero delegado, Luis Enríquez, anunciara ayer, de forma un tanto críptica, un “plan de eficiencia global para racionalizar todos los procesos de la compañía”. Una suerte de auditoría que afectará a todos las divisiones del grupo, desde el área comercial a la corporativa. Con un deadline. “Estamos trabajando en ello. No puedo decir más. En cuatro semanas se conocerán los detalles”, explicó el primer ejecutivo de la editora de ABC en la conferencia con analistas celebrada tras la presentación de resultados.

¿Con el desmantelamiento de ABC Punto Radio y el alquiler de los postes a la Cope en el horizonte? “La radio está en revisión al mismo tiempo que lo están todos los negocios el grupo”, zanjó Enríquez, no sin antes insistir en que se trata de una división estratégica como vehículo para reforzar la marca ABC. El Consejo de Administración de la sociedad celebrado el pasado jueves daba luz verde al consejero delegado para llevar a cabo la auditoría express que corteja desde hace semanas, al tiempo que debatía la transacción con la emisora de la Conferencia Episcopal, para la que cuenta con un plazo de apenas semanas. A finales de mes debería tomarse una decisión.

El anuncio realizado ayer por Enríquez amenaza con acrecentar en los próximos días la inquietud que ya existía desde hace semanas en la casa, sobre todo en ámbitos directivos. Y es que el reciente cierre o arrendamiento de algunos negocios –véase el diario gratuito Qué! o la propia televisión- y el presumible de otros –la radio- ya hacía presagiar una reorganización de la estructura ejecutiva. “La revisión afectará a todos los procesos, de arriba a abajo. Desde la optimización de las impresoras al organigrama”, remachan estas fuentes. Más que salidas, el proceso sí podría conducir a mayores recortes salariales, después de los acometidos recientemente en la cúpula de la sociedad.

El proceso, de llevarse a buen puerto, también mejoraría la posición económica de la compañía y alejaría la fusión de ABC con el El Mundo, alternativa defendida por parte del Consejo ante las estrecheces financieras que atraviesa el sector. La hipótesis de una integración entronca con la crisis interna que se abrió en Vocento hace medio año, cuando un grupo de familias –Bergareche-Urrutia-Castellanos- intentó arrebatar la mayoría en el cónclave al bloque encabezado por los Ybarra y las Luca de Tena. Estos siempre sostuvieron que la intención última de los opositores era trocear la compañía y buscar una operación corporativa. Y recordaban los negocios que en otro tiempo mantuvo el financiero Jaime Castellanos con Unidad Editorial.

Un vuelco en la gestión

Los datos presentados por la compañía hasta el mes de septiembre avalan la necesidad de un vuelco en la gestión. En su conjunto, Vocento perdió 26,78 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 53% más que en el mismo período del año anterior. El buen desempeño operativo se difumina por los lastres del pasado, que son legión en la casa. De hecho, sanear el fondo de comercio del gratuito Qué!, diario que la sociedad decidió cerrar a finales de junio, tuvo un impacto en las cuentas de 19,1 millones. Sin ese compromiso, las pérdidas operativas de la editora de ABC se reducen hasta los 8,5 millones de euros, un 34,3% mejor que en el mismo periodo del año anterior. La radio se enmarca en ese rosario de negocios deficitarios, tras perder 5,67 millones hasta septiembre y casi 60 desde su fundación.

El rédito financiero logrado por Enríquez con su planteamiento televisivo refuerza los argumentos a favor de medidas drásticas con ABC Punto Radio. No en vano Vocento acordaba en el primer trimestre del año el cierre de La 10, para alquilar su frecuencia a Paramount Channel. Hasta septiembre, el beneficio operativo de la editora de ABC por su canal en TDT alcanza los 4,99 millones de euros, frente a las pérdidas de 4,62 registradas en el mismo periodo del año anterior. El primer ejecutivo de Vocento ya había apostado en su etapa en Unidad Editorial por arrendar la frecuencia de Veo TV, otro negocio ruinoso. Cuestión aparte es el papel del Ministerio de Industria, que en su día entregó licencias a empresas incapaces de explotarlas y que hacen negocio con su mero alquiler.

En esta línea, el consejero delegado dejó claro ante los analistas que uno de los leitmotiv de la nueva hoja de ruta será la rentabilidad, dentro de una posición financiera saneada. Todo dentro de un entorno de extrema debilidad de la demanda y del mercado publicitario. De hecho, Enríquez admitió que la facturación por anuncios había caído por encima del 21% en que se desplomaron las ventas en el tercer trimestre. Y noviembre se habría mantenido en esa senda del 20%. Los gestores de Vocento no se atrevieron a hacer predicciones respecto a diciembre y al año próximo, si bien vaticinaron que una eventual mejoría sólo llegaría en la segunda parte dele jercicio. Todo un tour de forcé para una firma en pleno zafarrancho.0