Telemadrid arranca el proceso para un ERE que afectará a “entre 700 y 800 trabajadores”

La televisión y radio autonómica de Madrid ha comenzado los trámites que concluirán en un Expediente de Regulación de Empleo que, según fuentes conocedoras del proceso, afectará finalmente “a entre 700 y 800 trabajadores”. Es decir, más del 70% de una plantilla formada en la actualidad por 1.070 empleados en convenio y 113 fuera de él, como cargos de confianza y directivos. El modelo, según han asegurado fuentes del sector, es copiar el ERE de la Radio Televisión valenciana que acaba de cerrarse con el despido de 1.198 trabajadores.

Según las fuentes consultadas por El Confidencial, aunque la “cifra definitiva aún no está cerrada” (porque debe ser una de las cosas que establezca el estudio de la asesoría externa), la intención es rebajar la plantilla del ente hasta dejarla en torno a los “400 trabajadores”, un número muy similar al que ha quedado en RTVV (fueron al final 480) para realizar dos canales autonómicos, que serían los que deberían gestionar los trabajadores de la nueva Telemadrid.

La dirección financiera del Ente Público Radio Televisión de Madrid publicaba ayer en su web el pliego del concurso para que una auditora asesore todo el proceso de “adecuación de la estructura empresarial del ente (…) y sus sociedades mercantiles a la situación actual del mercado audiovisual”. El precio que pagará a la auditora es de 235.000 euros, IVA incluido, y efectivamente, el procedimiento es parejo al que siguió la dirección de la TV autonómica valenciana, que sacó a concurso la auditoría que debería planificar y estudiar el ERE del ente. El informe, en el caso de la empresa que se lo adjudique en Madrid, deberá estar presentado antes del 31 de diciembre.

Como se especifica en el propio pliego, tras el eufemismo de la adecuación de la estructura a la “situación actual del mercado audiovisual, con el objetivo de lograr su viabilidad, ajustando los recursos de que dispone a sus posibilidades de ingresos y mejorando la eficiencia en la utilización de sus recursos técnicos y humanos’ se esconde un ERE, puesto que la empresa asesora debe proponer la “adecuación de la plantilla al modelo propuesto” y especificar también las áreas que “en su caso, convenga, por su mayor eficiencia, ser externalizadas, proponiendo las fórmulas  jurídicas más favorables y competitivas que deberían de ser utilizadas”. En el caso de la televisión valenciana, por ejemplo, el informe de la auditora propuso la externalización incluso de los servicios informativos, como parte de un nuevo modelo de televisión autonómica.

Los actuales directivos del ente regional pretenden que la asesoría incluya la “coordinación de la negociación de las condiciones de un nuevo convenio colectivo”; “la asistencia en el cálculo de las indemnizaciones, así como de las propuestas que presenten los representantes de los trabajadores, recomendando la solución más viable” o la “asistencia en la ejecución de los despidos y de las medidas establecidas en el Plan de Acompañamiento Social, así como en la planificación del proceso de salidas, coordinándolo con las nuevas contrataciones que, en su caso, fuera preciso efectuar”.

Los sindicatos y la plataforma “Salvemos Telemadrid” no han tardado en reaccionar. Denuncian las “prisas” de la dirección “por desmantelar el ente, dado lo ajustado de los plazos: el 7 de septiembre como fecha tope para la presentación de las ofertas y el 11 para la apertura de las mismas”. Y anuncian movilizaciones a partir de hoy mismo, con una concentración al mediodía en la sede de Telemadrid.

El Gobierno regional de Esperanza Aguirre ya intentó hace tiempo un reajuste del modelo del ente público de la radiotelevisión regional. Sin embargo, y dada la antigüedad de la mayoría de los trabajadores, muchos de los cuales lograron pasar a convenio en la época del último mandato del socialista Joaquín Leguina, aplicar un modelo de salidas pactadas antes de la actual reforma laboral suponía afrontar un coste enorme para las arcas públicas o que salieran los últimos en entrar en plantilla, justo los que lo hicieron en los ‘mandatos populares’. Telemadrid, con unas pérdidas que superan los 200 millones de euros según los sindicatos, puede acabar aplicando también las indemnizaciones de la RTVV: 20 días por año trabajado, al no haber habido acuerdo con los sindicatos.