Patricia Ortega: “El acceso de la mujer al Ejército ha sido uno de los pilares de su modernización”

En estos momentos de incertidumbre geopolítica, con una guerra que ha revitalizado la OTAN y una Unión Europea debatiendo sobre la necesidad de tener o no su propio ejército, las fuerzas armadas se reivindican como una institución que “ha sido protagonista en silencio de uno de los procesos más intensos de modernización de toda la democracia”. Así lo manifestó Patricia Ortega, general de división y secretaria general del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), durante su intervención en el evento 'Cómo construir la Europa de la Defensa', organizado por El Confidencial y la oficina del Parlamento Europeo en Madrid.

Entre las causas más importantes que han “impulsado esta transformación”, Ortega destacó la integración de España en organizaciones como la OTAN, la UE y las misiones de paz de la ONU. Al mismo tiempo, entre las motivaciones internas, precisó que “los cambios en la política general que han ido introduciendo los diferentes gobiernos han sido determinantes”. En este sentido, subrayó tres pilares fundamentales: “La profesionalización, la ley de la carrera militar y el acceso de la mujer a las fuerzas armadas”.

La que es, desde el pasado mes de mayo, la primera mujer en alcanzar el cargo de general de división expuso el dato de que “en 1988, cuando se permitió ingresar a las mujeres al Ejército por primera vez, solamente el 34% de la sociedad española estaba a favor. Hoy, ese porcentaje es del 95%”. Sin embargo, aprovechó para evidenciar que, más allá de la igualdad de género, “somos un crisol que refleja la variedad de la sociedad y si algo nos caracteriza es la universalidad”. Asimismo, recalcó que “somos la única institución que puede presumir de contar con profesionales de todos los nichos económicos y niveles educativos. Esta transversalidad —continuó— es lo que nos enriquece”.

"Somos un crisol que refleja la variedad de la sociedad. Esta transversalidad es lo que enriquece a las fuerzas armadas españolas"

Al mismo tiempo, Ortega también hizo autocrítica en su exposición: “Todavía tenemos mucho por hacer. Aunque el Ejército es una de las instituciones mejor valoradas por la sociedad, aún no se encuentra entre las profesiones más deseadas”, concretó. Pese a todo, la general de división admitió que “estamos en un momento crítico para unas sociedades europeas que vuelven a mirar a sus fuerzas armadas” y añadió que “los ciudadanos pueden estar seguros de que estaremos aquí para garantizar su seguridad”.

Finalmente, aseguró que “los profesionales militares han tenido que actuar con una disciplina digna de admiración para que se produzca esta transformación” y aportó un dato: el Ejército ha reducido sus efectivos de los 300.000 con que contaba en las décadas de 1980 y 1990, a los 130.000 de la actualidad. “Esta transición se ha producido en plantilla e infraestructura, pero también en materia tecnológica”. La secretaria general del INTA aprovechó el foro para reivindicar “más inversión en tecnologías disruptivas” y aclaró que “las guerras no se ganan por cantidad, sino por calidad”. Ortega concluyó que, además, “esta inversión ayuda a toda la sociedad en su conjunto porque crea tejido industrial y fomenta el empleo”.