Esta joven compra una caja de galletas danesas y lo que hay dentro nos traumatiza a todos

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Hay pocos recuerdos más adheridos a la infancia que la desilusión al abrir esta caja tan característica de galletas y toparse con agujas, hilos y otros muchos utensilios para coser. Estos productos siempre fueron uno de los dulces favoritos por excelencia. Su textura suave y su sabor son perfectos como tentempié y acompañamiento de un café, chocolate o cualquier otra bebida, aunque no siempre podían encontrarse tan fácilmente dentro de su reconocible caja azul.

Aunque se pensaba que esta anécdota con la mítica caja de galletas de mantequilla y azúcar era cosa de las abuelas de España, la realidad es muy similar en otros países de Europa. Así nos lo muestra la publicación de la usuaria @laparasian en TikTok, que ha hecho que millones de internautas se sientan identificados al desvelar todo un kit de costura en el interior.

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El vídeo dura 16 segundos y la descripción está en inglés, pero no importa desconocer el idioma para poder comprenderlo y rememorar un recuerdo de la niñez. La creadora de contenido se grabó en el pasillo de un supermercado comprando este producto tan clásico. De camino a casa, no se separó de la caja de galletas e incluso la abrazó mientras observaba que nadie a su alrededor pudiera acercarse, poniendo todos sus esfuerzos para mantenerla intacta y desvelar este misterio del pasado.

El trauma universal

Cuando la usuaria francesa de TikTok desprecintó la caja, la expresión de su rostro cambió radicalmente. Al llegar a su casa, lo que se pudo ver en el interior no eran las prometidas galletas, sino hilos y agujas de nuevo. En Francia también debe ser típico reutilizar estos recipientes para guardar artículos de costura en casa, pero, en realidad, se trata de una práctica extendida en todos los países del mundo y que algunos usuarios han calificado con humor como “trauma universal”.

La publicación se convirtió en todo un fenómeno con más de seis millones de reproducciones y un millón de 'me gusta' en la red social. Aunque algunos ya tenían asumido que en una caja de galletas hay de todo menos lo que se espera, otros pensaron que por fin era su momento de ver a alguien comiéndolas por primera vez. Entre los comentarios pueden verse internautas de todos los países sorprendidos de compartir esta costumbre entre prácticamente toda la humanidad.

Lo más curioso es que las personas de Dinamarca que participan en las respuestas aseguran no haber probado estos dulces o incluso tampoco han oído hablar de ellos. El origen de su famosa caja azul se remonta a 1996, cuando el grupo Kelsen puso en marcha una nueva marca de tradición repostera danesa. La caja resultó ser todo un acierto: la empresa había descubierto un método muy eficiente para mantener las delicadas galletas frescas y al diseñarla de forma redonda, la convertía en un objeto tanto estético como funcional.