Cómo organizar el armario según la ropa que usas para que dure mucho tiempo ordenado

Seguro que tú también tienes esa famosa silla, en un rincón de la habitación, llena de ropa desordenada que te has ido poniendo durante la semana o que no sabes dónde guardar. Abres el armario y más de lo mismo, chaquetas con shorts, bolsos tirados en el suelo o camisas de oficina con vestidos de playa.

Y lo peor es que, por mucho que intentes ordenar y mantener ese orden, todo acaba por mezclarse, las prendas se arrugan, se apelotonan e incluso cogen olores extraños. Por suerte, existen diferentes formas de organizar tu armario y, lo más importante, que se mantenga así mucho tiempo.

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El Confidencial

Nuestras madres solían separar la ropa de invierno de la de verano, guardando la que no se necesitaba en bolsas, cajas o maletas. Eso funciona cuando somos pequeños, porque usamos la misma ropa todos los días, pero hay otro truco mucho más eficiente: organizar el armario según la ropa que te pongas, separando los looks de trabajo de los de fin de semana. Y, si utilizas la misma ropa los siete días de la semana, divide tu ropa en cinco o seis conjuntos para ir vistiendo uno cada día.

Separa espacios

La primera recomendación para conseguir esto es emplear menos cajones y tener más perchas, especialmente perchas anchas y firmes para que la ropa no se deforme. De esta manera, tendrás una visión global de todas tus prendas. Las baldas y cajones es mejor dejarlas para bolsos y demás complementos. Además, es recomendable donar la ropa que no vistas o ya no te venga, para ganar espacio.

Con todo esto en mente, es el momento de dividir la ropa entre fin de semana y de diario. Elige cinco conjuntos, estos serán tus outfits de lunes a viernes para trabajar. Haz lo mismo con el fin de semana y tus días libres. Aquí puedes ser más flexible y dejar varios conjuntos listos en sus perchas, y alguno para ocasiones especiales.

Con esta técnica, ganarás tiempo cada mañana, porque no tendrás que pensar en qué ponerte, y tu armario estará siempre ordenado. En cuanto laves un conjunto, va a la percha. El siguiente reto es ordenar los accesorios, como pañuelos y cinturones, ente otros. En términos generales, es mejor ordenar los complementos en baldas para los que lleves de diario, y guardar en cajones aquellos complementos de temporada, como chanclas, gorros de playa o bañadores.

Ropa en perchas, complementos en cajones y bolsos en baldas

Si tienes suficientes cajones, puedes reservar un par para complementos invernales, como gorros, guantes y bufandas; y otro par para complementos de verano y entre tiempo, como pañuelos y sombreros ligeros. Si no es el caso, tendrás que hacer uso de las confiables cajas de temporada, para ir guardando y sacando complementos, según sea verano o invierno.

Los zapatos merecen mención aparte. Es mejor reservar un zapatero u organizador de zapatos para ellos. Así no ocuparán espacio en el armario, se airearán y estarán más ordenados. Los bolsos son otro quebradero de cabeza. Si tienes un par de bolsos no hay problema, pero para las amantes de la marroquinería, organizar docenas de bolsos puede ser tarea imposible. Las baldas son tus mejores amigas, coloca los bolsos que más utilices a mano, y los de fiesta al fondo. Recuerda rellenar los bolsos de tela o piel blanda con periódicos, para que no se deformen y no cojan humedad.

El siempre confiable galán de noche

Por último, si no puedes resistirte a tener una silla con ropa o vas a ponerte el mismo conjunto un par de días seguidos, es mejor que adquieras un galán de noche. Están diseñados específicamente para colgar la ropa durante la noche, para que no se arrugue y puedas usarla al día siguiente. Es muy útil también para que, si no tienes espacio para guardar conjuntos individuales en el armario, los cuelgues en el galán de noche antes de dormir y no tengas que pensar cada mañana qué ponerte.