Los trucos que utilizan bares y restaurantes para que gastemos más dinero sin enterarnos

"Cada maestrillo tiene su librillo", y cuando se trata de supermercados o grandes superficies, las estrategias para atraer a la clientela y que gaste algo más de dinero, son infinitas. Lo que quizá no sabías es que los bares también tienen su propia estrategia. Seguro que en más de una ocasión has ido a un bar con la idea de pedir esa ración que tanto te gusta de croquetas, albóndigas o embutido, y te has percatado de que faltaba o sobraba una unidad, por lo que hacer un reparto equitativo se vuelve imposible.

Es una práctica muy habitual en los establecimientos de hostelería y, aunque a los clientes les saca de quicio, existe una razón de peso para que sea así. Es una estrategia para vender más raciones. Esto se traduce en una regla numérica, se basa en el uso de los números primos a la hora de servir las raciones. Cabe recordar que los números primos son aquellos mayores que uno y que únicamente se pueden dividir por uno y por sí mismos: el 2, el 3, el 5…

TE PUEDE INTERESAR

Los críticos 'gochos' que hacen de oro los bares de tapas: "Vino el de TikTok y estamos a reventar"

Mario Escribano Michael Mcloughlin

Para darte cuenta de cómo funciona este "truco", la próxima vez que vayas a un establecimiento de hostelería y pidas una ración con tus amigos o familia, lo más seguro es que el número de unidades sea impar. Claro que, en función de las personas que seáis, quizá el bar os sirva un número de unidades par. El objetivo es que surja ese «conflicto» porque la cantidad a repartir nunca sea igual.

Aperitivos gratuitos

Así, para equilibrar esa cifra, los clientes tienden a pedir otra ración. Claro que siempre queda la opción de dividir la última unidad. Otra práctica de muchos bares es servir aperitivos gratuitos a los clientes. Ahora bien, casi siempre son aperitivos salados, como patatas gratis, cacahuetes o almendras. Además de ser muy apetecibles cuando nos empieza a entrar hambre, también producen sed, por lo que acabaremos pidiendo alguna bebida más.

En algunos locales también cobran los cubiertos a los comensales. Sin embargo, FACUA advierte que es una práctica ilegal: "salvo que la idea sea que los paguen los clientes que quieran llevárselos a casa, es tan ilegal como que te cargasen una cantidad adicional por limpiar la mesa o poner el mantel. En resumen, no puede cobrarse nada que resulte necesario para la prestación del servicio. Por lo tanto, si te ocurre esto en algún momento, puedes pedir la hoja de reclamaciones y negarte a pagarlo", indican. Como puedes comprobar, los bares, al igual que los supermercados, tienen sus propias estrategias para que gastes más de la cuenta.