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¿Amistades tóxicas? Estas son las claves para identificarlas
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Un amigo es un tesoro

¿Amistades tóxicas? Estas son las claves para identificarlas

Tener amigos es clave para ser feliz. No lo decimos nosotros, sino la ciencia, pero alimentar un vínculo sano no siempre es tarea fácil

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Siempre se ha dicho que los amigos de verdad solo se cuentan con los dedos de una mano. Hay quien considera que tiene más de cinco y quien cree que tiene menos, pero ¿cómo saberlo con certeza? O mejor dicho, ¿cuándo hay que decir "basta" a quien creíamos un amigo? Las amistades, igual que las parejas o cualquier otra forma de relación, pueden ser tóxicas, y a veces la idea del vínculo parece más potente que perder a esa persona. Tal vez por eso no te estás dando cuenta, pero hay señales claras que te ayudarán a reconocerlo.

Tener amigos es clave para ser feliz. No lo decimos nosotros, sino la ciencia. Lo cierto es que pasar rato con ellos resulta que ayuda a reducir nuestro estrés y hasta evita el deterioro cognitivo. Además, las amistades también pueden ser un apoyo emocional. A través de ellas, el mundo desde luego resulta más interesante. Pero alimentar un vínculo sano no siempre es tarea fácil.

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Si te conviertes en una mala versión de ti mismo cuando estás con alguna de estas personas, déjanos decirte que no son necesarias en tu vida. Sí, da igual que os conozcáis desde hace muchos años, o que os veáis a menudo, si no hacen de tu tiempo un tiempo mejor, toca dejarles atrás.

De vampiros emocionales

De acuerdo con el libro The Psychology of Friendship, debes terminar amistades que te lleven a caer en comportamientos destructivos, es decir, que te hagan comportarte de forma negativa o peligrosa, ya que eso no ofrece ningún beneficio. Los vampiros emocionales existen y pululan sueltos. Si te sientes agotado emocionalmente después de ver a algún amigo o alguna amiga, mala señal.

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Cualquier psicólogo lo señala: las amistades saludables parten de la reciprocidad y el equilibrio. Vamos, que en una relación de dos no puede ser uno solo el que siempre cargue con los problemas del otro.

En este sentido, un buen amigo o una buena amiga no traiciona tu confianza cuando decides contarle algo que solo crees que podrías compartir con él o ella. ¿Se va de la lengua de tanto en tanto y cuenta tus secretos? Esto no pinta bien… Y déjanos decirte que si en estos casos su respuesta es “soy así” es momento de salir corriendo.

El gaslighting

Por lo general, la desconfianza surge aunque tu mente quiera correr un tupido velo. Y cuando existe un problema de confianza, comienza a torcerse la comunicación. Junto a esto, las actitudes manipuladoras o el llamado gaslighting, cuando tu supuesto amigo te hace sentir que tu opinión no es válida, que tus sentimientos no cuentan y que tal vez estás perdiendo la cabeza cuando le cuentas un problema.

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La comunicación es esencial en cualquier relación sana y debes sentir que puedes decir lo que piensas sin que vayan a juzgarte. Tenlo en cuenta. Y junto a la confianza conforma el péndulo en el que se balancea. ¿Pones siempre el hombro, los planes o incluso la cartera?

Nada raro resultan aquellos supuestos amigos que "olvidan" la cartera constantemente, los que nunca se ofrecen para ayudar y no hacen nada bueno por los demás y te hacen sentir usado todo el tiempo. Por supuesto, estar ahí en "lo bueno y lo malo" es ley no escrita entre amigos, pero siempre y cuando sepas que ellos harían lo mismo por ti. Si cumplen todo esto, enhorabuena.

Siempre se ha dicho que los amigos de verdad solo se cuentan con los dedos de una mano. Hay quien considera que tiene más de cinco y quien cree que tiene menos, pero ¿cómo saberlo con certeza? O mejor dicho, ¿cuándo hay que decir "basta" a quien creíamos un amigo? Las amistades, igual que las parejas o cualquier otra forma de relación, pueden ser tóxicas, y a veces la idea del vínculo parece más potente que perder a esa persona. Tal vez por eso no te estás dando cuenta, pero hay señales claras que te ayudarán a reconocerlo.

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