Cuando ser muy tacaño se convierte en algo serio: así es la 'crometofobia' o el miedo irracional a gastar dinero

A no ser que tu cuenta bancaria rebose en cifras, lo de gastar dinero no te gustará mucho. Y por esa regla de tres, muy poca gente puede decir que abrir la cartera le importa poco. No obstante, frente a esa sensación se coloca otra igual de potente: gastar dinero también nos provoca un gran placer, quizás porque ello significa que mientras perdemos obtenemos algo, o quizás por el simple hecho de que pagar algo supone que podemos pagarlo.

Sin embargo, hay quienes sufren al hacerlo, sea cual sea (dentro de lo más común) su estado bancario, pero no sufrir de cierta molestia consciente, sino que se trata de un grado tan alto de sufrimiento que la ciencia le ha puesto nombre: "crometofobia".

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E. Zamorano

La "crometofobia" está un paso más allá de la cautela y la tacañería. Podríamos entenderla como un miedo a soltar billetes. En principio, no es tanto un trauma como el que alguien puede sufrir por conocer lo que es la escasez en periodos anteriores de su vida, o porque en algún momento fue estafado o bien se endeudó tanto que ahora prefiere controlarse. Nada de eso. La "crometofobia" es un miedo irracional y extremo a gastar dinero.

No hay razón clara

El concepto, eso sí, es de uso informal, pues no es un "desorden" mental reconocido médicamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE). Sus formas, por otro lado, son bastante claras.

Para empezar, la ansiedad es uno de los rasgos más comunes en alguien que sufre "crometofobia" cuando debe pagar algo que puede ir desde un café o una entrada al cine a algo más caro. Además, acuerdo con la BBC, quien sufre de esta fobia puede padecer otros síntomas que a su vez se relacionan con la ansiedad, como dificultad para respirar, taquicardia, incremento de la presión arterial, sudoración, náuseas, dolor muscular o diarrea.

Mientras tanto, como para muchas de las fobias en general, sigue sin conocerse a nivel científico una razón clara por la cual alguien puede llegar a desarrollarla. Estas personas, por lo general, suelen sentirse sumamente estresadas cuando se tocan temas de dinero, por lo que evitan hablar de él y por supuesto, hacen todo lo posible para no usarlo.

Miedo a tener dinero

Lo peor no queda ahí, ya que dichas personas no solo tienen miedo de gastar, sino también de tener dinero. Según explican desde Psychtimes, alguien con "crometofobia" puede darse cuenta de que su miedo al dinero es irracional, "pero cuando está en medio del dinero o de un objeto caro, es probable que no pueda racionalizar la situación del todo. De hecho, dependiendo de la gravedad de su condición, incluso pueden necesitar ser hospitalizados".

Por lo pronto, los expertos siguen considerando que debe ser resultado de un trauma previo, aunque también sugieren que puede haber una relación de carácter genético, incluso podría tratarse de una conducta aprendida cuando eran niños.