Tiene el récord Guiness al hombre con más cuadros tatuados del mundo

Matt Gone es un apasionado del ajedrez, hasta tal punto, que ha llevado esa pasión a tatuarse su deporte favorito por todo el cuerpo. Este estadounidense amante del juego del tablero se ha tatuado hasta 848 cuadrados por todo el cuerpo para demostrarle al mundo su amor hacia el ajedrez. La noticia se ha hecho viral en redes sociales y Matt Gone ha entrado en el Libro Récord de los Guiness.

El ajedrez es un deporte-en algunos organismos no está considerado cómo tal-que tiene muchos adeptos y, para este hombre, es directamente una forma de vida. Por ello, Matt Gone se ha tatuado un tablero completo en la cara y por el resto del cuerpo. La afición por los tatuajes de este hombre viene de lejos.

Y es que, con 14 años, este estadounidense ya se hizo su primer tatuaje. Su madre, para intentar quitarle la afición autodidacta de tatuarse a sí mismo, decidió acompañarle a un estudio profesional para que fuese un especialista quién le hiciera los dibujos en el cuerpo. Matt Gone fue enamorándose del mundo de los tatuajes hasta acabar convirtiéndolo en una forma de vida.

Hay 848 cuadrados en su cuerpo

Por ello, actualmente, trabaja para una empresa de tatuaje medicinal, que está especializada en las amputaciones de pecho en mujeres que han sufrido cáncer de mama. Este excéntrico terapeuta reconoce que le siguen mirando por la calle: “Es cierto que no es normal cómo estoy tatuado, pero yo me siento feliz con mi imagen”.

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Matt Gone recibió el galardón entre vítores y, en el vídeo realizado para Youtube, muestra prácticamente todos los tatuajes que tiene en el cuerpo. A simple vista, parece muy claro que este hombre tiene ocupado cada rincón de su piel. Apenas hay espacio para que un nuevo dibujo pueda ser creado.

Este terapeuta amante de los tatuajes reconoce que al principio no fue nada fácil: “Cuando yo comencé no estaba de moda, era para gente que estaba apartada de la sociedad. Me ofrecía libertad y, por ello, me he sentido tan identificado con los tatuajes. Son una manera de vivir para mí y me siento afortunado”.