Se gasta 16.000 euros en el vestidor de sus perros y nunca repiten modelo

Una mujer de Arizona (Estados Unidos), propietaria de dos perros parti-yorkies (que pertenecen a la raza yorkshire y se caracterizan por tener un pelaje tricolor), se ha gastado la friolera de 16.600 euros en su guardarropa. El vestidor está compuesto por unas 600 prendas de vestir de todos los colores y cada atuendo cuesta entre los 9 y los 75 euros.

Sheila Odden, que así se llama la mujer, ha reconocido que es adicta a mimar a sus perros y que quiere lo mejor para ellos. Sammie, de 5 años, y Maddie, de 4 años, tienen su propio vestidor repleto de vestidos y de jerséis. Pero, por si esto fuera poco, su dueña también ha desembolsado cerca de 1.600 euros en una colección de accesorios compuesta por pañuelos, lazos y moños artificiales para sus mascotas.

“Los perros son mis bebés y me encanta verlos bien vestidos en todo momento”, dice Sheila. “Puede sonar tonto, pero es muy adictivo. Hay tantas cosas bonitas por ahí que tengo la necesidad de comprarles algo que he visto a otro perro en Instagram”, afirma la mujer de 46 años.

"Nunca repiten la misma prenda"

“Empecé a comprarles ropa cuando mi hijo Zac, que ahora tiene 25 años, fue a la universidad a los 20. Desde entonces, he estado enganchada” manifiesta orgullosa la dueña de este par de parti-yorkies. Reconoce que en casa no los viste, a menos que haga mucho frío en invierno, “pero tan pronto como les saco la ropa, se emocionan y comienzan a mover la cola. Son felices y nunca les dejo usar la misma prenda dos veces”.

Odden, que es gerente de proyectos, reconoce que “la mayoría de las veces, Sammie y Maddie están en un cochecito, lo que despierta la curiosidad de la gente por saber qué hay dentro. Algunas personas me miran como si estuviera loca, pero mis perros están viviendo su vida a lo grande”.

En cuanto a la ropa, Sheila asegura que no solo compra, sino que también la hace. “Su guardarropa es una mezcla de ropa hecha a mano por mí, como la mayoría de sus tutús. El resto, la compro a una media de uno o dos vestidos por semana”. Además, para financiar este gasto, afirma que ella también vende ropa a personas de todo el mundo a través de su propia marca de ropa 'Miss Sophie'.

"Tan pronto como les saco la ropa, se emocionan y comienzan a mover la cola. Son felices"

Sammie y Maddie llevan una dieta cruda “sana y equilibrada” que cuesta unos 105 euros al mes y se bañan cada 7 o 10 días. “Además, aprendí a cortarles el pelo, así que les arreglo yo misma”, concluye.