Por qué comer mucho te puede llevar a envejecer, según un estudio

El 25% de la población española es obesa o tiene problemas de sobrepeso. El ritmo de crecimiento de esta enfermedad ya es tan acelerado como en Estados Unidos, situando a nuestro país en el segundo puesto de Europa, por detrás del Reino Unido, con más casos de la considerada “pandemia del siglo XXI”. Las cifras de obesidad casi se han triplicado desde 1975. En niños y adolescentes, es aún peor, con un aumento de diez veces mayor en el mismo período de tiempo. ¿Qué estamos haciendo mal?

Tal vez hemos estado observando la epidemia de obesidad de manera incorrecta, según dicen los científicos. Un nuevo estudio publicado en la revista 'Obesity Reviews' sugiere que hemos perdido la conciencia de lo que la obesidad realmente representa.

La obesidad, afirma el equipo, es una forma de envejecimiento prematuro, algo que pone en peligro nuestra salud y acorta nuestras vidas de manera notablemente similar a los procesos inevitables de envejecer y sucumbir a enfermedades relacionadas con la edad.

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El Confidencial

"Estamos tratando de mostrar exhaustivamente que la obesidad es paralela al envejecimiento", explica la nutricionista Sylvia Santosa de la Universidad de Concordia en Canadá. "De hecho, los mecanismos por los cuales se desarrollan las comorbilidades [coexistencia de dos o más enfermedades en un mismo individuo, generalmente relacionadas] de obesidad y envejecimiento son muy similares".

En la nueva investigación de Santosa, ella y su equipo revisaron más de 200 estudios que analizaron los efectos de la obesidad, desde la perspectiva celular y molecular hasta el impacto de la afección en el sistema inmunitario, la cognición, la movilidad y más.

Un espejo del envejecimiento

El resultado de su análisis es que la obesidad, en términos de peso sobre la salud, es efectivamente un espejo del envejecimiento: una condición que predispone a las personas a la aparición temprana de las enfermedades crónicas que generalmente asociamos con el envejecimiento.

La obesidad es paralela al envejecimiento, los mecanismos por los cuales se desarrollan son muy similares, según un nuevo estudio

Para ser claros, si bien los investigadores afirman que la obesidad acelera el envejecimiento, en realidad no sugieren que el envejecimiento y la obesidad sean literalmente lo mismo. Más bien, en la medida en que podamos establecer paralelismos entre los conceptos desde la perspectiva de la patología, la obesidad y el envejecimiento son "dos caras de la misma moneda".

"Pido a la gente que enumere las comorbilidades de obesidad", transmite Santosa. "Después pregunto cuántas de esas comorbilidades están asociadas con el envejecimiento. La mayoría de las personas dirán: todas ellas. Ciertamente hay algo que está sucediendo en la obesidad que está acelerando nuestro proceso de envejecimiento".

En términos de cómo, los investigadores citan numerosos ejemplos de mecanismos potenciales, que incluyen cosas como disfunción mitocondrial basada en la obesidad, inflamación sistémica y respuestas del sistema inmunitario debilitado. También plantean el efecto de acortamiento que se cree que la obesidad tiene en los telómeros, que actúan como tapas protectoras en el extremo de las hebras de ADN, y están relacionados con la longevidad.

Es un argumento convincente, todo sea dicho, y la cantidad de cruce es ciertamente sustancial. Pero también vale la pena tener en cuenta que el punto central de los investigadores es principalmente una lista de comparaciones, no una ecuación directa de las dos cosas separadas.

Hay varios ejemplos como la disfunción mitocondrial basada en la obesidad, inflamación sistémica y un sistema inmunitario debilitado

Por ahora, sin embargo, el dibujo de esa comparación puede ser suficiente para hacer algo bueno. En última instancia, lo que los investigadores quieren es darnos un nuevo paradigma para pensar cómo es la obesidad, con el fin de ayudarnos a tratar este problema abrumador en la salud global.

Otros estudios sobre la obesidad han intentado de manera similar replantear el contexto del problema, y dada la gravedad crónica de esta epidemia, las perspectivas frescas para caracterizar la condición son algo que definitivamente podemos usar, sin importar la forma que tome la analogía.

"Creo que es una buena idea porque la gente a menudo puede no estar tan preocupadas por el mensaje sobre la pérdida de peso, las personas pueden desconectarse de eso, ya lo han escuchado antes", señala a 'newsGP' la médica general Elizabeth Crouch, que no participó en el estudio.