Esto es lo que suele ocurrir con tu avión cuando te dicen que vuelo el se retrasa

Estás en el aeropuerto, esperando que por fin salga tu vuelo a las Maldivas. O, al contrario, quizá vuelves de las Maldivas y lo único que esperas es que por fin aparezca en pantalla tu puerta de embarque para poder acomodarte en tu sitio de una vez, y la cosa se retrasa. Ya sea porque tienes que estar tres horas rodeado de cientos de pasajeros tan descontentos como tú, o porque te despertaste al alba y resulta que ha llegado el mediodía y aún no has despegado, a nadie le gusta tener que esperar en un aeropuerto.

¿A qué se deben estas demoras en las que, en muchos casos, no te explican el motivo? Generalmente hay razones de peso detrás de los retrasos, especialmente cuando se trata de la seguridad de la tripulación. Sigue leyendo si quieres enterarte de por qué te desesperaste tanto con tu último vuelo.

Motivos de los retrasos

El clima. Según informa la revista 'Best Life', hay demoras climáticas generales y luego hay otras que son extremas. Las primeras incluyen vientos fuertes, tormentas eléctricas o niebla, las segundas van desde las tormentas de nieve a los huracanes. Esto puede suceder en aeropuerto de llegada o la salida pero lo bueno que tiene es que tan solo el 5% de los retrasos en vuelos se deben a esta razón.

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Restricciones de tráfico. También puede ser, pues los controladores en muchas ocasiones prefieren mantener un avión en tierra que dejarlo despegar si ya saben que va a haber retrasos en la ruta o en el aeropuerto de destino.

El típico retraso precedente. Alrededor del 40% de los retrasos en los vuelos se deben a estos tipos acumulativos. Los aviones siempre están en movimiento, saltando de un aeropuerto a otro, debido a que parados no generan ingresos para las aerolíneas. Si uno de ellos acumula un retraso es prácticamente imposible que se recupere a lo largo del día, se trata de una reacción en cadena.

Problemas mecánicos. Algunos los denominan como retrasos de los transportistas y comprenden alrededor del 30%. Un ejemplo de esto son los problemas mecánicos. Los aviones se someten a inspecciones exhaustivas entre vuelos, si todo es correcto no habrá problemas, pero si algo no estaba en los planes (no tiene que ser algo grave, puede tener que ver con incluso con los compartimientos), se necesita tiempo para arreglarlo.

Aunque depende del tiempo de retraso, si la demora se prolonga más de tres horas, en principio tienes derecho a indemnización económica

Preparación de la aeronave. Entre vuelo y vuelo es necesario limpiar la cabina, reabastecer el avión o algunos suministros como los alimentos y el papel higiénico. Si algún equipo responsable de estas tareas se retrasa, podría ser el culpable de que aún no te hayas montado.

Retrasos de equipaje. No suceden con demasiada frecuencia, pero también son posibles. Esto son causas imputables a la aerolínea, igual que un embarque que se retrasa o la preparación de la aeronave que ya mencionamos, y suponen aproximadamente un 30%.

Retrasos de seguridad. Se dan en una cantidad mínima, pero también es posible. Generalmente se deben a la evacuación de una terminal o a una violación de seguridad a la hora de embarcar.

El Reglamento (CE) 261/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo, establece que los pasajeros cuyos vuelos tengan un retraso de duración determinada en función de la distancia a recorrer tendrán derecho a información, atención y al reembolso de su billete o un transporte alternativo. Asimismo, y de acuerdo con una Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 19 de noviembre de 2009, tendrán derecho a compensación económica, aunque depende del tiempo de retraso, si la demora se prolonga más de tres horas, en principio tienes derecho a indemnización