Los alimentos que te ayudan a tener un vientre plano (y que no imaginarás)
Si te molestan esos kilos perennes en la zona del vientre, ponle remedio y anota las comidas que te ayudarán a hacerles frente
Sabemos que un vientre plano es un ideal diseñado a golpe de modelos, bisturí y Photoshop, pero la realidad es que una tripa lisa no solo contribuye a una silueta estilizada, sino que además es saludable, tanto para hombres como mujeres. Si te desvives en el gimnasio y aun así la barriga permanece, es probable que a tu menú y a tu rutina les falte un pequeño apoyo.
Antes de nada, olvídate de la utopía del vientre plano las 24 horas del día. Después de cada comida, es normal que la tripa esté más hinchada, lo que no indica necesariamente un problema de salud. No obstante, es cierto que algunos alimentos pueden favorecer la inflamación del vientre, mientras otros tienen un efecto casi nulo y permiten mantener el abdomen plano.
Algunos alimentos pueden favorecer la inflamación del vientre, mientras otros tienen un efecto casi nulo y permiten mantener el abdomen plano
La lógica es la siguiente: come para acelerar tu metabolismo y equilibrar el nivel de azúcar en la sangre. Puedes alimentarte cada tres o cuatro horas con, por ejemplo, una manzana o pequeño snack rico en proteínas. También ayuda reducir cantidades, tomarte tu tiempo (mastica), beber más agua y disminuir la ingesta de azúcares. Así que si te molestan esos kilos perennes, ponle remedio y anota los alimentos que te ayudarán a hacerles frente.
Cámbiate al pan integral
Evita los granos blancos refinados (como el arroz, la pasta o el pan blancos) y reemplázalos por sus alternativas integrales, mucho más saludables. Sin ir más lejos, el pan integral contiene cuatro veces más fibra, tres veces más zinc y casi el doble de hierro que el pan blanco.
En este caso, la energía se libera más lentamente. Es decir, los hidratos de carbono se rompen 'a fuego lento' y, por lo tanto, no dan lugar a una entrada repentina de azúcares en el torrente sanguíneo. Esta liberación gradual te ayuda a sentirte lleno por más tiempo, a suprimir su apetito y, por lo tanto, a detener esos antojos de dulce.
Mejor que el pan, incluso, sería comer granos enteros. Son una gran fuente de fibra que ayuda a la digestión, aumentan la saciedad y ayudan a regular los niveles de azúcar en la sangre y de insulina en comparación con los granos refinados. Prueba la avena o la quinoa. Pero, ojo, muchas marcas utilizan el latiguillo 'integral' en sus envases cuando no lo son, así que, para salir de dudas, mira la etiqueta y busca el 100%.
Legumbres
Las legumbres son una de las mejores fuentes vegetarianas de proteínas y fibras que, además, ayudan a tonificar el abdomen y a perder peso. Sus proteínas ayudan a eliminar la grasa del cuerpo y a desarrollar músculo. Asimismo, su fibra aumenta la sensación de saciedad.
Por si fuera poco, son una buena fuente de hierro, cuya deficiencia podría frenar tu metabolismo.
Aguacate
Quizá te preguntes por qué el aguacate (alto en calorías) está en esta lista. Pues bien, los ácidos grasos monoinsaturados de este alimento tan de moda tienen beneficios para el corazón y sus altos niveles de beta sistosterol reducen el nivel de grasa y colesterol en el cuerpo. Además, dado su poder saciante, se trata de uno de los alimentos más recomendables cuando pretendemos adelgazar.
Alcachofas
Ayudan a tu sistema digestivo y son excelentes para combatir la hinchazón del vientre. Con los siete gramos que se encuentran en una alcachofa de tamaño medio (el 30% de la ingesta diaria recomendada), este alimento te ayudará a sentirte lleno por más tiempo.
Sandía
Cuando tratas de perder esos kilos de más alrededor de tu cintura, los alimentos saciantes y bajos en calorías, como la sandía, son la solución. La fruta preferida del verano ayuda a satisfacer tus antojos por lo dulce y aporta gran cantidad de vitaminas y antioxidantes. Además de sus beneficios nutricionales, esta fruta es, en más de un 90%, agua, lo que ayuda a sentirse saciado antes.
Miso
En particular, el miso sin pasteurizar puede ser excelente para nuestra salud digestiva. Es una fuente natural de bacterias naturales que desempeñan roles esenciales en nuestro intestino, ayudando a la descomposición y la absorción de nutrientes. Su versión pasteurizada es tratada térmicamente y no tendrá los mismos beneficios. Por la misma razón, no lo calientes a altas temperaturas.
Chocolate negro
Si tienes una debilidad por lo dulce, estás de enhorabuena, porque no todos los chocolates están prohibidos. Como los aguacates, el chocolate negro (más de un 65% de cacao) contiene ácidos grasos monoinsaturados, que ayudan a acelerar el metabolismo. Además, la liberación de serotonina que provoca este alimento (mejorando así nuestro estado de ánimo) produce una disminución del estrés, lo que a su vez hará que comamos menos. Tan solo no te pases con las cantidades: con dos onzas al día es suficiente.
Salmón
Los pescados especialmente grasos como el salmón, el atún, la anchoa, el pez espada o la caballa son una excelente fuente de grasas saludables. Estos son los ácidos grasos omega-3, que ayudan a acelerar nuestro metabolismo, gracias a que estimulan la hormona de la leptina, que adeáms tiene la función de inhibir la sensación de apetito. Comer pesado azúl te ayudará a perder peso.
Sabemos que un vientre plano es un ideal diseñado a golpe de modelos, bisturí y Photoshop, pero la realidad es que una tripa lisa no solo contribuye a una silueta estilizada, sino que además es saludable, tanto para hombres como mujeres. Si te desvives en el gimnasio y aun así la barriga permanece, es probable que a tu menú y a tu rutina les falte un pequeño apoyo.