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Los ingresos de las farmacéuticas caerán un 10% con la nueva Ley del Medicamento
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Los ingresos de las farmacéuticas caerán un 10% con la nueva Ley del Medicamento

La redacción de la nueva Ley del Medicamento no sólo viene acompañada de la polémica sino que ha provocado divisiones dentro del propio Gobierno socialista. En

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Los ingresos de las farmacéuticas caerán un 10% con la nueva Ley del Medicamento

La redacción de la nueva Ley del Medicamento no sólo viene acompañada de la polémica sino que ha provocado divisiones dentro del propio Gobierno socialista. En concreto, entre Sanidad, ministerio que ha elaborado la normativa, e Industria, departamento que se encarga de velar por las empresas farmacéuticas afectadas por la Ley. Ante las críticas vertidas, el Ministerio dirigido por Elena Salgado llama a la calma: “Es un texto que todavía está abierto, pendiente de la tramitación parlamentaria”. Una calma, que sin embargo, no termina de llegar a la industria farmacéutica española.

Las compañías nacionales están inquietas por el impacto en sus cuentas de la nueva Ley del Medicamento. Si las medidas económicas planteadas en el anteproyecto, aprobado en el pasado Consejo de Ministros, salen adelante tal y como están redactadas, el sector estima que sus ingresos caerán un 10%. Por ello, FarmaIndustria negocia con Sanidad una fórmula para atenuar las consecuencias de la nueva normativa, que consideran “fuertemente intervensionista” porque “va claramente en contra de la competitividad empresarial. Resulta inasumible y tendrá, irremediablemente y de forma inminente, consecuencias sobre el empleo y la inversión”.

FarmaIndustria estima también que la norma “no tiene visión de futuro, porque presta escasa atención a la I+D farmacéutica”, además de acarrear “una importante pérdida de competitividad industrial en un sector moderno, dinámico y estratégico”.

A su juicio, el texto carga de forma desproporcionada la financiación del sistema público de salud sobre la industria. Las medidas más “dañinas” son las aportaciones económicas sobre las ventas de medicamentos que pueden llegar al 5%, la rebaja de los precios del 20% en medicamentos de más de 10 años de antigüedad y la inclusión de nuevas formas farmacéuticas innovadoras en el sistema de precios de referencia.

Según el anteproyecto, todos los medicamentos financiados por el Sistema Nacional de Salud con más de diez años en el mercado, que tengan el mismo principio activo y cuenten con un genérico, formarán parte de un conjunto para el que se calculará, con la media de los tres más baratos, el precio de referencia.

Si al aplicar esta medida el precio del producto se ve afectado en más de un 30%, para evitar un impacto desmedido en la actividad industrial, la nueva normativa establece que la empresa farmacéutica asuma la rebaja en mínimos de un 30% al año hasta alcanzar el precio de referencia. En cualquier caso, transcurridos diez años, reducirá la cuantía vigente en un 20%.

Desde Sanidad aclaran que no hay de qué preocuparse, ya que la ley final contará con un amplio consenso. Fue remitida a las comunidades autónomas y a los sectores implicados el pasado 8 de junio y, desde entonces, el ministerio ha mantenido “un amplio debate” tras el que se han incorporado modificaciones para mejorar su articulación final. “El texto ha sido también debatido en el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) el pasado 29 de junio y en diversas reuniones de la Comisión de Farmacia”, señalan en el departamento de Elena Salgado.

La redacción de la nueva Ley del Medicamento no sólo viene acompañada de la polémica sino que ha provocado divisiones dentro del propio Gobierno socialista. En concreto, entre Sanidad, ministerio que ha elaborado la normativa, e Industria, departamento que se encarga de velar por las empresas farmacéuticas afectadas por la Ley. Ante las críticas vertidas, el Ministerio dirigido por Elena Salgado llama a la calma: “Es un texto que todavía está abierto, pendiente de la tramitación parlamentaria”. Una calma, que sin embargo, no termina de llegar a la industria farmacéutica española.